CAPITULO 34: La carta.
Marinette ve a varias personas entrando al salón. "¡Espera! ¿Y si las chicas que me molestan vienen?" Pensó la chica, y su corazón se aceleró.
Marinette camino de tras de ellos, con su corazón palpitando rápido.
Adrien y Sabrina van a una habitación.
Marinette intento esperar afuera, espero unos siete minutos, pero al ver que no salían, se juntaron los leves celos que sentía en ese momento con el temor de encontrar a las bullys, y entró en la habitación.
Adrien andaba posando sentado y Sabrina y los chicos andaban sacándole fotos.
Marinette miro la escena confundida.
Los pensamientos comenzaron a hervir en la cabeza de Marinette, y estuvo a punto de lastimarse los brazos con sus uñas, pero reaccionó a tiempo y entrelazó su mano derecha con la izquierda, quedando en una posición imposible de lastimarse.
La incomodidad era notoria en su rostro, no le gustaba lo que veía.
(Sabrina) —Oh Marinette no deberías estar aquí, perdón Adrien.
Adrien se paró enseguida y la vio.
Marinette se puso nerviosa al instante, no sabía en qué agujero meterse.
—Eh... yo...
Sabrina se reverencia en modo disculpa —lo siento tanto Adrien tu querías que sea todo esto secreto.
(Adrien) —Nono pasa nada no es tu culpa.
—Oh... uh... em... ¿Secreto?
(Sabrina) —Espera ella es tu novia entonces no generaría problemas...
Adrien se puso más rojo y la miro a Mari
—¿De qué me perdí?—pregunto, tímidamente.
"¿Ahora guardas secretos de mi? ¿Tan poco significó ya para ti?" Pensó la chica, y sus ojos se humedecieron, pero aún así; estaba dispuesta a escucharlo.
(Adrien) —Lo siento Sabrina será para la próxima...— la agarra de la mano para irse con Marinette hasta un lugar donde no haya gente.
—Perdón.
(Adrien) —¿Perdon? Mari...
—Se que no es excusa— acarició su propio brazo con su otra mano, y decidió ser valiente y mirarlo a los ojos—Se juntó todo en mi mente, si me dio un poco de celos la chica esta... Sabrina... estaba controlándome cuando de repente pensé que podrían aparecer las chicas que me molestan— respiró profundo —Se que tengo que aprender a ser valiente, pero de apoco, ¿No?
Adrien la agarró de los hombros y le dio un tierno beso un poco largo pero él mismo término el beso y apoyo su cabeza en el hombro de ella.
—No quiero ponerte incómodo— dijo, y su voz se rompió —quiero hacer cosas que te agraden, quiero que la idea de pasar tiempo conmigo no sea tensa, sino linda, algo en lo que te gusta pensar— lo abrazo —Yo te amo, Adrien... te amo mucho.
Adrien correspondio el abrazo algo fuerte —Mari... Yo también quiero eso, yo te amo demasiado.
Ella se aferra al abrazo.
—Me gusta oír eso—dijo, relajada—Me gusta cuando estamos así de tranquilos... aunque a veces nos dure poco, estos instantes valen oro para mí.
Adrien se separa del abrazo para verla —lo siento por lo que pasó ayer... Y esto lo que pasó justo ahora, quería mantenerlo en secreto.
Ella esboza una media sonrisa, quería hacerlo sentir tranquilo.
—Entiendo que no me hayas contado... lo entiendo totalmente, pero cuando me quieras explicar lo que vi, te voy a escuchar.
Adrien se rie un poco —suenas a mí psiquiatra...— logra dejar de reír —no es un secreto ni de un día, hoy a la mañana me lo pidió Sabrina y yo accedí porque tengo experiencia siendo modelo.
Ella sonrió al ver que sí le estaba contando.
—Lo aprendí con mi psiquiatra— soltó una risita —¿Pero de qué se trata lo que haces exactamente?
(Adrien) —Pues no me gusta Mari quiero que lo digas con tus palabras— con un tono burlon le toca la nariz.
—¡Oye!— le sigue la broma, y se ríe —Son mis palabras, influenciadas por la sabiduría de ella.
(Adrien) —Pues la sabiduría de ella no me importa... Solo me importa la de esta chica que tengo enfrente.
Marinette se sonrojó, sintió que ese era el momento de entregar la sorpresa que le había preparado.
La chica sonrió, y sacó de su cartera un papel doblado en forma de corazón —Esto es para ti... puse mi corazón y mi mente en este escrito, espero que te guste—extiende la mano con el papel.
Adrien se sorprende y agarra la carta —¿Para mí? ¿Una carta? Creí que no te gustaban las cartas— con un tono burlón.
—¿Eh? ¿Por qué piensas eso?— entonces, recordó que al inicio ella no quería que se mandaran cartas —¡Ohhh! Ya se... no quería cartas en ese momento, te quería a ti... estaba muy asustada, pero si me gustan tus cartas, y me imaginé que te gustaría una que contenga las palabras que no me salen de la boca.
(Aca recuerden que cuando entran a la guarida en modo Claw Noir le sugiere darle cartas y ella no quiere)
Adrien sonrie —bueno a ver qué me escribiste— abre la carta la lee en voz alta.
Marinette suelta una risita, más roja que un tomate.
La carta decia:
"Querido Adrien:
Sé que últimamente he sido la peor novia del mundo, y aún hay sentimientos que crean tensión entre nosotros... no todo me sale por la boca, ¿Sabes? Tengo muchos miedos que me impiden hablar, pero no escribir.
Pongo mi corazón en esta carta, seré 100% transparente con mis sentimientos aquí.
Te amo, eres la primera persona que me amo, y a quien yo amé, que me enseñó el verdadero significado de una familia...
Quiero pedirte perdón por todas mis cagadas... sé que has sido muy paciente conmigo, y sé que ni siquiera merezco la segunda oportunidad que me estás dando, pero mientras esté viva, tendré esperanza de que algún día lo nuestro sea como antes... como antes en el sentido de vivir juntos, pero de una forma más sana...
Entiendo que soy tóxica, y que debo mejorar para ser digna de tu amor, y me estoy esforzando, te juro que estoy dando todo de mí en terapia, y a cada instante para convertirme en la mujer que mereces a tu lado.
Cada cosa que hago, me salga bien o no, la hago para repararnos, intento recoger lo que queda de nosotros y poner las piezas juntas para volver a armar una versión mejorada de nosotros...
Estoy haciendo de todo para llegar hasta ti de nuevo... aunque solo parece que lo arruinó más y más, y que cada día te pierdo un poco, eso duele... pero no me voy a rendir porque eres el amor de mi vida, el único, el correcto...
Quiero que sepas que aunque ahora me estás dando poco tiempo, cada segundo que me das vale oro para mí, amo pasar tiempo contigo... te amo a ti.
No voy a justificarme más, no voy a poner más excusas, voy a actuar, arreglar mis errores con acciones porque Adrien, lo que hizo Plagg por Tikki, yo lo haría por ti mil veces... porque cada respiro que doy es por ti, cada latido de mi corazón es para ti, y cada mirada enamorada de mis ojos está dedicada a ti.
Eres mi mundo entero, Adrien.... Eres mi vida, y mi hogar, y todo lo que siento se resume en un millón de "te amo", multiplicado por miles de millones más...
Te amo, mi gatito, mi Buttercup,
Te ama por siempre:
Marinette."
Adrien termino de leer la carta y empezo con tono burlón —bueno definitivamente no te dejaré que te sacrifiques por mí, ese es mí papel— sonríe.
Ella sonrió—Depende de la situación, creo yo.
(Adrien) —¿Depende? Nonono yo voy a sacrificarme por ti tu nunca lo harás ¿Entendido?— la agarra de la cintura.
Ella se rio —No lo pienso discutir— le besa la mejilla —No veo un mundo sin ti.
Adrien se cruza de brazos —yo tampoco sin ti, pero yo soy el único que puede sacrificarse.
—Okey, jefe— dijo con tono burlón, y se rio para luego acariciarle la mejilla.
Adrien le besa la mano a Marinette —me gustó tu carta— y se acerca más a ella le agarra de la cintura y le susurra en el oído —es una de las cosas que me gustan...
Su corazón saltó de alegría, en esos momentos estaban bien, estaban felices juntos.
—Me alegra mucho— pegó sus frentes —¿Y has descubierto que te gusta hacer?
(Adrien) —Mari solo estuve dos días en estás clases, aún no.
—Igual estoy segura de que lo estás haciendo genial—sonríe como una niña, y se escapa lo que piensa —¡Que momento tan mágico!
Adrien se ríe —Ay Mari y espera al final ¿Te quedaras en las clases vocacionales?
—Mmm quizás si, quizás podamos almorzar juntos después de clase... ir a la escuela es una idea aterradora para mí, pero si es contigo, se le baja un 75% a lo aterrador—sonríe.
(Adrien) —Mari... No dependas de mi— le pega suavemente la cabeza.
—¡Au! Ey... no dependo de ti, es solo que— recordó que jamás contó a detalle lo que le hacían en su anterior escuela —la hija del alcalde fue la de la idea para la broma de Kim... ella ponía insectos en todas partes, me hacía sentarme sobre pintura— se le humedecieron los ojos al recordar y se abrazó, pero sabía que debía seguir, él debía entender y para eso ella debía explicarlo bien —Encima de que me hacía las bromas, hacía que el director me castigara como si yo fuera la bully... y cuando me escondía de ella... ella y sus dos amigas me acorralaban, me arrastraban al baño y... metían mi cabeza en el inodoro lleno de... cosas asquerosas... literalmente buscaban el más sucio que estaba... la última vez que lo hizo fue cuando huí de que toda la escuela se burlaba de mí por aquel maldito video de Kim humillándome... Chloe me encontró y me metió en uno que tenía... tenía—le faltó un poco el aire, pero logró estabilizarse—Tenía diarrea... me enferme por semanas, y cuando me tocó volver al colegio... ya no quise... por eso fue que dejé la escuela— lo mira, esperando alguna reacción, y se le caen dos lágrimas.
Adrien la abrazo demasiado fuerte —no permitire que nunca te pase eso, te lo prometo acá no tendrás ninguna bullyng yo las pondré en su lugar...— se separa del abrazo para verla —dicho esto no es escusa para depender de mí hace lo que quieras...— le toca la nariz —me alegra que después de tanto tiempo pudiste contarmelo solo que no te obligues ¿Si? Está bien no estar lista.
—Si quiero venir a clase... quiero saber lo que se siente ir a la escuela como una persona normal... y me siento segura contigo.
(Adrien) —Mari te dije recién que no dependas de mí...— suspira.
—Técnicamente, es completamente natural que dependa de ti... de niña jamás pude depender de nadie, y mi subconsciente busca cualquier tipo de amor al cual apegarse, y hacerme depender... ¿Entiendes? No solo eres todo para mí, eres todo lo que tengo... mi familia.
(Adrien) —Me encanta que pienses asi Marinette pero... Eso no te hace pensar en que todo esto es solo ¿Un apego...? Mari yo te amo pero me haces entenderlo así, soy el único que te ame y te di un amor sincero y tu solo lo agarraste...
—¿Solo un apego? ¡No!— le toma la mano y la pone en su propio pecho, dejándolo sentir los desenfrenados latidos de su corazón —¿Lo sientes? Está así por ti... a ver ¿Cómo te describo lo que siento por ti? Mmm mi corazón late y late y late como un loco cuando estás cerca... a veces me haces sentir calor con tus besos... amo verte sonreír, amo escuchar tu voz... amo acariciarte— le acaricia las mejillas —Y me duele profundamente cuando peleamos, y me duele verte mal... cuando tenías esos pánicos por las pastillas equivocadas...—se le humedecieron los ojos y se rompió su voz —Te juro que yo los sentía contigo... me desesperaba, necesitaba hacer que estuvieras bien, no soportaba verte sufrir, me mataba, me mata... eso, mi vida, es amor, no es apego... apego seria que solo te quiero cerca para no sentir el miedo al abandono... y no te niego que siento apego por ti, pero el apego está ligado a un enorme y profundo amor, porque cuando te estabas muriendo en la cabaña... yo estaba desesperada buscando cómo quitarle el sello a los kwamis para poder curarte porque no me imaginaba este maldito mundo sin ti— tiene muchas lágrimas en sus ojos —¿Ahora entiendes cuanto te amo?
Adrien sonríe —Mari... Sabes que voy a dejar las clases vocacionales.
—¿Por qué?—pregunto, confundida.
(Adrien) —¿Tu irías a las clases sin mí?
—No... sola no vengo... si tuviera amigos si, pero sola no vengo a ninguna escuela.
Adrien se cruza de brazos —¿Vez? No tienes que depender de nadie ni de mí, me amas lo creo porque en tus besos lo siento, todos tus te amo pero aún así dependes demasiado de los demás y yo no quiero eso.
—Jamás estaré lista para ir a un colegio en donde no conozco a nadie... creo que... cuando acabe todo esto... haré mi carrera en línea.
(Adrien) —Si vamos con esa lógica yo también porque estar en un colegio es estar con chicas y aún así acá estoy haciendo algo que yo deseaba ir a una escuela, Mari hay que arriesgarse.
—Hablaré con mi psiquiatra al respecto... no te conté que... la vez que me enfermé por lo que me hizo Chloe... acabé en el hospital. Estuve en coma dos semanas por una bacteria que ingerí sin querer... Y luego mis padres querían que regresara a clases como si nada. Yo me revele, y me dejaron abandonar la escuela... pero pasaron de ignorarme, a atacarme todo el tiempo... se convirtieron en los monstruos que conociste— se le caen las lágrimas —No estoy lista para venir sola a un colegio... lo que imagino ideal sería venir con alguien a quien conozco, en lo que hago amigos, y cuando haga amigos ya no dependeré tanto, pero los primeros días sí que voy a depender.
Adrien le acaricia el cabello y le pega un poco la cabeza —si comprendo porque quieres depender de los demás pero arriésgate, yo lo hice por ti.
Ella respiró hondo. —Bueno... pero tendrá que ser un día sí y uno no, porque tengo terapia.
Adrien la abraza —yo se que es muy difícil porque tuviste una vida muy fea por los que te rodeaban pero si te digo todo esto es que yo creo que lo lograrás a tu manera... Yo ya lo hice a mí manera.
—Entonces, vengo un día sí y uno no— estira la mano —¿Trato?—
(Adrien) —¿Qué? Pero Mari yo no tengo nada que ver con tus decisiones...
—Cierto— soltó una risita —a ver si me aceptan así... mañana me registraré, por hoy creo que ya terminaron, ¿O falta más?
(Adrien) —Bueno te tendría que explicar porque justo te saltaste los 2 días dónde explicaban bien como se harán las clases con Lila y Sabrina de maestras, fue ayer y hoy pero a la mañana.
Marinette respiró profundo. A Sabrina no la conocía; pero Lila aún le caía mal, pero esto era por Adrien.
—Bien... explícame.
(Adrien) —Bueno Sabrina se encarga de dar clases como escritura o leer, fotografía y Lila es de dar clases como dibujo, costura y música después se unen las dos profesoras para hacer algo en conjunto con todo el grupo... Yo en si elegí más clases con Sabrina que con Lila...
Marinette sonrió al ver que iba a estar más tiempo con Sabrina que con Lila, pero hizo una mueca al darse cuenta de que su tema era con Lila.
—Entonces, mi maestra sería Lila— no le gustaba mucho la idea.
(Adrien) —Pues si, querías ser diseñadora ¿No? Yo solo estaré contigo en las clases donde Sabrina y Lila esten juntas.
—Mmm vale... si eso me ayuda a volver a saber qué ropa dibujar en papel... que así sea.
(Adrien) —Si y otra cosa más no podias esperar hasta ¿Que lleguen a las 6 para nuestra cita?
—Quería darte la carta— le hizo puchero, ligado con una sonrisa —Le pedi permiso a la psiquiatra para hacerla antes de la terapia y me dejó.
(Adrien) —Y tenías que hasta llegar a las clases que no te gustan para nada.
—En mi defensa, ni siquiera sabía que clases eran—soltó una risita —Y si me gusta leer, pero no los libros que dan en clase.
(Adrien) —Ah no lo entendiste Sabrina lo que hace que leamos en voz alta, podrías intentarlo pero no lo hagas porque yo estoy en esa clase ¿Vale?
—Digamos que las cosas que yo leo no se leen en voz alta—suelta una risita —Nah, solo tomaré clase de dibujo y costura.
(Adrien) —Si deberías eso, aunque hoy vamos hacer una muestra de la clase de lectura que hacemos con todos juntos.
—Vale— respiró profundo.
Adrien emocionado la agarra de la mano para llevarla al aula en donde todos estaban y se sentó en su silla para agarrar el libro
Ella lo miró, y la hizo feliz verlo emocionado.
Sabrina entro al aula con Lila —bueno chicos como saben hoy habrá una muestra de lectura para que entren más al grupo de escritura y lectura conmigo de maestra. Adrien que está ya en la clase va a leer la tortuga y la liebre— pide silencio aplaudiendo con las manos hasta que todo el curso se calla— adelante Adrien puede comenzar.
Adrien se levanta de su asiento y empieza a leer en voz alta con el libro en la mano.
Marinette lo mira sonriente, pero su sonrisa se desvanece cuando ve a Sabrina mirándolo sonriente también, y por supuesto, no podía faltar Lila...
Adrien seguía leyendo mientras Sabrina se acercaba a él para tocarle el cuello justo en el medio y escuchando con toda la atención.
(aca cuando Sabrina hace eso es para medir el tono de voz si esta en el medio el tono de voz eso seria que la voz no esta forzada y asi podes seguir leyendo sin falta de aire)
Marinette no quiere interrumpir, no dice nada, pero al ver que Sabrina no paraba, agarró suavemente la mano de Sabrina, y con una mirada asesina, la alejó de su novio.
Sabrina se quedó viendo a Marinette pero intento siguir tocando el cuello ignorando a Mari y cuando terminó Adrien, hablo —bueno ven Adrien tiene una voz perfecta para leer en voz alta, como ven su voz nunca se perdió y la mantuvo firme hasta el final sin tomar nada de agua.
"Perfecta" esa palabra resonó en la mente de Marinette... a Adrien no le gustaba esa palabra, le traía malos recuerdos, y lo miró como queriendo preguntar: "¿Estás bien?"
Adrien sonrió y vio a Sabrina que le dio la señal para sentarse y estaba algo nervioso por la mirada de Marinette.
(Sabrina) —Bueno como decía esto es algo muy bueno.
—¿Estás bien?— susurro Marinette
(Adrien) —¿Que? em si... estoy bien.
—Que bueno— dijo, y le dio un beso en el hombro —es que dijo la palabra que no te gusta oír.
Adrien nervioso se alejo por el beso —¿Ah la palabra perfecto? Si me cuesta escucharlo un poco pero puedo decirla yo mismo.
Los ojos de Marinette se humedecieron un poco. "¿Por qué dejó que ella le tocara el cuello pero no quiere que yo le dé un inocente beso en el hombro?" Marinette respiró hondo.
(Adrien) —Bueno la clase ya termino podríamos ir a comer en el comedor ¿Te parece?
Ella abrió los ojos y le sonrió—Si, es bueno no cocinar por una vez... puede ser como ir a un restaurante colectivo.
Adrien se ríe —Si, ¿Estarás bien comiendo en el comedor?
—Mmm creo que si, hay que arriesgarse, ¿Recuerdas?— le dio una sonrisa, y se arriesgó a acariciar en donde antes intentó besar.
Adrien nervioso —Si tomar riesgos ¿Bueno nos vamos?— empieza a guardar sus cosas.
—Vamos.
Adrien y Mari van al comedor a pedir cada uno su plato y a sentarse en una mesa.
—No es tan mala la comida de acá— dice, y come.
Mylene se acerca a la mesa de ellos —hola chicos.
—Oh hola Mylenne—dijo Mari, sonriente.
(Adrien) —Ah hola Mylene ¿Que pasa?
(Mylene) —Tengo unos souques de parte de...
Marinette cerró un poco su puño. Le molestaba que otra chica le trajera souques a Adrien.
"No seas así" resonó su propia voz en su cabeza. "Ella te ayudó en tu primer día de psiquiatra... deberías darle las gracias en vez de esa mirada intensa..."
—¿De parte de quien?— preguntó Marinette, con una mirada un poco intensa, pero no intencionaba violencia.
Mylene más nerviosa —De parte de parte de...—
(Adrien) —No importa gracias Mylene.
Marinette sacudió la cabeza al darse cuenta de que la estaba poniendo nerviosa, tal como aquellas chicas groseras la ponían nerviosa a ella.
—Mylenne espera... yo...
Adrien nervioso —¿Que? Em no importa chicas no pasa nada ¿Si?—
—¡Mylenne lo siento!— dijo Marinette, y aunque era lo que quería decir, le salió un tono un poco agresivo sin querer.
(Mylene) —¡Ahhhh de nada!— se asusta y se agacha —no importa disfruta los souques Adrien es de parte de... Gabriel Agreste. Ah ahí estaba.
(no le salia el nombre por los nervios de estar con mucha gente, recuerden que con adrien se junta las fans.)
Marinette se vio a sí misma reflejada en aquella niña asustadiza.
Se levantó rápidamente y la abrazó.
—Lo siento... reaccionó así por mis celos y... solo quería darte las gracias por defenderme de que las chicas en mi primer día de terapia... estaba asustada, y tú me inspiraste a ser valiente.
Mylene toda asustada —Ah si me alegro yo em... podemos a ser amigas, solo no me grites.
Adrien todo nervioso vio todo en la mesa y se levantó para ayudar a Mylene a reincorporarse y al fin recibir los souques —bueno em Mari... ¿Volvemos a nuestra cita?
—Em... si—dijo ella, nerviosa, y miró a Mylenne —Nos vemos por ahí, ¿Va?— Volvió a la mesa con Adrien.
(Mylene) —Lo siento, lo lamento no quería interrumpir su cita em... mejor me voy, hasta otra oportunidad Mari— se va.
Mari suspiro, se sintió culpable por haber puesto nerviosa a una chica que parecía sufrir lo mismo que ella y que encima; la había defendido.
Se dio una palmada en la frente, algo frustrada con ella misma.
—¿Por qué tengo que ser así?— susurro y respiro profundo —No pasa nada, al menos me disculpe rápido y por ahí se empieza... llegará un punto en que no meta la pata— sonrió al ver como se estaba dando terapia ella misma.
Adrien sonrió y todo tembloroso agarró la mano de Mari para acariciarle —¿Vamos a tener nuestra cita?
Ella sonrió—Si, tengamos nuestra cita.
Adrien empieza a comer su comida —Bueno... ¿Como fue todo con Alya?
—Bueno al principio no muy bien porque yo no me sentía bien, pero luego la conversación me dio mucho resultado, así que nos pusimos a ver películas de terror y nos quedamos dormidas, pero luego nos despertamos, más bien nos desperté yo porque tuve una pesadilla fea, y luego nos pusimos hablar de todo un poco y acabamos riéndonos — suelta una risita —ya ni me acuerdo de qué nos reíamos, y luego nos dormimos de nuevo, me desperté un par de veces, quizás un poco más de un par de veces.
Adrien preocupado seguía acariciando la mano de Mari —bueno me alegro que Alya estaba ahí para ti... Pero Mari sino te sentías bien por lo que yo hice debías decírmelo.
—Te fuiste muy rápido, y además las pesadillas no eran por ti, si saliste en una, pero no eras lo que me daba miedo.
(Adrien) —Ya se, yo no te hago generar las pesadillas, pero a ver ayer todo se tenso pero entiende una cosa yo no estoy en tu cabeza para saber en qué piensas si vas a juzgar mis acciones por lo menos decimelas...
—No me había enojado por lo que tú hiciste sino que me había enojado conmigo porque yo lo provoque... — Sacude su cabeza —pero está bien ya lo estoy procesando... Sigo cómo lidiar con los sentimientos negativos hacia mi misma.
(Adrien) —Mari... Mejor habla con la psiquiatra para que te dé algún concejo o algo así.
Mari soltó una risita Y le tocó la nariz —hoy tuve terapia Tontin.
(Adrien) —Ah cierto que me lo dijiste, bueno ¿Te dio un concejo de como amarte a ti misma?
—Me mandó un ejercicio que lo logré hacer un poquitín en la mañana, pero Alya cuenta conmigo, y cuando logra hacerlo completamente sin pensar que me estoy sintiendo ella me pasara la receta de sus ricos cafés.
(Adrien) —Me alegro mucho por ti.
—Uy que Qué tonta no te conté en qué consiste el ejercicio ¿Lo quieres saber?
(Adrien) —Si quiero saber.
—Bueno tenía que escribir cosas positivas de mí en un papel y la doctora me había dicho que te preguntara a ti, pero luego no me dio tiempo, y se lo pregunté a Alya, entonces tenía que decirlo en voz alta frente al espejo, lo dije pero... No sentía como que fuera de verdad, pero supongo que es un proceso y no se supone que lo haga bien a la primera, y Alya hizo un café tan rico en la mañana que hicimos un trato: Ella me daba la receta de su rico café cuando yo lograra gritar las cosas que están escritas en el papel— hace una media sonrisa al fin.
Adrien sonríe —bueno me alegro tanto que Alya haya escrito todo lo genial de ti— sonríe —ah antes de que me olvida después de este almuerzo me iré a la biblioteca ¿Está bien?
Marinette trago duro, Quería pasar todo el día con él pero recordó que su psiquiatra le habia dicho que tenía que aprender a no derrumbarse cada vez que se iba porque aunque volvieran a vivir juntos en algún punto, él tendría que irse a trabajar o a su propia universidad o algo por el estilo. Ella respiro profundo —está bien supongo que puedo aprovechar para tratar de hacer una nueva amiga, o simplemente pasar el rato con mi mejor amiga.
Adrien sonríe —si puedes hacer eso yo andaré perdido leyendo igual aún así, si quieres verme estaré ahí.
—Vale, ¿Tenemos una cita para la comida?— Se puso un poco nerviosa, se dio cuenta de qué nunca había perdido salir en una cita tan explícitamente, y soltó una risita nerviosa.
(Adrien) —Pero Mari estamos en la cita con comida...— señala los platos.
Marinette mira los platos – pero yo decía tener otra cita a la hora de la comida, ¿Que dices?
(Adrien) —Em... No...— se rasca la cabeza.
A Marinette le faltó el aire por unos segundos, eso era lo que le daba miedo y lo que le impedía a veces empezar conversaciones con él desde que habían peleado, el miedo a los NO. Le había dolido pero por primera vez en toda la situación lo había entendido o eso creia ya que lo que había entendido: es que aun no confiaba en ella. Ella respiro profundo y trato de actuar lo más comprensiva posible —está bien.
(Adrien) —Lo siento Mari... Pero lo mejor es que no nos veamos tanto, así no dependes de mi.
Marinette exhalo quiso esconder lo devastador que era para ella cada vez que decía que No a algo, pero después se dio cuenta de qué desconfiar y aún más de ella, si ella no decía las cosas en el momento, así que volvió a respirar profundo y se armó de valor para decir lo que le había pasado por la mente —No me gusto la idea, pero si es necesario... Que así sea— Respiro profundo la última vez, esta vez orgullosa de ella misma por haber dicho lo que sentía.
Adrien sonríe —gracias por decírmelo Mari, a ver escúchame bien no puedo darte todas las citas que quieras no puedo hacertela fácil tu tienes que buscarme a mí... Estamos teniendo muchas citas y debo ser duro...
Marinette trago duro —lo sé, se que estás haciendo demasiado por mi, siquiera con querer verme después de... Todo lo que pasó — ella suspiro —pero eso no quiere decir que no sea difícil... Pero igual sé que merezco mucho MENOS de lo que me das— se limpia la cara un poco.
Adrien suspira y la ve —se que es difícil y no se ni siquiera como darte una ayuda para que consigas mí confianza... lo lamento.
—No depende de ti ayudarme si no depende de mí darme cuenta de cómo lograrlo, es mi batalla y tengo que pelearla sola por más que duela... Sólo te lo digo porque dijiste que querías saber todo lo que me ha pasado por la mente – le dio una sonrisa al final.
(Adrien) —Si me alegra que me cuentes todo esto pero aún así lo lamento por no poder ayudarte...
—Me ayudas dejando de hablar de esto, y hablando de otra cosa — suspiro —si éste va a ser el único tiempo contigo que voy a tener en el día no quiero pasarlo hablando de algo que me pone triste— respira profundo –¿Y quién es el biblioteca?
(Adrien) —¿De que? ¿De quién hablas?
Marinette sonrío y le acaricio la barbilla —ese es mi Chico.
(Adrien) —¿Que? Mari no te entiendo...— se aleja de ella.
Ella lo miró confundida —¿Qué? ¿No estabas diciendo que no estamos hablando de lo que en realidad si estamos hablando para Disfrutar de la cita en paz como te había dicho?
(Adrien) —Pues no... Solo me quedé confundido con tu pregunta.
—Entonces te pregunté que lees es en la biblioteca... Para... Conocerte un poco mejor— traga duro —¡Vaya! Sí que soy mala con las palabras y en largo.— se ríe al final.
(Adrien) —No lo se Mari, son libros interesante como acción.
—Oh— suelta una risita tonta —no me gusta mucho la accion perdón soy más de libros de romance— se pone roja —subido de tono— saltó una risita al final.
(Adrien) —¿Subido de tono? —Se pone rojo —a mi me gustan los libros con aventuras y si puede ser que los protagonistas sean una pareja pero hasta ahí.
—También me gusta el terror, sobre todo cuando se trata de historias paranormales, son muy interesantes, pero igual sé que no te gusta el terror — Come una cucharada de su comida —y está bien que tengamos gustos diferentes— alzo los hombros y come otra cucharada.
(Adrien) —Aunque no lo creas, puedo leer libros de terror no es tan dificil pero no lo elijo mucho.
—Bueno para cuando lo quieres leer tu papá tiene una biblioteca que es buenísimo.
(Adrien) —Si lo se.... es lo primero que le pedi de chiquito libros y bueno se excedió como siempre y me dio muchísimos.
—Tu papá es genial— jugó con su comida un momento —yo descubrí que quería ser diseñadora, cuando una maestra me confiscó los dibujos en la primaria y la directora miro los dibujos antes de entregárselos a mi mamá, y dijo que tenía talento para el diseño de modas, y eso fue lo que me hizo querer aprender a coser— su expresión se oscureció un poco —me fue difícil encontrar como y donde aprender porque mi mamá me decía todo el tiempo que era una idea tonta y que yo nunca tendré talento para tener éxito en esa carrera... O en nada en la vida—suspiro —Pero tenía la idea fija en la cabeza, y encontré como y donde aprender, y aprendí.
Adrien le toco el hombro —de seguro dibujas muy bonito quiero verlos algun dia... y yo sere el primero en apoyarte, si quieres puedo posar para que tengas referencias.
Ella se puso nerviosa ante la idea de volver a diseñar soltó una risita tímida —si. ... Emm... Para eso tengo que reencontrarme con mi inspiración primero... No he vuelto a diseñar desde que dejé en la escuela.
(Adrien) —Es cierto jamas vi un diseño tuyo solo vi armas y eso, pues espero que lo hagas pronto.
—Si sólo tengo que encontrar algo que me inspira.
(Adrien) —Pues espero que lo encuentres...
—Quizás lo estoy buscando en el lugar equivocado... —Comenzó a divagar por su mente pero lo hizo en voz alta porque estaba él ahí —Quizás estoy buscando la iInspiración en un lugar o en un objeto... Y quizás debería Buscarlo en una idea que me ilusionó— Analiza y se da cuenta de lo que dijo —¡Eso es!
(Adrien) —¿Que?¿Que cosa? Mari?
—No solo puedo inspirarme en cosas o lugares, puedo inspirarme en una idea... una idea que me haga sentir feliz... eso me dará ganas de dibujar... y de coser— sonrió al final, y le dio un beso inesperado en la mejilla —Gracias, gracias a ti descubrí cómo inspirarme de nuevo— lo miró toda enamorada a los ojos, pero su mirada se escapó a sus labios.
(Adrien) —Em... de nada supongo...
—Fuiste muy útil hoy— lo miró; sonriente —Creo que ya se en lo que me pasaré toda la tarde... le pediré a Alya telas, una vez que tenga el boceto... puede que tenga una idea en mi mente.
(Adrien) —Entonces buena suerte... Yo creo que iré a leer en la biblioteca— le besa la mejilla.
—Adrien.
(Adrien) —¿Que Mari?
—¿No se te olvida algo?—sonrió y le hizo puchero.
Adrien se queda confundido "¿Un beso?" Pensó el chico y la da un pequeño beso —em Mari intenta no hablar tan rápido la próxima vez ¿Vale?— la agarra de los hombros.
Marinette le acaricia las mejillas.
—Lo siento, no sé qué me pasó que empecé a pensar en voz alta— soltó una risita —Ahora sabes cómo suena mi cabeza todo el tiempo...— sonrió como una niña —Y si, quería mis besos del día.
Adrien sonríe —igual te iba a dar un beso de despedida, solo que quería que termines de hablar.
—Se que te lo dije en la carta, pero tengo ganas de decírtelo ahora— mordió su labio —Te amo, te amo te amo te amo.
Adrien sonríe y le acaricia ambas mejillas —me encantó la carta y nunca está demás escuchar tus te amo pero yo te amo más— la callo con un beso en la boca.
Marinette se relajó, y se enfocó en el beso, en disfrutar de los minutos que le quedaban con él.
Adrien acaricio el pelo de ella pero se separó del tierno beso —mucha suerte con tus diseños.
—Gracias... suerte igual con los libros, espero que los disfrutes.
(Adrien) —Sisi bueno hasta mañana— sonríe y se va a la biblioteca.
Marinette se dirigió a su habitación, y comenzó a esbozar en el cuaderno de dibujos, pero nada parecía convencerla...
—¡Esto no está funcionando!!— dijo estrujando el séptimo papel.
(Tikki) —Y si piensas de otra manera como no se una fuente de inspiración... La otra Marinette salía de su habitación para pensar mejor las cosas.
—Si salgo encontraré a esas perras... no quiero que me hagan sentir mal... ahora me siento frustrada, pero mejor que ayer.
(Tikki) —Mmmm es cierto, acá es diferente pero aún así podrías ir a lugares que no haya gente, como el lugar del piano o la biblioteca no se pero caminar te haría mejor.
Marinette pensó, lo dudo un poco, tembló antes de hacerlo, pero se sentó en la cama, con su cuaderno y su lápiz en la mano.
—¿Qué tal en recuerdos? Y en la esperanza de algún día volver a vivirlos... me daba mucha paz dormir con él— cerró los ojos, y se perdió en sus recuerdos.
Para cuando los abrió, estaba en una especie de trance, como si su mente hubiera quedado atrapada en un recuerdo, como si hubiera retrocedido en el tiempo... por unos minutos, ella solo pensó que estaba dibujando, haciendo tiempo en lo que Adrien llegaba de ver a su papá para cenar con ella.
Marinette visualizaba en su mente el vestido que le gustaría llevar en la cita que simbolizaría su regreso...
Marinette comenzó a dibujar un vestido, y le dio color... eran varios tonos de rosa, y hasta dibujó accesorios... le puso una cara al boceto, y antes de darse cuenta, se vio a sí misma en el papel, con un hermoso vestido, unos bellos zapatos, un peinado de princesa, y hermosos accesorios.
—Um... ¿Esto lo hice yo?
(Tikki) —Si lo hiciste, es realmente hermoso Marinette.
—Pero no tengo las telas...
(Tikki) —Pero puedes pedírselas a Lila, bueno mejor no, sería a Gabriel que te parece al final es tu suegro.
//Holis ¿Como estan? Espero que esten bien, espero que disfruten de la historia aunque andamos en dramon pero bueno simplemente intentemos lidiarlo juntos. Espero que se termine pronto pero bueno sin mas nos vemos en el proximo capitulo.
Posdata: como siempre digo esta historia la hago con una amiga mia.