-¿Todo en orden? –Daniel miro la maleta de Katherine de reojo
-Si –Ella asintió nerviosa, todo estaba en orden menos ella misma ¿Por qué sentía esa presión en el estomago que apenas la dejaba respirar?
-Bien ¿vamos? –Daniel camino hacia su aturo y abrió la puerta para que ella subiera
-¿eh? Si –Katherine echo un vistazo al portero que acababa de cerrar el maletero en el que había puesto su maleta. Se subió al auto inspirando aire profundamente y fijando su vista en el frente.
El trayecto al aeropuerto fue eterno y cargado de tensión, ninguno de los dos hablaba, ambos estaban nerviosos. Daniel aparco su auto y después de ayudarla a bajar se dirigió al maletero para sacar las maletas. Para sorpresa de ella, el no le permitió coger la suya.
Se sentía extraña caminando por el aeropuerto junto a el, como si fueran una pareja ¿enserio acababa de pensar en eso?
-¿Estas bien? –Daniel la observo con el ceño fruncido –Tenemos que embarcar
-Si, no te preocupes –Katherine suspiro
-De acuerdo –El se encogió de hombros -¿Vamos?
Ambos facturaron las maletas y se prepararon para entrar al avión, cuando estaban en la cola a punto de entregar los billetes los gritos de un hombre llamaron su atención.
-¡Katherine! ¡Katherine! –Alan corria por el aeropuerto con su hija entre sus brazos
-¿Alan? –Ella se alejo de la cola sorprendida, camino hacia el deprisa -¿Qué haces aquí?
-Esther quería darte algo antes de que te marcharas –El sonrió con cariño mirando a su hija
-Toma tata –La niña le entre un cordón negro con una piedra colgada
-Para que la recuerdes cada día –Alan le guiño un ojo sonriente
-No necesito nada para recordaros a ambos –Katherine abrazo a su hermano y a la niña fuertemente –Siempre estáis en mi corazón
-Cuídate hermanita –Alan le guiño un ojo –Y no seas demasiado mala
-Alan –Daniel se acerco a ellos con una sonrisa Ver a Katherine sonreír y abrazar a su familia era algo maravilloso
-Daniel, espero que me la cuides –Alan miro a su hermana de reojo
-¿Desde cuando necesito yo que cuiden de mi? –Katherine se hizo la ofendida –Es otro el que necesita ser cuidado
-Tata –Esther se lanzo a los brazos de su tía que la tomo cariñosamente y le dio un beso en la mejilla
-¡Dani! ¡Dani! –Al oír su nombre el se giro para encontrarse con la imagen de su hermana corriendo hacia el y a su lado, ¿su madre? ¿Qué estaban haciendo allí?
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La Secretaria
Romance¿Por qué no? Liberarse, divertirse, solo una vez, una noche ¿Qué podía pasar? Constantemente su amiga Emilie insistía en ello y al final se decidió, ella Katherine Wolfth actuando sin pensar en las consecuencias. Pero solo seria una noche, después d...