Me duele la espalda.
Ha sido un viaje largo y estar sentada tanto tiempo en un autobús definitivamente me ha hecho mal, es por ello que ahora me encuentro en mi habitación recostada sobre la cama en la posición más cómoda posible, tratando de estirar cada uno de mis músculos.
Y también estoy pensando en ella.
Últimamente pienso siempre en ella.
Es como la manzana roja que Eva no pudo evitar morder, ella es esa manzana para mi. Y por más que trato de alejar mi vista de ella, e intento enfocarme en mi trabajo, en mis clases, no puedo.
Ella es especial, lo noté desde el primer día, la note desde la primera vez, ella y su gusto por las faldas, ella y esa manía de alisarlas a cada minuto, ella y su rostro angelical haciéndole total sentido a su nombre.
Nunca me han gustado mujeres menores que yo, he tenido novias de mi edad y uno o dos años menores que yo, pero jamás con alguien mucho menor que yo como lo es ella. Y no sé porqué me gusta tanto, Angela es un imán al que no puedo evitar sentirme atraída, y mientras más prohibida la siento más me gusta.
Me encanta esa mujer, todo se arreglaría con una noche, estoy segura, estas ansias de ella, si tan solo pudiera tenerla una sola vez estoy segura de que la superaría, de que podría olvidarla y seguir con mi vida. Solo una noche, tan solo una.
El sonido de la puerta interrumpe mis pensamientos, confundida reviso la hora dándome cuenta de lo tarde que es, 1:30 am, ¿Quién viene a tocar a esta hora?
Desconfiada camino hacia la puerta, es muy tarde como para visitas, posiblemente sea un asesino en serio, no estoy lo suficientemente loca como para abrir la puerta como si nada.
__ ¿Quién? __ pregunto con un hilo de voz, la garganta parece temblarme pues todo esto me da mala espina.
__ Angela __¿Angela? ¿Qué hace Angela aquí a esta hora?.
La idea de que le ha pasado algo o pueda necesitar mi ayuda cruza por mi mente así que abro la puerta de prisa y la tomo del brazo metiéndola a mi habitación, luego me encargo de cerrar bien la puerta con seguro, si Angela está en peligro yo daré mi vida por protegerla.
__ Estas bien __ le pregunto, pero ella solo esta parada en medio de la habitación, me mira y su respiración parece agitada, realmente no entiendo nada. __ ¿Angela? __ Camina hacia mi y me toma de los hombros.
No entiendo nada, y no entiendo la fuerza que tiene cuando me empuja y me hace caer a la cama, mucho menos entiendo el porqué se sube a mi regazo y se quita la blusa.
Angela no tiene nada debajo.
Sus hermosos y perfectos pechos quedan frente a mi rostro, justo a la altura de mis labios y por más ganas que tengo de tenerlos en mi boca me resisto cuando coloca su mano en mi nuca y trata de empujarme hacia sus pechos.
__ ¿Qué haces? __ le pregunto poniendo toda mi fuerza y voluntad en evitar caer ante tal tentación, aunque siento mi boca hacerse agua de solo mirar sus pezones __ Angela..
Ella lleva la cabeza a un lado, estirando de esa manera su cuello expuesto a mi y creando un maravilloso espectáculo con sus pechos.
__ Tócame, Elena __ sus brazos se envuelven sobre mis hombros, dejándonos aún más cerca, mi rostro queda entre sus pechos __por favor, tócame.
A la mierda todo, voy a hacer esto y lo voy a disfrutar tanto.
Ella no necesita pedirlo de nuevo pues no me demoro nada en atrapar uno de sus senos en mi boca, la escucho gemir de gusto al ser complacida, no puedo evitar que la pasión me llene cuando se trata de ella, paso mi lengua sobre su pezon, lo tomo entre mis dientes, lo chupo, ella suelta suspiros y continúa sujetando mi nuca sin permitirme alejarme. Mis manos, que no se pueden quedar quietas cuando se trata de ella, comienzan a acariciar sus piernas, su trasero, su espalda, quiero recorre todo su cuerpo, quiero que mis manos se aprendan su piel de memoria, quiero no olvidar esto nunca porque será la primera y última vez que voy a tocarla de esta manera.
__ Quiero tu lengua en otra parte __me dice haciéndome emocionar por su invitación, se pone de pie y se deshace de sus pantalones, lo único que veo ahora son sus bragas __ quitamelas.
Que me de ordenes comienza a gustarme de más.
Me hace sentir inexperta, porque la miro embobada sin hacer que hacer, porque nada más que la parte inferior de su ropa interior la cubre y ella parece tan tranquila frente a mí, enseñandome sus pechos, invitandome a desnudarla completamente después de decirme que quiere mi lengua.
Es mi diosa, ella es mi ángel, así que obediente a ella caigo ante sus pies, arrodillada y dispuesta a hacer todo lo que ella pida. Coloco mis manos sobre los dobladillos de sus bragas y comienzo a tirar para abajo...
__ ¡Elena! __ pero que mier.. __ ¡ELENAAA!
Me siento de golpe en la cama, tanto que creo incluso me he mareado. Observo mi habitación vacía, el sol entra por las ventanas y la voz de la subdirectora Martha resuena detrás de mi puerta.
¿Estaba soñando?
__ ¡Elena! ¡Despierta!
__ ¡Ya me he levantado! __ le respondo molesta, aún sin poder levantarme de la cama, solo soy capaz de mirarme en el espejo de enfrente sin ninguna expresión.
__ ¡Te recuerdo que a las 7 hay que estar en el lobby!
__ ¡Sí!
No tengo ni idea de que hora es. La verdad es que ahora eso es lo que menos me interesa.
Lo que definitivamente si me importa es el porqué tuve un sueño húmedo con Angela, y el porqué me siento tan incomoda con la laguna entre mis piernas.
Y aunque me cueste admitirlo, realmente me siento molesta y desilusionada de que todo haya sido un sueño, de que Angela jamás haya llegado a mi habitación, de que jamás la he visto tan descubierta como en mi sueño.
Porque si Angela realmente viniera a pedirme hacerla mía, no habría poder humano que me detenga para adueñarme de su cuerpo.
Estoy jodida.
Cada día la deseo más y más.
Una vez resignada ante la punzante desilusion en mi pecho logro por fin terminar con mi rutina matutina y arreglarme para estar en el lobby puntualmente. Como es de esperarse los maestros somos los primeros en llegar y poco a poco comienzan a hacerlo los alumnos.
Angela no tarda en aparecer con su compañera de habitación al lado, ambas juegan con una regla flexible que al parecer Angela intenta mantener en equilibro pero esta termina por caer a un lado. Aún así ella lo intenta varía veces hasta que por accidente la regla cae y le pega a Angela en la nariz por accidente provocando que se sobe con cara de enfado, y que su compañera estalle en risas.
Sonrío disimuladamente, porque esa adolescente que se acaba de golpear a sí misma con una regla es la protagonista de mis sueños calientes.
Cuando me doy cuenta de que Angela parece escanear la habitación con la mirada volteo hacia cualquier lugar, no quiero que se de cuenta de que la he estado observando, por el rabillo del ojo noto que ha empezado a caminar hacia mi.
__ Buenos días, profesora.
__ Buenos días, Marel __ ni siquiera me había fijado en lo condenadamente bien que se ve el día de hoy, con su falda negra escolar, su camisa de botones y manga larga color blanca, sus calcetas largas del mismo color y sus zapatillas negras.
Es una colegiala preciosa.
Y desde a partir de ahora si tengo que estar soñando con ella definitivamente quiero guardar esta imagen en mi cabeza, porque es así como quiero que se aparezca en mi habitación.
__ He estado repasando por la noche, resolviendo uno que otro ejercicio... __ la escucho pero mi atención total esta en sus labios, bonitos, carnosos y brillantes labios, pues tal parece que se ha colocado algún tipo de lipstick hidratante. Uno que me encantaría comprobar si tiene algún sabor __ pero creo que me he despertado algo mal, no se, igual y tengo algo de temperatura.
__ ¿Mmm? __ ella me mira confundida, como tratando de averiguar que sucede conmigo. Ni siquiera yo sé que sucede conmigo hoy __ ¿Te sientes mal? __ le pregunto, porque de todo lo que me dijo solo he escuchado la última parte.
__ No, sólo estoy un poco caliente, tócame __ Angela toma mi mano y la coloca sobre su frente.
Pero mi cabeza no está aquí, mis pensamientos mucho menos, pues su frase no ha hecho más que revivir aún más mi sueño.
"Tócame, Elena.... por favor tócame"
Entonces la recuerdo expuesta frente a mi, con sus senos a mi disposición, y no puedo evitar preguntarme, si sus pechos serán iguales a los de mi sueño.
__ No lo noto, me parece que estas bien __ yo soy quien definitivamente esta mal aquí y a lo mejor no puedo sentir su temperatura debido a que la mía esta en el punto más alto.
Me siento como una estúpida niña hormonal por tener enfrente a la protagonista de mi abundante humedad en la mañana.
Y la humedad que empieza a formarse entre mis piernas en este momento.
En el autobús camino al instituto donde se realizará el evento ella parece tan tranquila, se ha sentado al lado de su compañera de habitación y la observo platicar con ella alegremente. No tengo idea de que habla pero parece muy entretenida, tiene una gran sonrisa en el rostro y no deja de hablar y hablar.
La observo cada cierto tiempo, me gustan sus gestos, me encanta la manera en la que incluso estando sentada alisa su falda, el como mueve las manos para hablar, su ceño fruncido cada vez que no entiende algo y el como estalla en risas sin importarle nada.
Angela es preciosa.
__ Miss Landam, necesito que sea sincera conmigo __ La subdirectora Martha, quien se encuentra sentada a mi lado, habla haciéndome dejar de mirar a Angela asustada ante la idea de haber sido descubierta.
__ ¿Sí?
__ He confiada en usted y en su palabra cuando me ha dicho que Marel es capaz de hacer esto. Quiero confiar en ella también pero espero entienda que es complicado dado su historial. Así que solo quiero que me asegure que Angela realmente está preparada para esto, y que no me he equivocado trayendola aquí en lugar de Valentina.
Bueno, entiendo ese punto. Si bien en un principio yo también llegué a tener una idea equivocada de Angela debido a su historial académico, conforme paso el tiempo y conforme fui dándole tutorias pude darme cuenta de la maravillosa alumna que es cuando le pones atención, cuando te interesas en su aprendizaje. Angela tan solo necesitaba un poco de motivación para comenzar a demostrar su gran potencial.
__ Subdirectora, yo le aseguro, le prometo que Angela se merece estar aquí hoy, ella se ha esforzado mucho por esto, se ha preparado y se interesa realmente por el concurso. No hay nadie mejor para representarnos hoy que no sea ella.
__ Esta bien __ la subdirectora suspira __ si usted confía en ella yo lo haré también. Solo espero no decepcionarme.
Yo no desconfío de Angela ni un poquito, porque otra cosa que me encanta de ella es su cerebro, su manera rápida de entender las cosas cuando está totalmente concentrada, su rapidez para hacer análisis, para encontrar soluciones.
Debo dejar de pensar así de ella, últimamente es un vicio mío comenzar a enlistar todo lo que me llama la atención de esa mujer.
No acostumbro pasar por esto, soy buena con las mujeres, muy buena, siempre termino estando con la mujer que me gusta, tengo mucha suerte para conquistar mujeres. Y se que puedo hacerlo con Angela si me lo propongo, pero es que el hecho de que es mi alumna sigue haciéndome ruido cada vez que la tengo cerca, y la gran brecha de edad entre nosotras también.
Saciar mis ganas de ella solo me traería problemas, y no se que tanto valga la pena poner en riesgo mi empleo por caer en la tentación.
Aunque mi sueño sigue tan presente en mis recuerdos, porque ahora no puedo parar de imaginármela sin esa linda falda y su uniforme, porque ahora no puedo parar de preguntarme como será en realidad si la tuviera enfrente.
Cuando por fin llegamos al lugar del evento Angela regresa a mi lado, se que se siente más segura y tranquila cuando puede apoyarse en mi, somos un equipo después de todo, y ahora sé lo realmente nerviosa que llega a ponerse ante estos eventos.
Y mis ganas de cuidarla no me dejan estar lejos de ella.
__ Los asientos son algo incómodos __ se queja en un susurro, como si la subdirectora le pudiera arrancar la cabeza si llegara a escucharla.
__ Lo son, ¿aún te sientes con temperatura?
__ No, creo que estoy mejor, solo era los nervios __ mientras dice eso pasa su mano por su cuello tratando de sentir su calor corporal, sigo sus movimientos con la mirada.
__ Me alegra saber que estas bien.
__ Tú te ves un poco roja __ me dice, si lo estoy o no realmente no lo sé, lo único que se es que tiene unos labios divinos.
__ Estoy algo caliente.
__ ¿Ehh?
__ Sí, quizás yo si tengo temperatura __ le digo, ella me mira preocupada y la veo revisar su mochila.
__ Ten una de estas, mi mamá dice que son muy buenas __ me ofrece una pastilla, tiene una linda sonrisa cuando lo hace y se mira tan tierna y amable que me da coraje.
__ Gracias __ la tomo entre mis manos, ella parece observarme en espera de que me tome la pastilla. Me mira fijamente, impaciente, así que no tengo más remedio que llevarla a mi boca y tragarla.
Eso parece ponerla feliz pues cierra su mochila de nuevo y la cuelga correctamente sobre su espalda para terminar por sujetar las correas.
__ ¿Cuánto tiempo crees que demore en empezar?
__ No más de una hora __ ella asiente, la noto preocupada, inquieta, así que me atrevo a preguntarle el motivo __ ¿pasa algo?
__ Mhmm, en realidad sí __ me mira apenada, como si sintiera vergüenza de hablar conmigo __ es que me gustaría repasar un poco, me siento algo intranquila.
No sé qué tanto me convendría estar a solas con Angela en este momento, en mi estado y con los pensamientos que no me han abandonado hoy después de aquel sueño, la verdad no me parece una opción muy segura estar en un espacio cerrado sola con ella.
Pero es mi trabajo, ella es mi responsabilidad y sobre todo después de prometerme a la subdirectora que Angela merece estar aquí.
Y bueno, el pequeño puchero de Angela también tiene mucho que ver en mi decisión de aceptar darle el repaso.
__ Podemos hacerlo unos minutos. Busquemos un aula __ ella asiente y me sigue.
__ Sabes, aveces me pregunto como es que decidiste ser maestra de matemáticas.
__ Bueno, no era el plan al principio __ le digo y ella parece ponerme toda la atención del mundo __ aunque cuando yo cursaba el bachillerato siempre me gustaba participar en esta clase de eventos. Pero no sólo eran números, también iba a declamación, ajedrez, poesía e incluso pintura.
__ ¡Wow! ¿Eres una clase de multitalentos?
__ Era una nerd __ respondo rodando los ojos y la escucho reír con fuerza, cuando por fin doy con un aula vacía abro la puerta dejándola entrar primero, luego lo hago yo y me encargo de cerrar bien.
__ No soy capaz de imaginarte como nerd. ¿Usabas lentes y esas cosas?
__ Muchos estereotipos señorita, Marel __ bromeo con ella __ no, en realidad nunca fui la clase de nerd que una persona se imagina al escuchar esa palabra. Solía tener muchas enemigas, me envidiaban por ser bonita e inteligente, decían que no podía ser ambas cosas.
__ Eso suena estúpido.
__ Es estúpido __ ambas reímos, me gusta acordarme de mis días de colegio, los días con mis amigos, las clases, mis maestros, fue una etapa muy linda de mi vida y estar en casi todos los clubes de la escuela me ayudo a conocer muchísimos lugares, fui de viaje a varios estados del país __ pero supongo que a cierta edad todos somos algo estúpidos.
__ ¿Crees que ahora soy estúpida? __ me pregunta mientras va colocando sobre el escritorio su libreta y lápiz para luego sentarse justo frente a mi.
__ No lo creo, tal vez lo fuiste años atrás. Pero ahora no lo eres __ Angela alardea de si misma moviendo su cabello de un lado a otro haciéndome reír __ Eres una compañera maravillosa para todos los otros chicos de tu salón, siempre te preocupas por tu mamá, y se que amas a tu hermano. Puedes ser algo rebelde en la escuela pero en casa eres un pan de dios, a tu madre se le nota de lejos lo orgullosa que está de ti, de la educación que te ha dado y del cómo nunca dejas de tenerla en cuenta para cualquier decisión. Creo que eres una rebelde de mentira.
__ ¿Rebelde de mentira? __ su cara ha pasado de estar cohibida a la indignación, me mira con ambas manos sobre sus caderas __ ¿Cómo se es una rebelde de mentira?
__ Bueno, te portas mal en la escuela, pero en casa eres la niña buena de mamá.
__ ¡Hey! __ me empuja juguetonamente, sus mejillas están algo sonrojadas y rie divertida __ no me digas así, sólo no me gusta causarle problemas a ella. Mi mamá ha pasado por mucho para darnos todo a mi y a mi hermano, me gusta ser agradecida.
Lo sé, lo he notado. He tenido muchísima más oportunidad de hablar con su madre que con ella, y no hay una sola cosa mala que doña Rosa me haya dicho de su hija, Angela es su mayor apoyo, y es una hija maravillosa. Aunque en la escuela sea un poco desatada.
__ Ven, niña buena __ continuo burlandome de ella, solo me gusta hacerla molestar __ dime, ¿en qué te queda dudas?
Ella toma asiente a mi lado en el escritorio, me mira aún con mala cara pero parece estar sonriendo. La escucho hablar, exponerme sus dudas, y yo me permito admirarla por solo unos segundos. Me encanta la manera en que sus facciones cambian cuando se trata de los ejercicios, su concentración, su rostro serio puede ser incluso más atractivo que cuando sonríe, y me pregunto como eso es posible teniendo una sonrisa tan bonita como la suya.
__ ¿Por qué tiene que haber integrales de funciones trigonométricas? __ bufa exasperada, porque sé que aún continúa confundiéndose entre seno y coseno en álgebra y ahora verlo también en cálculo es un martirio para ella.
__ La magia de las matemáticas es que puedes jugar con ellas tanto como quieras. Eres muy buena en álgebra, puedes usar eso a tu favor.
Me mira con cara de "¿y esta loca de que habla?", lo entiendo, Angela suele ser muy de seguir el procedimiento paso a paso, aprenderse las leyes, restricciones, instrucciones. La mayoría entienden, aprenden y enseñan las matemáticas de esa manera, por ello suelen ser tan tediosas y a muy pocas personas les gusta.
__ No entiendo, ¿Qué tiene que ver álgebra aquí?
__ ¿Te acuerdas de los métodos del sistema de ecuaciones?
__ Sustitución, igualación y reducción __ responde sin siquiera detenerse a pensarlo, esa es mi chica lista.
__ Bueno, podemos resolver estas integrales por medio de la sustitución por ejemplo __ entrecierra los ojos mirándome con desconfianza.
No puedo evitar reírme de su rostro, ha hecho un gesto muy gracioso de confusión. Así que con toda la paciencia del mundo le explico paso a paso como resolver un problema que se le complica con un método que ella ya conoce y maneja bastante bien, mi objetivo es hacérselo todo más fácil. Su cara parece iluminarse cuando entiende todo y logra conectar cada paso, ahora está feliz y resuelve con rapidez, luego me lo enseña con la boca abierta, sorprendida de si misma por haber resuelto lo que en un principio le parecía imposible.
__ ¡¿Por qué no me lo enseñaste así desde el principio?! __ se queja, pero al mismo tiempo parece tan emocionada e incrédula __ ¡Era tan fácil! ¡Eres la mejor maestra! __ chilla emocionada y en un parpadeo la tengo abrazándose a mi cuello, cierro los ojos ante el contacto, porque me he distraído con la clase rápida, pero sigo extremadamente sensible a ella.
Mi mente que me juega en contra recuerda una y otra vez las imágenes de mi sueño, como estoy sentada ella está frente a mi, reclinada a la altura de mi cuerpo y por sobre su cuello puedo notar su trasero levantado.
No, no mires.
Cierro los ojos de nuevo y la abrazo de vuelta, mientras más rápido se sienta correspondida más pronto se alejará de mí. Y necesito que lo haga porque yo no soy capaz. Por mi la tomaría de las caderas justo ahora y la haría sentarse en mi regazo, así tendría oportunidad de acariciar esas largas piernas que han estado tentandome toda esta mañana expuestas por su linda falda escolar.
__ Muchas gracias, en verdad __ cuando por fin se aleja me sonríe y parece tan ajena a mi, a mis pensamientos, a mi temperatura, a mi respiración algo inestable.
__ No tienes nada que agradecer, te recuerdo que somos un equipo. Y... __ suspiro, porque en un a escala de 1 al 10, esto es definitivamente retroceder muchísimos pasos hacia atrás en mi intento por alejarla de mi __ también somos amigas.
__ ¿No me quitaras tu amistad en unos días? __ se ríe divertida, se que esta burlándose de mi así que ruedo los ojos.
__ Intentaré que no.
__ Qué tu amistad no incluya encerrarme en habitaciones solas __ me advierte, abro la boca indignada. ¡No tenía pensado hacer eso de nuevo! De hecho, es todo lo que trato de evitar.
__ No, yo...
__ Ni besarme indebidamente __ bueno, tampoco tenía pensado hacer eso __ y nada de darme nalgadas, por sobre todas las cosas, nada de eso __ ahora he bajado la cabeza apenada. Su rostro es de seriedad total, parece realmente estar enojada conmigo.
No puedo creer que hice todo eso.
Y el hecho de que ahora ella me tenga que advertir que no tengo permitido hacerlo me hace sonar como una completa acosadora y abusiva.
Que pena y vergüenza conmigo misma.
__ Perdóname por... bueno... eso __ le digo, tal vez fue mala idea decir que somos amigas, dado el historial y mi pésimo comportamiento.
Pero la habitación se llena de su risa, sus carcajadas son fuertes y se agarra la panza como si le doliera.
__ ¡Estoy jugando! No estoy enojada tranquila __ continúa riéndose, ahora un poco menos __ aunque eso no significa que puedas hacer eso.
__ Lo sé __ cómo se ha burlado de mi la desgraciada esta __ no tenía pensado hacerlo. Solo somos amigas, amigas de verdad.
__ Amigas de verdad __ asiente y siento esa gran barrera que ella ha puesto entre nosotras.
Pero fue mi culpa, yo puso el primer ladrillo y ella se encargo de construir todo lo demás.
Pero es lo mejor.
Ella tiene más fuerza de voluntad que yo.
__ Elena __ me llama porque me he quedado mirando un punto fijo de la pared blanca.
__ ¿Mhmm? __ la miro.
Ella juega con los dedos de su manos y se acerca lentamente, tiene una sonrisa hermosa pero sus mejillas parecen ponerse cada vez más rojas. Intenta decir algo pero parece arrepentirse o no saber como hacerlo pues la veo abrir y cerrar la boca en varias ocasiones. Entonces suspira y parece armarse de valor antes de soltar las siguientes palabras.
__ Te quiero __ me dice, sus ojitos brillan y tiene el rostro más bonito del mundo. Me tiene sonriendo como tonta, se mira tan linda diciendo que me quiere. Y tal vez debería asustarme, tal vez debería alejarme, pero en este momento solo siento el corazón latiendo como loco, porque es la primera vez que me dice eso, y ha sonado tan sincero, tanto que no dudo ni un segundo de que realmente lo hace.
Ella me quiere.
Y yo se que ella me importa, no como me importan todos mis alumnos, no así. Me importa de una manera diferente, y también se que me atrae demasiado. Más de lo que puedo controlar.
¿Pero la quiero también?
"Alumnos y profesores participes de las Olimpiadas fase estatal, favor de pasar al auditorio. Esta es la primera llamada"
La voz de aquel hombre por los altavoces es como ser salvada por la campana, porque no tengo idea de que decirle. ¿Qué se le responde a eso?
Me ha encantado, y me tiene complemente feliz, pero la parte de corresponder, esa parte, esa aún es complicada para mi.