Isabella

CAP 35

Isa

Íbamos de regreso en el auto y como algo que se estaba volviendo rutina durante los viajes la música nunca faltaba. Papi dijo que daddy nos estaba esperando en casa para almorzar, nos habíamos despedido rápidamente de Lisa y aunque Luciana trató de unirse a nosotros por obra del hermoso destino recibió una llamada de no sé quién y tuvo que retirarse.

- ¿ Qué te pareció la oficina cielo ?- la pregunta de papi hace que deje de prestar atención a la carrete

- es realmente bonita papi, me encantan los ventanales pero tu oficina no parece tener tu esencia

- contraté a alguien para que remodelará todo el edificio y dejé que hiciera lo que quiera, hace algunos días terminaron la mayor parte y debo decir que quedó muy bien hasta ahora pero como tu lo has dicho le hace falta mi toque, ya haremos algo para solucionar eso- papi continúa contándome durante el resto del vieja sobre los cambios que ya se hicieron y de los que se harán.

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Entramos a casa y todo estaba en silencio, papi gritó el nombre de daddy pero no hubo respuesta. Nos dirigimos hasta la cocina donde papi deja el bolsito donde están las botellas de jugo y mi bolso sobre la encimera, aprovecho y busco dos botellas de agua, al parecer no me bastaron las tres botellitas de jugo que tomé en la oficina, me acerco hasta donde está papi le extiendo una de las botellas y él la toma. Él vuelve a llamar a daddy y esta vez si recibimos respuesta aunque se escucha lejana.

- Debe estar en el segundo piso -dice papi antes de volver a gritar- ¡baja!

- ¡ Voy !- devuelve el grito

- ¿ quieres algo en especial para el almuerzo nena ?

- suelo comer de todo, así que lo que hagan está bien para mi

- Esperemos a Xander y que nos cuente que tiene en mente para cocinar, él es el responsable de que no muramos de hambre- dice en un susurro que me hace reír

- llegué - dice daddy entrando y rápidamente se acerca a dejarnos un beso a cada uno y se sienta a mi lado.

-¿ que hicieron durante el tiempo que estuvieran afuera ?-

- fuimos a mi casa y al he traído mi mantita - es lo único que digo para después tomar un largo trago de agua

- eso es excelente muñeca, así no tendrás problemas para dormir

-sii- me acerco hasta él y lo abrazo

En un rápido momento estoy sentada en su regazo

-¿comoda?- pregunta con una sonrisita

-sip- respondo dejando que me abrace

- hemos visto a Luciana -continúa Alex levantándose para llevar las botellas al fregadero

- que bien - murmura daddy y para mi sorpresa no parece entusiasmado con la noticia, al parecer a alguien más no le agrada Luciana.

Alex pasa por alto el tono de daddy, como si estuviera acostumbrado a eso y decide cambiar de tema.

- ¿ Y tú por qué estás tan despeinado y sucio? - pregunta papi y solo ahí le presto más atención a la ropa de daddy

- llegaron los paquetes y los subí a la habitación- dice simplemente encogiéndose de hombros

- bien - aplaude papi - podemos empezar a desempacar después de comer

Xander decide empezar a preparar el almuerzo y aprovecho para pedirle a Alex su celular y llamar a nana. Hablo con ella durante largo rato hasta que escucho que me llaman haciendo que me despida de ella no sin antes enviarle muchos besos.

La comida transcurre con normalidad y una plática amena y al terminar solo recogemos los platos dejándolos en el lavaplatos, ya se encargaría Julieta de limpiar todo.

Los tres subimos hasta su habitación para cambiarnos, papi es el primero en entrar y con daddy nos acostamos un rato y aprovecho para seguir viendo la película que dejé sin terminar.

Algo que he notado es que ambos suelen jugar con mi cabello cada vez están cerca de el y no me estoy quejando para nada, todo lo contrario me relajaba que lo hagan, yo juego con su mano sin apartar la vista de la película. Siento el beso que deja daddy en mi frente y murmura que es su turno de cambiarse así que lo suelto pero a los segundos vuelven a acostarse a mi lado y esta vez es papi.

La película al fin termina, estoy apunto de caer dormida y la mano de papi en mi cabello no ayuda a mantenerme despierta. Suelo tomar una corta siesta en el colegio y eso debió pasar hace algún rato ya.

- Muñeca ya puedes cambiarte - habla daddy

-voy- bajo de la cama y voy hasta donde dejaron mi bolso y busco lo más cómodo que encuentre.

Entro al baño y teniendo nulas ganas de moverme duro mucho más de lo normal en cambiarme. Cuando al fin termino salgo acomodando el gorrito del abrigo sobre mi cabeza.

-Lista -murmuro

-ven aquí cielo - me acerco hasta daddy quien está sentado en la cama vestido con un pantalón y camisa deportiva

- ¿Dónde está papi?- pregunto al no verlo por ningún lado

- Aquí estoy nena - dice entrando y con biberón en alto

- pero íbamos a desempacar los paquetes

- estas a poco de caer dormida muñeca - me delata

-pero yo quiero

-lo sé nena pero, qué te parece si en lo que tú duermes nosotros sacamos las cosas de las cajas y cuando tu despiertes terminamos de acomodar todo

- ¿te parece cielo?- lo pienso un poco, la verdad es que si tengo sueño y se que mi humor puede ponerse muy feo si no duermo bien.

- bien - respondo y extiendo mi mano para que me de mi biberón - pero no pueden comenzar sin mi - demando

-si señora - hacen un saludo militar haciendo que ría, Xander acomoda las sábanas para que entre en ellas

-¿se pueden quedar hasta que me duerma?- asienten y cada uno se coloca a mi lado

No transcurre mucho tiempo para que logre conciliar el sueño.

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Xander

Cuando estamos seguros que se ha dormido nos levantamos tratando de ser lo más silenciosos, coloco una alarma con la hora en que debe despertar y salimos de la habitación para entrar a la otra y así empezar a desempacar, son cerca de veinte cajas en total nos tomará algo de tiempo pero ya entraremos la forma de no aburrirnos.

Empezamos con las cajas más grande donde estaban algunas repisas para los materiales de dibujo, en otras cajas estaban las pinturas, pinceles y todo lo necesario que nuestra muñequita dibujara, dejamos sin desempacar las cajas donde están los peluches y ropa, queremos que ella se encargue eso.

Reviso la hora y aún quedan unos minutos para que suene la alarma. Bajamos hasta la cocina y entre bromas y otras cosas, preparamos la merienda y justo a tiempo suena la alarma.

-voy yo- le aviso - ¿llevas las cosas al jardín ?

-claro

Subo las escaleras y entro a la habitación, me siento a su lado y empiezo a dejar besos ruidosos en sus mejillas hasta que la escucho reír.

-arriba cielo- corro los mechones que tiene sobre el rostro

-hola- murmuró comenzando a estirarse como un gatito

-hola- sin más demora la tomo en brazos para después salir y dirigirnos al jardín.

Hasta aquí mi reporte Joaquín

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