En escala de grises y luego tú.

Capítulo 11

Mentiría si dijera que no he pensado en Liam, Todavía tengo clavados esos ojos azules en la cabeza, y mi mente no deja de sobre pensar en las posibles causas de su nuevo estado. Me desconcierta preocuparme tanto por un desconocido que no tolero la mayoría del tiempo.

Un trago mas y continuo con mi tarea de espionaje. Localizando a mi objetivo por fin.

El objetivo se acerca a la barra, parece que ordena algo y...

Mierda, olvide disimular.

Aparto la mirada pero ya es tarde para eso. Se acerca más hasta mi puesto y me saluda con una sonrisa seguida de una inclinación de cabeza.

Le hago una seña a Toby para que me sirva otra bebida y finjo prestar atención a los chicos en la pista.

-¿otra vez problemas personales?

-no -lo encaro

parece divertido mientras bebe de su trago- claro

-solo me lo paso bien -siento la necesidad de aclararle

-hmjum, se nota mucho

Parece ser que su estado de animo ha regresado a la normalidad. Muy bien, ya no tengo porque preocuparme.

Toby me sirve la bebida que le pedí, la tomo y de nueva cuenta me giro para observar a la multitud que baila en la pista al compás de la música.

Quisiera ignorarlo pero por mas raro que parezca siento su mirada sobre mí, inconscientemente volteo para encontrarlo observándome sin ningún tipo de vergüenza mientras sigue bebiendo de su vaso. Inmediatamente siento como el calor me sube a la cara-debe ser efecto del alcohol- regreso la vista a los chicos, tratando de ignorar las horribles sensaciones que empiezo a sentir por su cercanía.

-por fin saliste de la cueva -Marlene se acerca a la barra colocándose entre Liam y yo.

Su primo le contesta algo que no alcanzo a escuchar por el volumen de la música.

-vengan, vamos a bailar -Marlene me engancha con un mano y con la otra toma a su primo, tirando de ambos para que la sigamos.

-tengo trabajo pendiente arriba -se excusa divertido

Pero Marlene sigue tirando. -venga, no sean aburridos- me mira a mí-vamos.

-he tomado mucho Marlene-me hizo puchero -no creo que pueda bailar.

-ambos son unos aburridos -se rindió por fin y se marchó a la pista

De nuevo sentí los ojos de Liam sobre mí, esta vez tomé valor y decidí enfrentarlo -¿qué tanto me ves?-le recriminé con molesta

-trato de entenderte

Eh? Escuché bien?

-¿perdón?

-si,- sus ojos analizándome -pareces no encajar en este ambiente.-concluyó

Solté a reír divertida por su "grandiosa" opinión

-tus amigos te obligan a venir o vienes solo por quedar bien con ellos?-cuestionó borrándome todo rastro de risa.

Si supiera que vine solo para ver si seguía en su modo raro, pero claro que no se lo diría.

-no te gusta que venga a tu bar?-lo contraataqué

-no quise decir eso -de pronto pareció salir de su estado analítico para parecer apenado -es solo que parece que estuvieras obligada.

-Es que estoy cansada -fue la única excusa que se me ocurrió

-ya. -pareció no creerme pero al menos ya no sacó el tema.

Seguimos hablando de cosas triviales, bueno, él estuvo sacándome conversación cosa que me pareció rara, pues fue bastante amable y en varias ocasiones me hizo reír.

Creo que después de todo no es tan imbécil como yo pensaba.

~~~

-Lu

-mhm?

-tu madre quiere hablar contigo.

Me recomodo sobre la cama enterrando la cara en el colchón -no

-le diré que llame mas tarde porque te estás duchando.-y con eso escucho que se marcha.

Definitivamente Olivia es el ser humano que mas quiero en el mundo y mi heroína.

Me volví a dormir de nuevo.

Zuuuuum zum

Ay no!

Zum zummmm

Me recomodo en la cama.

Zum zum

Maldita mierda.

Me incorporó sobándome la cara con las manos tratando de espantar el sueño y tomó el celular para contestar la llamada que seguramente es de mi madre.

Me aclaro la garganta y contesto. 

~~

Al salir de mi habitación me encuentro con Olivia recostada sobre el sofá de la sala viendo una se sus series favoritas, me tiro de mala gana sobre el otro sofá.

-¿malas noticias?

Creo que mi cara lo dice todo.

-no te amargues, yo te acompañaré.- me guiña un ojo. -cuando nos vamos?

-hoy.

-qué?- se sienta a la velocidad de la luz con la boca abierta

-ya sabes como son- me encojo de hombros.

-ok- se levanta del sofá -vamos a hacer maletas.-camina en dirección a su habitación

Después de un rato sale -¿pero? -se para frente a mí de brazos cruzados-¿no piensas hacer maletas?

-no

No quiero y no lo necesito, después de todo voy a mi casa, ahí tengo todo lo que necesitaré.

-ok, parece que arruinaron tu humor.

La miro confundida

-anoche parecías de muy buen humor platicando con Liam-sonríe con socarronería.

-parecían buenos amigos.

-estas loca- me hice la disimulada.

-sí claro - volteo los ojos -estabas tan contenta con él que ni siquiera te querías regresar a casa.

-mentira- le aventé un cojín del sofá

-Lucía tuvimos que decirte como cuatro veces que ya nos íbamos- me recrimina.

-que exagerada eres, solo fueron dos veces y la primera vez les dije que ya salía.

Se rió- lu, te gusta Liam?

Sentí como la sangre se me calentaba en la cara- qué? No.

-oh yo creo que sí- sonrió -hace unos días estabas preocupada por él y ayer cuando dijimos que iríamos al Royal Night ni siquiera tuvimos que rogarte para que fueras con nosotros y estuviste con mala cara todo el rato en la barra hasta que él apareció.-ensancho la sonrisa - y te pillé un par de veces sonriéndole.

-¡ay cállate!, estas enloqueciendo.- me defendí.

-ok, estas en negación- se dio la vuelta, regresando a su habitación.

Claro que no me gusta, solo me está cayendo bien. Olivia se estaba armando novelas en la cabeza.