Bueno antes de nada les pido mis disculpas por los platos rotos, los gritos, las lágrimas y todo el drama que habéis vivido con los dos ultimos capitulos (estais como Denis ya eh e-e)
Por eso leí por ahí un comentario de IaratheDark que le gustaría un capítulo lleno de Lemon con todas las parejas.
(Para que vean que aunque no los conteste por falta de tiempo leo todos y cada uno de ellos porque son super importante para mí y que sepais que me enfado mucho cuando no me comentais a mi y si en otras novelas me entran ataques de histeria parecidos a los de Paul así que si no me queréis ver bebiendo cerveza como loca COMENTEN!)
Bueno ya paso...tranquila.
xD
Hoy me he pueso muy feliz porque esta historia es #115 en vampiros, que sí...que diréis '' ¿115? ¡Pero que mierd...!'' Pero yo soy muy feliz porque para mí eso ya es importante y porque si estoy ahí es gracias a vosotros.
Por eso os dedico este capítulo a todos/as los/as que habéis llegado hasta aquí conmigo desde el principio de Amor sangriento.
(Si me falta alguien que me tire de la oreja, intenté recordaros a todos/as)
NewtAlecWeasly23
marialeonhdz
shanonshanon9484
SusyVedoya
IaratheDark
serenity-chan
kelli14-10
ximenafelipa
ObssesedWithPurple
tami-love-06
kira_yaoi
amandlas
IloveyouThoma
tifa_perli
Panda-Galleta01
yaoi33
yui-yaoi-2927
AycsaYolo8
IanStan13
......UN MILLÓN DE GRACIAS!
Paul*
- Oye Paul, tienes cara de estar más muerto que vivo, ¿dónde te metiste? - Me pregunta Lin mientras la ignoro y sigo comiendo.- Ah...ya sé....- La miro con una ceja levantada, a saber que estará pensando.- Seguro te secuestraron unas fujoshis ¿verdad? pobrecito...
-Lin deja de joder zorra.- Le chilla Brían que últimamente está muy hostil con todo el mundo.
No sé que le pasa...
-Brían que sepas que algun día colocaré una camará en vuestro cuarto y os colgaré en internet.
-Si claro.- Se ríe.- Si quiere yaoi búscalo en otro lado.
-¡PERO A MI ME GUSTAIS VOSOTROS!- Chilla con desespero y yo doy un suspiro.
Estas pastillas que me obligan a tomarme son una puta mierda, me dejan demasiado tranquilo. Tengo que estar con esta porquería todo un mes, por suerte ya solo me quedan dos semanas más.
-Lin enserio, deja de joder.- Denis le da un codazo seguido de una mirada de advertencia.
Él sabe todo lo que ha pasado al igual que Alberto, pero los demás no tienen idea, piensan que Brían se cayó por las escaleras y se dió un fuerte golpe en la cabeza y yo... pues no sé que pensarán porque hasta miedo tienen de preguntarme.
Kenny y Niki están abrazados junto a mí y Brían, me encanta verles así.
Nance no deja de mirar la pantalla de móvil mientras que Alex intenta enterarse de con quien habla.
Entonces levanto la vista y veo ha... ¿David? ¿Qué hace con el uniforme de internado?
Se sienta solo y apartado en una de las mesas vacías y ni siquiera come nada, no tío.... ven con nosotros joder.
Me levanto y voy a por él.
-¡OH DIOS OTRO GAY POTENTE!- Grita Lin a mi espalda cuando ve a David.
Esta tía o tiene un detector para homosexuales o está verdaderamente enferma.
¿No era lesviana? Bah...que sea lo que quiera.
- Eh loco, ¿qué haces por aquí? - Me siento a su lado y descanso mi cabeza sobre mis brazos porque me pesa horrores.
-Mis padres me han internado, creen que es un buen sitio para que termine de graduarme ya que en mi instituto suelo pasarme el día... resumiendo, malas compañías.- Sonríe y yo asiento.
-Pues... considerate del grupo, ven con nosotros.
-Gracias pero soy algo cortado, me cuesta un poco abrirme, por cierto...¿cómo estás?
-Drogado- Me río.- No sé ni donde pongo lo pies... pero bueno, todo sea por el bien de la humanidad.
Nos reímos juntos y entonces le abrazo.
-P-Paul...
-Gracias...de verdad.
-¿Por qué?
-Si no le hubieras agarrado la mano en el momento que disparó hubiese sido mortal... - Me separo de él y se da cuenta de que tengo los ojos irritados, cada vez que estoy solo me da un bajón emocional y me harto de llorar.- Estuviste cuando yo no estuve, nunca podré pagartelo...
-No es nada...pero sí que puedes pagarmelo de una forma.- Sonríe de forma pícara y clava sus ojos en Nance.
-Pide por esa boca y lo tendrás.
-Quiero ser su compañero de habitación.- Se sonroja.- ¿Podrías hacer algo?
¿Ser su compañero de habitación? Nada más fácil que eso.
-¡Claro! esta noche dormiras con tu princesa.- Chocamos los puños y nos levantamos para ir a la mesa con los demás.
Nance le mira y se queda rojo como un tomate.
No sé si es porque le gusta como le queda el uniforme o porque no se lo esperaba.
-¡¿QUÉ MIERDA HACES AQUÍ?!- Chilla demasiado alto y todo el comedor le mira.
-Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma.- Responde David mientras se encoje de hombros y se sienta entre Brítani y Lin.
-¿Cuánto te mide?- Le pregunta Lin mientras saca una libreta.
-¿¡QUÉ!?- El pobre da un sobresalto y los demás no podemos evitar reirnos.
-Para saber si te incluyo en mi proyecto.
-Dios... creo que estaba mejor solo.- Se levanta y Alberto le hace un hueco entre él y Nance.- Gracias...
-No te dejes intimidar.- Le digo bromeando.- Mientras no le salga polla no tenemos nada de que temer.
La sirena suena y es la hora de la última clase, nos vamos y yo me dirijo al despacho para hablar lo del cambio de la habitación de David mientras arrastro los pies.
Con lo energético que yo soy... por favor...que crueldad.
Brían va abrazado a mí hasta que llegamos al pasillo en el que está su clase.
-Amor...¿Qué te pasa?- Le pregunto preocupado mientras acaricio sus suaves mejillas.
-Contigo nada cielo, me apena mucho verte así pero... es lo que hay ¿No?
-Sí... bueno, tan solo quedan dos semanas.- Le beso.- Pero sé que te pasa algo más.
Se muerde las uñas con nerviosismo y eso termina de aclarme que estoy en lo cierto.
-Nene...cuéntamelo.
-¿Por qué Joan olía a tí? Sé que se inventó lo de que no querías verme pero... tu olor era muy fuerte en él.
-Bueno...- Intento recordar algo pero me cuesta horrores.- Supongo que me arrastraría hasta el coche y luego hasta su cuarto... ¿puede ser por eso?
-Su boca Paul... olía a la tuya.
-¡¿QUÉ?!
Mierda... no puedo ni enfadarme, esto es un puto veneno.
-Nene yo...yo nunca besaría a otro.
-Lo sé, lo sé... - Me abraza.- Pero sospecho que ese imbécil se aprobechó de tí...
-No te preocupes, cuando me recupere le pegaré una paliza.- Le sonrío y le beso con todas mis ganas, es lo más dulce que mis labios han provado nunca.- De aqui tiro para clase y luego me voy a la cama, hoy no estoy ni para entrenar ni para nada...
-Vale, yo haré un par de cosas después de clase y subiré para estar contigo toda la tarde, te amo...
Sigue estando raro, joder... necesito que estemos bien, ahora más que nunca, él es todo mi apoyo.
Espero que luego se le haya quitado la tonteria.
- Esto....mamá...verás...
-Dime cariño mío.- Me mira con tristeza, a ella también le da pena verme así.
Me dejo recaer en uno de los sillones negros para recordar lo que tengo que decir, hasta pensar me cuesta.
-Tengo un amigo que está enamorado de otro amigo, y mi amigo no muestra mucho interés por ese amigo que está enamorado de mi amigo y me dijo que si podría...
-Paul cielo, no te líes...
-David Gutierrez Sanchez, habitación 126.
-Esta bien.- Lo apunta en su agenda y yo me levanto resoplando y tirando de mi cuerpo que jamás me había pesado tanto.
Me siento en la silla del aula que está libre y en una de las primeras filas porque no tengo ganas de andar hasta la última que es en la que me siento siempre.
-¿Te encuentras bien?- Me pregunta una chica un poco rellena y con gafas.
Es Emily, la empollona de la clase.
-Sí... genial- Respondo con sarcasmo y mi cabeza se cae sobre la mesa dándome un fuerte cocotazo pero...me dá igual.
-Oye..Paul...deberías ir a descansar.
-Tengo que recojer el trabajo que nos entregarán hoy...si nó...suspenderé.
No estoy seguro de si he dicho eso en voz alta o mentalmente.
-No importa, te lo llevaré a tu habitación si me lo permites.
Vaya...que tía más agradable.
-Gracias...
-¿Powel?- Oigo la voz del profesor que está entrando al mismo tiempo que voy saliendo a paso de tortuga.- ¿Dónde va?
-A poner un huevo.
Idiota...
Mientras me dirijo a mi habitación en modo camara lenta me encuentro a Jorge por el pasillo.
-¡Señorito!- Me chilla lleno de euforia mientras viene corriendo a abrazarme.- Hoy si huelo bien, me he duchado cinco veces en tres días ¿puede creerlo?
-Me alegro mucho.- Le doy una palmada en la espalda.- ¿Qué tal lleva el puesto de conserje? ¿Le gusta?
-Oh me encanta.- Me fijo que parece incluso haber cogido peso.- La comida es genial, mi habitación un paraíso y los alumnos.... todos me dan los buenos días y adoro a esos chiquitines que corren por los pasillos.
-Genial.- Me despido de él mientras me dice adiós con la mano desde el pasillo.
Llego a mi habitación después de casi media hora cuando antes tardaba cinco minutos... ¿media hora? ¿enserio? seguro que me he quedado dormido por el camino y no me he enterado...
¡A la mierda con esto!
Cojo todas las pastillas y las tiro por el báter, no me voy a seguir tomando esta puta mierda, yo soy capaz de controlarme, por supuesto que sí.... quiero hacerlo por mí mismo.
Le doy a la cisterna y me vuelvo a mi cama.
Mmmmm.....Brían....necesito abrazarte.
Brían*
Estoy muy cabreado... ese imbécil de Joan... mira que intento olvidarlo pero no puedo. Tengo que encararle y decirle un par de cosas si no no podré vivir tranquilo.
Me parece de lo más bajo aprobecharte de una persona que está en tal estado para meterle mano y besarle... eso es intolerante y humillante.
Suena la sirena y me encuentr con Emily, la chica más lista de la clase de Paul.
-Brían...he ido a llevarle el trabajo a Paul, estaba completamente dormido por lo que lo dejé en su escritorio, dile que tiene que entregarlo dentro de dos días ¿vale?
-De acuerdo, muchísimas gracias.- Le sonrío porque es una tía genial, super seria, amable y con una mente brillante.
Adoro a la gente lista.
Me voy al bosque y corro hacia al casa del idiota que se atrevió a abusar de Paul, me va a oir...
Llego después de unos veinte minutos y todo la puerta a punto de sufrir un ataque de ira.
¡A LA MIERDA LA PAZ MUNDIAL!
Estoy harto de ser un buenazo y tragarme siempre todo lo que siento.
-¿Otra vez tú? ¿Qué mierdas quieres?
¿Que qué quiero? Esto quiero...
Le pego un puñetazo con todas mis ganas en la cara y una patada en el estómago.
Se queda tirado en el suelo y le agarro por el cuello apretándo con todas mis fuerzas.
Siento su corazón palpitar entre mis manos, su vida depende de mí.... nunca, nunca he podido matar nada ni a nadie pero la rabia es tan grande.. y cuanto más aprieto más aumenta.
Ahora entiendo a Paul pero... no puedo cometer sus mismo errores, porque él se apoya en mí y si yo caígo él también cae.
Le suelo y me aparto con la respiración agitada, me siento tremendamente mal.
Joan respira de forma forzada intetando recuperar el aire y me enseña los colmillos de forma amenzante.
- No me das miedo pedazo de gilipollas.- Mascullo controlándome para no volver a agarrarlo por el cuello.- No vuelvas a tocar lo que es mío.
Vuelvo a la habitación y veo a Paul medio dormido, medio despierto con los ojos perdidos en el techo.
Corro a ducharme porque me gusta oler bien para él y después de eso me meto en la cama sin nada de ropa.
-Ah...que sexy.- Murmura en mi oído mientras revuelve mi pelo y acaricia mi culo.- Te daría de lo lindo si no fuera por estas putas pastillas...
-Lo sé.- Le beso como le gusta, con lengua y mucha saliba.- Pero yo no tomo pastillas y también sé moverme..
-No tengo ninguna duda de ello.- Aprieta una de mis nalgas y gimo de placer, extraño tanto su cuerpo contra al mío.
-Paul...te necesito...demasiado.
Nos besamos de forma apasionada mientras nos restregamos el uno con el otro. Acaricio su polla con mi mano y él ahoga varios jadeos en mi boca.
Me encanta verle exitado y caliente tan solo para mí.
Bajo por su perfecto pecho lamiendo sus pezones mientras su mano acaricia mis cabellos y sigo avanzando recorriendo los abdominales con mi lengua hasta encontrarme con su miembro completamente erecto y a punto de caramelo.
Estoy deseando tener todo esto dentro de mi culo..
Solo de pensarlo gimo como un perra, adoro que Paul me folle, es lo más exquisito que he sentido nunca.
Me la meto en la boca y la chupo con ansiedad, subo y bajo con mis labios por todo lo largo del tronco hasta la punta en la que termino con suaves y morbosos besos para volver a tragarmela entera.
-Ah... Brían...joder...- Mueve las caderas al rítmo de mi boca completamente exitado.- Eres increíble... sigue un poco más...por favor.
-¿Un poco más? Seguiré toda la tarde si hace falta, me encanta chupar tu polla.- Le pego un lametón y él se derrite.- Córrete para mí cariño.
Sus gemidos se intensifican y yo succiono con fuerza mientras acaricio sus testículos masajeándolos y lanzándole miradas provocantes.
-Mi puta... -Susurra mientras agarra mi cabeza con fuerza.- Nadie lo hace como tú.
Noto que está a punto de correrse así que me subo rápido a sus caderas y la introduzco en mi interior. La sensación es...extansiante, grito sin darme cuenta al sentir como se corre en mi interior y empiezo a moverme de forma sensual sobre su cuerpo mientras doy pausados y provocadores gemidos en su oído.
-Brían...joder...- Me pega un azote y yo grito como una perrita cachonda lo que hace que me pegue de nuevo.- Me vas a correr otra vez...
-Está muy sensible usted.- Le ronroneo mientras aumento el ritmo de mi culo que aprieta su gorda y dura polla.- La tienes deliciosa, la siento tan húmeda...tan caliente...dentro de mí....ah....
Hecho la cabeza hacia atrás mientras no dejo de saltar sobre él. Sus testículos chocan con mi entrada lo que me da un morbo absoluto y Paul comienza a masturbarme lo que me hace no poder dejar de gemir y jadear dejándome casi sin aire.
Siento entonces como nuestros cuerpos se contraen, vamos a corrernos juntos... se incorpora y me abraza por la espalda tirándo de mi pelo mientras yo también tiro del suyo y ambos llegamos al orgamos entre besos calenturientos y apasionados.
-Eres el mejor macho del mundo.- Le muerdo el labio y él sonríe.
-Y tú la mejor zorra.
Denis*
Sergio se ha marchado y llegará mañana por algunos asuntos familiares segun tengo entendido por lo que tengo todo lo que queda de tarde y la noche entera para estar a solas con mi pelirrojo.
Estará a punto de llegar de entrenar así que tengo poco tiempo para arreglarme.
Me he bañado y me he puesto mi mejor perfume por todo el cuerpo, estoy perfectamente depilado y ya casi termino de alisar mi pelo.
También tengo un disfraz de gatito pero nunca me había atrevido...sobretodo porque era algo que quería hacer solo con él y siempre teníamos a alguien más en la habitación con nosotros, lo cual no mola nada.
Mi disfraz es de color blanco, va genial con el moreno de mi piel y mi melena rubia. Me coloco bien las orejitas y los guantes, me miro de espaldas en el espejo y me sonrojo al ver el bonito culo que me hace.
Espero gustarle.
En ese momento se abre la puerta y doy un sobresalto es Alberto...
Me mira con la boca abierta de arriba abajo y yo no puedo estar más avergonzado.
- Pero qué bombón.- Se acerca a mí mientras babea y me parisiona contra el lavabo.
Rodea mi cintura con sus manos y me besa con posesividad mientras comienza a acariciar toda mi espalda y termina agarrándo mi culo con fuerza.
-Mmmmm.- Se relame los labios.- Tira para la cama, voy a ducharme.- Muerde una de mis orejas y me da una fuerte palmada en el trasero.
Corro a la cama deseando que se duche rápido y le espero tumbado boca abajo haciéndome el dormido.
A ver qué me hace...
Cuando oigo la puerta del baño abrirse me muerdo los labios porque no aguanto el deseo de tenerle conmigo.
Siento sus manos recorrer todas mis piernas mientras algunas gotas de agua resbalan de su pelo callendo sobre mi piel.
Luego noto su lengua húmeda acariciándo mis nalgas mientras que con una de sus manos aparta la tela del disfraz para meterme dos dedos dentro.
-Ah.... - Gimo de placer mientras comienzo a mover las caderas en busca de lo que deseo...
-Eres muy sexy Denis.- Su voz ronca me provoca y me exita mucho más.
Tira de varias partes de mi disfraz y me va desnudando con los dientes mientras sigue acariciándo todo mi cuerpo, haciendome estremecer con el tacto de su piel.
Me desnuda por completo dejándome solo las orejas puestas, tiene un brillo perverso en los ojos y me encanta, me encanta que me mire así...
-¿Qué quiere este precioso gatito?
-Chupártela.- Ronroneo en su oído mientras bajo mis manos a su miembro y lo libero de la ropa interior.
-Tus deseos son órdenes preciosa.
Se sienta en la cama y yo me siento de rodillas en el suelo, observo todo su cuerpo y casi me corro tan solo mirándole, está tan bueno...
La introduzco en mi boca llenándola bien de saliba porque se que de ahí irá a mi culo, algo que ya estoy deseando.
- Que delicia.- Susurra mientras sus labios se humedecen y su rostro muestra una gran exitación.- Mi rubita...
Soy el mejor chupando pollas, no hay quien me gane.
Sonrío de forma pícara y sigo lamiendo y absorviendo su miembro que ya empieza a segregar y es cuando más caliente me siento por el delicioso sabor.
Paso mi lengua de forma repetida por la punta y su semen cae espeso y caliente sobre mis labios y mi pecho.
-Ah...Denis...joder....- Le cuesta respirar bien y se retuerce bajo mis manos que le siguen frotando con fuerza.- Cariño...para...
Obedezco y en ese momento me agarra del pelo con fuerza obligándome a ponerme en cuatro patas, no suele ser muy rudo conmigo pero sé...que le he provocado demasiado.
Muerde mi culo y luego baja una mano para apretar mis testículos y después masturbar mi erección mientras le siento entrar dentro de mí.
Sus embestidas son fuertes e irregulares, algunas más profundas, otras menos...pero todas igual de placenteras.
Mueve las caderas en círculo y comienza a penetrarme de nuevo cada vez de forma más intensa.
-Alberto... ah...- Gimo tan sexy como sé hacerlo y eso hace que cada vez me de más duro dejándome casi sin aliento y haciéndome alcanzar el orgasmo.
Mi culo se contrae por el placer de mi cuerpo y eso hace que él llegue a correrse por segunda vez.
Nos miramos y nos sonreímos...
-Nunca he follado tan rico.- Le confieso mientras me recuesto en el suelo sobre su pecho.
-Yo tampoco preciosa, eres única mi rubita.
Kenny*
Intento dormir pero mi móvil suena y me desvela. Miro la pantalla y veo que es Niki.
¿Qué querrá a esta hora?
Mi compañero se mueve en la cama y supongo que también le ha despertado a él.
Bah...que se joda.
Mi bebé: Hermanito tengo miedo.
Pongo los ojos en blanco porque sé que ya es una tremenda excusa para que vaya a su cuarto.
Yo: ¿Qué es lo que te da miedo precisamente?
Mi bebé: Me siento solo, tengo frío, necesito tu calor...
Yo: Los vampiros no sienten frío.
Mi bebé: Pues yo si ¬¬
Vaya por dios...que especial es el muchachito.
Juego con mi móvil mientras pienso si debo contestarle o ir a su habitación... tiene que dormir porque mañana tenemos clase... pero recuerdo lo rico que estaba su culo la última vez y no puedo resistirme.
Me levanto de la cama y salgo en busca de mi precioso niñito de cara inocente y mente perversa.
Abro la puerta y mis ojos se deleitan al verle completamente desnudo tocando su entrepierna mientras introduce dos dedos en su interior y susurra mi nombre.
Cierro la puerta y me quito toda la ropa lo más rápido que puedo, esto me pone demasiado...
Me avalanzo sobre él y le beso con violencia, invadiendo su boca con mi lengua y mordiéndole por todas partes para marcar mi territorio. Siento como se escapan algunos grititos de sus bonitos labios y como sus partes se humedecen, es muy débil al placer, aun tiene que acostumbrarse... voy ha hacer que se corra una y otra vez para mí.
Le pongo boca abajo obligándole a dejar de masturbarse y aprieto su cabeza contra la almohada.
-Quiero que te corras gritando mi nombre ¿entendido?
El lugar en el que está la habitación de Niki está apartado de las demás habiaciones por lo que podemos estar tranquilos.
-Si... mi dueño.
-Ah...- Me gusta oir eso de su boca y le puego fuerte en ese culo tan tierno.- Aprendes rápido.
-Otra vez...Kenny....- Mueve su culo de manera sensual y se me van los ojos.- Pégame más fuerte, como si fuera una perra sucia...
¿De dónde saca esas cosas este niño? Voy a tener que inspeccionarle el móvil.
Vuelvo a pegarle una y otra vez mientras que con mi otra mano acaricio su espalda proporcionándole sensaciones cosquillosas y escalofriantes mezcladas del dolor placentero que le ofrecen mis azotes.
Chilla sin parar y eso que aun no me lo estoy follando, cosa que deseo con ansias.
Dejo de pegarle y masajeo la zona rojiza mientras chupo su entrada para lubricarle bien.
Le pongo boca arriba y nuestros ojos se encuentran, está tan exitado....
-¿Quieres que te folle preciosidad?- Le pregunto mientras ejerzo presión con la punta de mi polla sobre su culo.
-Sí...si por favor.
-¿Seguro?
La introduzco un poco más y él se engancha de mi espalda arqueando la cintura hacia arriba para meterla por completo.
-Eso es trampa... eres un niño muy malo.
-Castígame.- Suplica y le embisto con fuerza.- Ah...Kenny...
Subo sus piernas a mi hombro y le ordeno que se masturbe mientras me muero del gusto que me provoca follarle.
He fantaseado miles de veces con romperle el culo y correrme dentro de él.
Mis testículos pelean con los suyos mientras sus gemidos endulzan mis oídos y mi ritmo aumenta con cada penetración.
Entonces comienza a gritar mi nombre y veo como se corre sobre su pecho.
Me siento en la cama y le obligo a sentarse sobre mí. Agarro sus piernas para que no tenga que hacer mucha fuerza y subo y bajo mi culo con rapidez para follarmelo de forma intensa.
-Estás tan apretado...joder... vas a sentir toda mi corrida dentro de tí.
Sigo y sigo sin darle tiempo para recobrar el aire, su cabeza cae sobre mi hombro, casi no tiene fuerzas para gemir y yo le sigo masturbando mientras mi polla entra y sale de forma violenta.
Su cuerpo vuelve a contraerse, me muerde el cuello y siento como algo espeso y caliente corre por mis dedos.
Entonces me corro mientras le beso para que soporte mis últimas embestidas y nos dejamos caer en la cama completamente exhaustos.
-¿Nos bañamos?- Le pregunto pero el pobre está casi dormido.
-Mañana...
Te amo tanto Niki... no me caben dudas de que eres perfecto para mí.
Nance*
He visto que mi compañero de habitación, el único que tenía se ha marchado con todas sus cosas. Me pregunto quién vendrá en su lugar..
Me da bastante pena porque aunque no fueramos amigos, me caía bien, era un chico agradable y tranquilo con el que se podía convivir.
Vuelvo a mirar mi móvil con desespero, el idiota de David lleva dos días sin escribirme... y aunque me joda le hecho demasiado de menos.
Y no sé por qué...ya que no me gusta, para nada.
La puerta de mi habitación se abre y muero al ver esos ojos azules.
¿Qué? ¿Compartiré habitación con él?
Mierda... creo que Paul ha tenido algo que ver en esto.
-¿Qué coño haces aquí?- Chillo desesperado al verle e intento no mirarle demasiado pues el uniforme le queda más que bien.
-Si Mahoma...
-¡Me da igual lo que haga Mahoma!
Estoy en boxers...joder... con mi otro compañero me daba igual porque ya había confianza del curso pasado y además él no es gay... pero con David...todo cambia por completo.
-Bonito cuerpo.- Me silba y yo me tumbo boca abajo hundiendo mi cara en la almohada para ignorar su presencia.- Y bonito culo.
Joder..
Oigo como abre el ropero y coloca sus cosas, le miro a través de un ojo y un cosquilleo invade mi cuerpo al ver como se cambia de ropa. Tiene la piel muy morena y su cuerpo se ve bien trabajado, tiene los hombros anchos, las caderas bonitas y un culo perfecto.
Aparto mi vista de él al ver que se da la vuelta y me sonríe.
-Se que te gusto Nance, deja de negarlo.- Se viene a mi cama y todas mis alarmas se disparan.- Bah déjame un hueco.
-¿Qué? no, ni de coña, a tu cama chucho.
Se sorprende cuando le llamo así pero no se ofende, que tío mas raro...
Aun así sigue igual de tozudo y me arrincona en la esquina tumbándose a mi lado y dejándo a mi vista todo ese imponente cuerpo.
Intento no hacerlo pero no puedo evitar mirar su partes las cuales estan marcadas en sus boxers y... parece estar erecto.
Aquello hace que a mí me pase lo mismo y me muero de la vergüenza.
-No sufras muñeca.- Acaricia mis mejillas y me da un tierno beso.- Los dos nos deseamos....¿qué hay de malo?
-No te deseo.- Replico y encontres agarra mi entrepierna.
-Esto no dice lo mismo.
Con un rápido movimiento la libera de mi ropa interior y la masajea. Me pongo colorado y grito de rabia, impotencia, miedo y... exitación.
Intento liberarme de su prisión, salto por encima de él y cuando voy a vestirme me agarra con fuerza por el abdomen y aprienta mi culo contra sus partes.
Mientras me sostiene manteniéndome inmóvil con su otra mano comienza a frotarme de forma lenta y suave.
-Te vas a correr.- Me asegura al oído y yo intento escapar de nuevo pero es imposible.
Aumenta el ritmo de la masturbación y comienzan a salir gemidos involuntarios de mi boca al mismo tiempo que sin darme cuenta estoy frotando mi culo contra su polla.
-Tienes tantas ganas como yo de que te folle.- Se ríe mientras sigue con su tortura.- Vamos a ver que tal por el otro lado.
Sus palabras me asustan pero no me da tiempo a reaccionar porque me aprisiona contra la cama de nuevo, sostiene mis muñecas a la espalda con una mano y con la otra baja mis boxers, oigo como se chupa los dedos y antes de que me de cuenta están dentro de mí.
Aprieta fuerte en mi interior y hace movimiento circulares con ellos, al principio es incómodo pero luego me va gustando aunque sigo insultandole y peleando por soltarme pero parece que eso le gusta.
Los saca de mi interior y siento algo más duro y grueso entrar.
Grito de angustia, no quiero...no quiero...
Pero él sigue, me penetra una y otra vez mientras jadea morboso sobre mi espalda y suelta mis muñecas porque sabe que ya no haré nada por impedirselo.
Me la saca me pone boca arriba y apoya su frente contra la mía.
-¿Quieres más?- Me pregunta con una sonrisa ladina en la boca.
-No...- Miento.
-Bien.- Responde y me penetra de una sola estocada lo que hace que me corra sin darme cuenta.- Menos mal que no querías... preciosa.
Me folla como le da la gana, como si fuera su puta, su muñeca... sin tener en cuenta mis suplicas y mis quejidos... me da una y otra vez hasta que sus ojos se cierran y su cuerpo se contrae por completo.
Se corre en mi interior y... aunque me joda...me encanta.
Agarro su pelo negro y le beso sorprendiendole.
-Mmmmm, terminarás queríendome, ya verás.- Me dice con malicia y se va al baño.- Buenas noches princesita.
Me quedo tumbado asimilando todo lo ocurrido....joder...acabo de perder mi virginidad....
Mis mejillas se sonrojan y sé.... que estoy colado por David