Pov Sophia.
Día de San Valentín.
El día simplemente no había sido como lo imaginé…
Durante la mañana había recibido una llamada del campamento de las niñas, llamada en la cuál se me informaba que Mía había sufrido un accidente lastimándose así su muñeca. Minutos después de aquella llamada y mientras nos preparábamos para el desayuno Alondra y Lett comenzaron a pelear entre ellas, como consecuencia a eso las 100 galletas que Bella había preparado para que Lett llevara al colegio terminaron en el piso...
Pero la cereza del pastel/torta es justo este momento… la cena que había preparado para celebrar San Valentín con ella. Una Toni que se encontraba distante y perdida en sus pensamientos y la entendía, pero ella no era la única pues en mi mente se repetían las palabras que Minerva me había dicho la tarde anterior en su consultorio cuando fui a visitarla al hospital.
<“Te dije que no podrías ocultar lo sucedido siempre... Ambas sabíamos que Toni en algún momento desearía otro bebé, al igual que tú.
Ella merecía saber la verdad, desde el primer momento”>
Y sí, ahora lo entendía… Minerva tenía toda la razón en sus palabras y ahora lo sabía, sabía perfectamente que guardar silencio había sido malo, sin embargo; haberle dicho todas esas cosas la noche de la discusión a Toni había sido lo peor…
-Lo que sucedió la otra noche fue una pérdida de tiempo y una total estupidez- habló Toni, casi 20 mins después en los que ambas habíamos guardado silencio- agradezco que te tomaras el tiempo para preparar esta cena, también agradezco que Bella saliera a cenar con los niños pero esto… Esto también es una gran pérdida de tiempo- la observé por unos segundos en los cuáles ella se colocó de pie, bebió un sorbo de vino y se giró dispuesta a marcharse del comedor- Llamaré a Bella para decirle que vuelva con los niños y si me disculpas, subiré a la habitación necesito descansar- la observé retirarse del comedor dejando la cena casi intacta mientras un nudo se formaba en mi garganta, tomé una respiración profunda para llenarme de valor para lo que haría a continuación.
Pov Toni.
Agradecía el hermoso gesto de Sophia, realmente se lo agradecía. Sin embargo las palabras que ella había dicho aquella noche lastimaban algo en mi interior y no, no era el hecho que ella me dijera que no funciono en la cama, había algo más, su reacción se debía a algo más... Comencé a subir los escalones mientras buscaba el contacto de Bella en mi teléfono, marqué el número y justo cuando llevé aquel aparato a mi oído la voz de Sophia me hizo detener, haciendo que una sensación de frío invadiera mi cuerpo.
-Perdí dos embarazos luego del nacimiento de Aiden- había dicho, me giré con lentitud sobre los escalones para así poder observarla-
-¿Qué estás diciendo?- dije tratando de comprender correctamente sus palabras-¿Estás bromeando, verdad?-
-No Toni, no es una broma. Un año y medio después del nacimiento de Aiden logré quedar embarazada, yo estaba muy emocionada, pero algo dentro de mí me decía que era mejor no decirle a nadie y así lo hice justo cuando cumplí los 4 meses tuve un sangrado repentino, cuando fui a ver a Minerva confirmó lo que me temía… decidí que sería mejor no decirte nada, continuamos nuestra vida con total normalidad, pero, un par de semanas antes de nuestro aniversario pasado…- elevé mi mano en señal de silencio, ella pareció comprenderlo al igual como yo comprendía lo que ella trataba de decir. Un sentimiento conocido comenzó a inundar cada centímetro de mi cuerpo, la pesadez en mi respiración, el nudo en mi garganta, el vacío en mi estómago, el dolor en mi pecho y el frío de mi cuerpo eran la afirmación a mi mayor temor…
Sophia, mi esposa… La mujer que más amaba en ese momento estaba de pie frente a mi, con sus mejillas empapadas por las lágrimas que derramaba, su mirada reflejaba calma pero también reflejaba dolor y tristeza. Ella estaba diciendo un par de cosas, estaba segura de eso, sin embargo mis oídos no escuchaban su voz y sinceramente no tenía idea de cuantos minutos habían transcurrido y tampoco me interesaba saberlo… Lo único que tenía claro es que esta noche ella me había lastimado.
Pov Britta.
Campamento.
-¡El cielo se caerá!- gritó Leah al observarme llegar a la cabaña en la cuál ella y Mía se encontraban-
-Leah, por favor no digas esas cosas… aunque sí, tienes razón tal parece que caerá una gran tormenta lo cuál es extraño porque siempre hay un buen clima para estos días- respondí para finalmente tomar asiento al borde de la cama en la cuál Mía se encontraba- ¿Cómo te sientes pequeña zanahoria?- le pregunté mientras acariciaba su cabello-
-Bien, no duele- respondió- la enfermera colocó una inyección para el dolor e inflamación-
-La señora Heather me dijo que el accidente ocurrió porque tú no seguiste las indicaciones- le dije- ella les advirtió qué las rocas no eran seguras y aún así desobedeciste-
-Bueno, la señora Heather también miente- giré mi rostro hacia Leah- Mía le consulto si podía escalar las rocas y ella respondió que podía hacer lo que deseara y Mía eso hizo, por esa razón es que se resbaló y lastimó su mano- Las observé a ambas mientras negaba un par de veces, conocía a mis hermanas y sabía que ambas al estar juntas podían ser un dúo caótico. Continué hablando con ellas un par de minutos más hasta que el resto de los chicos llegaron a la cabaña, le pedí a la señora encargada que estuviese al tanto de Mía por si el dolor en su mano regresaba, me despedí de ellas y del resto de los chicos para finalmente salir rumbo a mi cabaña, estaba a un par de metros de distancia cuando escuché que me llamaron.
-Bri-Bri!- giré mi cuerpo y justo en la puerta de la cabaña se encontraban mis hermanas-
-¿¡Qué sucede!?- dije alzando un poco mi voz para que pudieran escucharme-
-¡Te amamos mucho!- dijeron haciendo que una sonrisa se dibujara en mi rostro- ¡siempre, siempre con todo el corazón!-
-¡Las amo muchísimo más… siempre, siempre con todo mi corazón!- les respondí, me despedí una última vez de ellas y continué mi camino hasta la cabaña para que minutos después la tormenta iniciará…
Pov Narrador.
El reloj marcaba las 6:25am cuando Sophia llegó a la cocina dispuesta a preparar el desayuno, sin embargo, Bella se había hecho cargo de dicha acción por lo que la ojiazul solo se encargaría de despertar a los más pequeños para así prepararlos y llevarlos al colegio… Casi 25 minutos después y con los pequeños ya duchados la ojiazul se dirigió hasta el comedor, acomodó a sus hijos en sus respectivas sillas y con ayuda de Bella sirvió los alimentos para ellos.
-Sophia, creo que a Toni se le ha hecho un poco tarde… deberías ir por ella- sugirió Bella quién sabía cómo se encontraban las cosas entre ambas mujeres. Y así fue, con un poco de duda Sophia tocó la puerta de la habitación sin recibir respuesta alguna, tomó aire un par de veces y justo cuando estaba dispuesta a entrar en la habitación la puerta se abrió dejándola frente a Toni quién simplemente la observó.
-Buenos días amor… creí que te habías quedado dormida- dijo Sophia con una pequeña sonrisa en su rostro-
-Buen día Sophia, gracias por preocuparte pero no es necesario- dijo Toni- recuerda que tengo alarma en mi teléfono o eso también lo olvidaste- un escalofrío recorrió el cuerpo de la ojiazul mientras sentía sus ojos cristalizarse, Toni la observó mientras negaba y sin decir palabra alguna continuó su camino hasta llegar al comedor mientras que Sophia sé limpiaba las lágrimas de sus mejillas antes de hacer acto de presencia de nuevo en el comedor.
Una vez el desayuno finalizó, Toni llevó a Scarlett y Aiden a cepillar sus dientes mientras que Sophia se encargaba de Alondra y Salomé. La primera en marcharse del hogar fue Toni, después de dejar un beso en la mejilla de sus hijos y de haberse despedido de Bella salió rumbo a una reunión importante que tendría esa mañana, por su parte Bella y Sophia compartieron un par de palabras mientras empacaban los bocadillos de los pequeños, ambas les colocaron los zapatos y justo cuando la ojiazul estaba por tomar las llaves de su camioneta una llamada hizo sonar su teléfono.
-Buenos días, si con ella habla - fue lo primero que respondió para después prestar atención a la voz del otro lado- ¿Qué? Eso no, no puede ser posible- dijo sintiendo una presión en su pecho- Sí, de inmediato salgo para allá- cortó la llamada mientras sus manos comenzaban a temblar, sus ojos se cristalizaron mientras su respiración comenzaba a fallar-
-¿Sophia, qué te sucede?-dijo Bella al verla alterada-¿Sophia, está todo bien?- repitió y finalmente la ojiazul la observó para después negar-
-Debemos… debo ir al colegio de las niñas… algo anda mal- susurró mientras una lágrima rodaba por su mejilla-