Capitulo XXXIV

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Fiorella

–¿Ya tenemos todo lo que vamos a necesitar?– pregunto a Jennifer, ella revisa las notas en su teléfono y asiente.

–Sí, solo tenemos que facturar y pedir que lo lleven a la mansión de los jardines blancos– me dice, su teléfono suena con lo que parece una llamada, ella lo ve y enseguida se le forma una sonría– Tengo que atender, no me tardo– me dice mientras se aleja unos pocos metros en la tienda.

Estoy casi segura de que se trata de Diff, ella y el grandote solo sonríen de esa manera cuando se trata de el uno del otro, el amor, sonrío tontamente.

Yo estoy igual con mi Maxi, Mi Maxi, se escucha tan bien decirlo, me alegro mucho de que hayamos aclarado las cosas sobre la señorita Charlotte, recordar a la mujer me hace estremecer. No soy una persona rencorosa o violenta, pero si ella vuelve a insultarme o peor aún insinuar algo sobre ella y Maximiliam no seré tan pacifica y le haré entender que la novia de Maximiliam soy yo.

Otro que tiene que saberlo es Nicholas, con él tengo una buena amistad, pero lo confundió con algo más y tengo que decirle que estoy en una relación con su hermano, no quiero herir sus sentimientos pero tampoco quiero que siga creyendo que hay una posibilidad de que pueda corresponderle.

Mientras estoy pensando en cuando sería buen momento para hablar con él, Jenny regresa de su llamada aún sonriendo.

–Listo, podemos irnos– pasamos por caja y brindamos la dirección a donde deben de mandar todo, subimos al coche de Jennifer y partimos en dirección al penthouse de Maximiliam–No tengo la más mínima maldita idea de que voy a disfrazarme– dice. Olvidé mencionarlo Ana decidió que su fiesta sería de disfraces y como sus padres la adoran con todo su ser no pudieron negarle nada, me alegro mucho de que mi pequeña Anastasia haya hecho algunos amigos en su escuela, hace poco me contó que unos niños de su escuela la defendieron de las petulantes niñas que se metían con ella.

–Creo que me caen mejor los niños que las niñas– esas fueron sus palabras cuando me hablaba de sus compañeritos de clase a quienes invitó a su fiesta de mañana.

Observo a Jennifer, cada día nos volvemos más cercanas y eso me encanta, pienso en lo que dijo y tiene razón, yo tampoco tengo idea de que disfrazarme.

–Tenemos toda la noche para pensar en eso, algo se nos ocurrirá– digo.

–No creo que tengas tiempo en la noche– confundida la observo– Ay vamos, de seguro tú y Maximiliam se la pasan muy ocupados por la noche– dice subiendo y bajando las cejas.

Me sube el calor a las mejillas por su insinuación, si supiera que estamos en sequía, hemos pasado varias noches juntos en la misma cama, pero desde aquella ves donde...ejem, me tocó ahí, Maximiliam no muestra intensiones de querer avanzar en ese ámbito. Jennifer observa mi experiencia y abre la boca sorprendida.

–No me digas que no lo han hecho– sin saber que decir, solo niego con la cabeza–Mira tú, nunca me imaginé que Maximiliam tuviera un caballero en su interior demoníaco.

–No sé si sea caballerosidad– digo– Creo que no está muy interesado en ese lado de la relación– Jennifer me observa con gesto que dice ¿Es en serio?

–Por favor Fio, si el maldito pervertido ni se esfuerza en disimular las miradas que lanza a tus tetas o tu culo–  recuerdo como devoró mis pechos aquella noche y empiezo a creer lo que dice Jennifer.

–¿Entonces por que no avanzamos?– pregunto confundida.

–Los hombres son estúpidos, no entienden cuando estamos listas para llegar al siguiente nivel– gira en una esquina y continúa–Por ejemplo Diff, chica, si por él fuera hubiéramos sido célibes– la observo intrigada por lo que cuenta– Así que decidí hacerme cargo, le demostré que yo estaba lista para la intimidad,  pero quiero que te quede claro Fiorella, que tienes que estar cien por ciento segura, yo no soy virgen, pero eso no es impedimento para darme mi valor en el sexo, nosotras decidimos si queremos hacerlo, así que no importa si Maximiliam ya tiene el condon puesto y están a punto de hacerlo, si no estas lista, paras y listo, no estas obligada a nada, ¿Entendido?– pregunta, siento como si fuera mi hermana mayor explicándome en que consiste el sexo.

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