Aún con la ropa y cara salpicada de sangre, Jungkook estaba. Sentado dentro de la consulta de un médico que se le había ordenado revisar que todo estuviera bien con el chico.
Pero el no hablaba, miraba la pared con una expresión en blanco y eso estaba preocupando al doctor Lee. Había sido solo un día el que había estado secuestrado, ¿por qué actuaba como si hubiesen sido años?
Jugaba con sus dedos, movía sus pies pero de su boca no salía absolutamente, nada.
—¿Estás bien?
La voz del señor Lee salió temerosa, extraño en un médico de carácter duro como el de él. Pero aquél muchacho lo hacía sentir inseguro y con una pizca de terror.
No sabía si el chico tenía problemas mentales y quizás por eso temía, ya que la semana pasada, casi muere en brazos de un chiquillo que tenía esquizofrenia y él no sabía.
—¿Me puedo marchar?
—Necesito revisarte, chico. Hagamos esto rápido, ¿si?
—Yuknow no me golpeó, tampoco abusó de mi. ¿Hay algo que revisar en mi cuerpo? Estoy bien, solo necesitó estar encerrado en mi habitación para procesar que un chico se disparo en la frente ¡Justo a mi lado!
Los ojos de Jungkook se cristalizaron, cerrando sus puños sobre sus muslos. El doctor asintió y escribió en un papel.
—Vamos, necesitaré hablar con tus padres.
Lo primero que sintió el menor al salir de la consulta, fue los finos brazos de su madre, envolverlo.
Su madre no era el ser más cariñoso que existía, era todo lo contrario. Una mujer de fuerte carácter y fría, como la gran mayoría de la gente de Europa. Su madre tenía sangre inglesa, de parte de su padre. Era evidente que sacaría su misma mirada de hielo y sus sentimientos congelados.
Pero su padre no era diferente, tenía casi la misma actitud fría pero podría decir que más. Mientras su madre preguntaba como había sido su día y sobre sus relaciones (amorosas y amistades). Su padre preguntaba sobre las notas escolares y le reprochaba trabajar cuando tenía todo lo que quería.
—Estás bien, mi bebé. Mami esta acá
Susurró con dulzura, provocando un revoltijo en su estomago ya que no acostumbraba a oír aquél tono de voz de mamá.
—Señores Jeon, acompáñenme, por favor.
La voz de señor Lee lo sacó de su trance y de los brazos de su madre, también.
Jungkook caminó un poco más allá cuando observo como sus progenitores iban detrás del raro doctor que lo atendió.
Jimin le sonrió de donde estaba, dejando de lado los brazos del azúcar que había vuelto al cabello rosa.
Los amigos se abrazaron por mucho rato, susurrándose cosas como "¿Qué habría sido de mi, sin ti?" "No vivo sin mi lindo mejor amigo" que hacían a Suga querer empujar Jeon y gritarle que aquél anaranjado chico, era de Min Yoongi y nadie más que él, tenía el derecho de tocarlo.
Pero no lo hizo, les dio privacidad y caminó hasta donde estaba Taehyung, sentado a la vuelta del pasillo, sin saber si su novio había salido ya de la consulta.
—Hey boy
—¿Mh?
Habló sin sacar su mirada del teléfono, estaba mirando unas fotos junto a su novio.
—No es por nada, pero me he alejado de allá porque es estúpido tener celos del mejor amigo de mi novio.
—¿De qué hablas? ¿Son novios?
—Novios es mejor que amigos que follan diario.
—No era necesario de lo que follan diario, eh.
Yoongi se sentó a su lado, con una sonrisa y abrazó a su mejor amigo, haciendo una mariconada en público.
—Ahora dime,¿Qué haces acá y no con tu folla amigo.
Una anciana que iba pasando frente a ellos con su nieta, los miró con asco y diciendo "más respeo" mientras que su nieta intentaba contener la risa.
—¡No se haga la puritana señora! ¡Usted también fue joven y alocada!
Taehyung habló fuerte para la señora escuchará, supo que así fue cuando la nieta lanzó la carcajada que había estado conteniendo.
—He venido para darle privacidad a tu noviecito con mi Jiminnie.
—¿Salió de la consulta?
Se colocó de pie y arrastro al azúcar hasta donde los amigos aún estaban abrazados unos del otro.
—No quiero interrumpir pero acá el macho, necesita de su pareja o se pondrá gruñir.
Yoongi recibió un golpe en la cabeza, de parte del cariñoso Kim.
—¡No golpes a mi chico!
Jimin corrió a socorrer al pinkie, que le daba un sonrisa burlona mientras ponía ojos de cachorro mojado al naranjo.
Sintió unos brazos rodear su cintura, luego un beso en su nuca y por ultimo,un susurro.
—Te quiero.
Entre sus brazos, todo se sentía mejor.
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¿Cuántos capítulos creen que le queda al fic?
Perdonen lo aburrido y las faltas ortográficas. No planeaba actualizar hoy pero mi inspiración dio para escribir este aburrido capitulo.
Espero que les haya gustado, un abrazo para todos y todas(?) y ¡Nos leemos pronto! nx.