"No tengo novia, pero tengo... novio"
Después de que Bian Xinyu entró apresurada al restaurante, Qiu Yi se quedó afuera de la puerta trasera por un rato más.
La pregunta que hizo Bian Xinyu fue repentina. Su respuesta fue muy abrupta, junto con un poco de confusión.
¿Es una novia?
Esta pregunta para Qiu Yi, era un poco en sí enredosa.
Y finalmente lo negó.
Debido al punto en que no podía aceptar su sexualidad con calma, siempre sintió pena por Bian Nan debido a esto. No podía contarle a su familia, ni tampoco encontrar una buena manera de hacerlo. Lo único que podía hacer, era trabajar duro para cambiarse a sí mismo.
Aún dentro de esas ocasiones en que pensaba en su madre, lo hará. Creía que al menos debería comenzar a aceptarse de esta manera.
No es difícil decir que se trataba de una novia, es fácil y simple, y ahorra muchas molestias.
Pero aun así dijo que no. Era como una especie de ritual y por primera vez, se sintió estampado por sí mismo en su corazón.
Qiu Yi, tienes novio.
Aunque es alguien ingenuo, tampoco es algo fácil para él.
Qiu Yi sonrió y se adentró al restaurante.
Después de la hora más ocupada para atender clientes al mediodía, hubo todo tipo de limpieza y terminó alrededor de las cuatro en punto. Después llegaría una hora de descanso y luego de eso, vendría la cena.
Bian Xinyu probablemente estaba lo suficientemente ocupada, Qiu Yi vio que caminaba hacia el salón junto a otras dos chicas, mientras arrastraba un poco los pies. Cuando llegó por la mañana del día siguiente, todavía saltaba y se apresuraba como el viento.
Qiu Yi creía que esta señorita mimada terminaría acabada por la noche, y tan pronto como llegue a casa, no iba a estar aquí por la mañana.
El arduo trabajo de caminar de un lado a otro, y estar de pie durante horas y horas, no era una gran sensación que se pudiera soportar apretando los dientes. Después de tomar un descanso y recuperarse, era aún más incómodo. Cuando llegó por primera vez aquí, después de medio mes, ya no quería venir en los días siguientes.
Qiu Yi fue al vestuario a cambiarse de ropa, conversó con el capataz y cuando estaba a punto de irse, se encontró con Xiao Man.
—¿Tienes prisa? si no la tienes, ¿podemos conversar un poco? —Xiao Man lo detuvo.
—Mm —Qiu Yi siguió a Xiao Man hasta el segundo piso y entró a una sala privada con balcón.
Cada vez que Xiao Man habla con los empleados, rara vez lo hace en la oficina. Por lo general se va hacia una sala privada que no se esté utilizando, diciendo que todo sería mucho más agradable, ya que la oficina se veía como algo demasiado formal.
—Bian Xinyu es tu amiga, ¿verdad? —preguntó Xiao Man después de sentarse.
—Es la hermana de mi amigo, la conozco —Qiu Yi también se sentó.
—Mm, es una chica bastante inteligente —Xiao Man se sonrió: —Parece ser la bebé de toda la familia, y aún así es capaz de soportar las dificultades.
—La condiciones de su familia son bastante buenas —dijo Qiu Yi.
Xiao Man conversó casualmente con él una cuantas palabras más, y luego cambió de tema: —¿Dijiste el otro día que no podrás venir a fin de año? ¿Para tu pasantía abordarás?
—Sí —Qiu Yi asintió.
—¿Subirte a un barco no será algo difícil? —preguntó Xiao Man.
—Hay barcos nacionales comerciales, van y regresan. La duración es de solo unos pocos días, por lo que está bien —dijo Qiu Yi. Por el rabillo de su ojos, miró el reloj de la muñeca de Xiao Man, estimando el tiempo en el que tardaría irse.
—¿No has considerado continuar trabajando en el restaurante? —Xiao Man sonrió.
—¿Eh? —Qiu Yi la miró.
—Sabes que abriremos dos nuevas sucursales el próximo año, ¿verdad? —dijo Xiao Man: —Quiero tener a algunas personas confiables. Puedo recomendarte con el señor Chen y a algunos más para que puedan ayudar.
Qiu Yi no dijo nada. Sabía lo que Xiao Man quería decir con "ayudar", ya que definitivamente no es un puesto de solo ser un camarero o algo así.
—¿Estás interesado? —preguntó Xiao Man, al verlo estar en silencio.
Realmente estaba interesado. Si lo aceptaba, este trabajo será mucho más fácil que abordar un barco, y ganar mucho más dinero sin la necesidad de estar fuera de casa por unos días, pero...
Qiu Yi siempre ha mantenido la distancia con Xiao Man, y aunque Xiao Man era una ronda mayor que él, él no era estúpido. Todavía podía sentir que la actitud de Xiao Man hacia él iba mucho más allá que con un empleado ordinario, ya sea tratándolo como un hijo o hermano, o algo más, por lo que Qiu Yi no estaba dispuesto.
Quería evitar todos los problemas innecesarios. Obviamente, esto no se basaba solo en sentir aquel sentimiento en los favores debido a sus habilidades, en sí, era el no deberle nada a nadie.
—Estudié trasporte marítimo durante tres años y mi primera opción de trabajo es encontrar algo en relación a eso —Qiu Yi sonrió: —Siempre he trabajado como mesero en este restaurante y eso es todo lo que conozco. Pero creo, Man-jie, que deberías encontrar a alguien que conozca mucho mejor el restaurante, por lo que definitivamente yo no soy el adecuado. Si algo no sale bien al final, ambos terminaremos incómodos.
Xiao Man inclinó la cabeza y lo miró fijamente durante un rato, para luego finalmente sonreír: —Sabía que te negarías, nunca he conocido a un chico igual a ti. Pero bueno, no hablemos sobre esto, ¿Quieres a lo menos volver a pensarlo?
—Mm —Qiu Yi asintió, no bloqueando su camino.
—Está bien —Xiao Man se colocó de pie y dijo con una sonrisa: —Puedes irte.
—Mm, Man-jie, trabajas duro —Qiu Yi se colocó de pie y salió de la sala privada.
Qiu Yi se paró frente al mapa que estaba en la parada de autobuses y estudio las diversas rutas hacia Zhan Fei. Después de que se subió al autobús, sacó su teléfono y revisó el mapa, pensando en encontrar la ruta menos concurrida hacia la casa de Bian Nan.
Para cuando salió del autobús, básicamente todo lo tenía claro y escribió la ruta en su bloc de notas.
La sede de Zhan Fei no estaba lejos de la estación de autobuses, caminó por unos cinco minutos y fue capaz de ver la puerta de un club de alto nivel.
Tan pronto como entró por la puerta, una asistente con ropa deportiva lo saludó: —¿Tienes reservado un lugar o vienes a jugar un partido?
—Estoy buscando a alguien —Qiu Yi miró hacia adentro, preguntándose si había alguien aquí familiarizado con Bian Nan, quien no ha estado aquí por mucho tiempo: —Bian Nan.
—Si estás buscando a Bian Nan —la chica sonrió y le señaló un pasillo que conducía hacia la cancha: —Ve por ahí, debería estar jugando en la cancha número siete.
—Gracias —Qiu Yi asintió y se encaminó.
Al final del pasillo, había un pequeño camino pavimentado con arcilla de color roja, plano y limpio. Habían dos canchas de tenis una al lado de otra, como también al otro lado. Básicamente, la mayoría eran personas calculando sus ritmos en los campos.
Qiu Yi no avanzó mucho por el camino hasta ver la cancha número siete. Al mismo tiempo, vio un hermoso y poderoso salto mortal de Bian Nan, con su traje deportivo en medio del campo.
Bian Nan de pie en medio de la cancha de tenis, siempre está lleno de energía y cada uno de sus movimientos son hermosos.
Qiu Yi se colocó de pie fuera de la red de hierro y lo observó por un rato. Finalmente chasqueó la lengua. Era un poco triste que su piel morena estuviese oculta por ese traje deportivo de color azul.
El oponente de Bian Nan debería ser Luo Yiyang, o eso es lo que se dijo. Después de algunos lanzamientos, podía ver que había una gran brecha entre su fuerza y movimiento, pero el nivel de lucha era bastante alta. Al final, agitó la mano: —¡Este segundo joven maestro, ha vuelto a perder!
—Joder —Luo Yiyang dio un golpe al aire: —¡Juguemos otra vez luego de un descanso!
—No más, eres en verdad interminable y ya me aburrí —dijo Bian Nan, levantando la mano y pasando su muñequera sobre su frente: — mira, sin una gota de sudor.
—¡Un juego más! ¡Apostaré mi barba! —gritó Luo Yiyang.
—¿No el presidente Luo te hizo afeitar esa barba tuya? —Dijo Bian Nan, divertido: —Apostar mi trasero.
—Apostaré mi barba de este año, no me lo dejaré crecer y no me haré mi bigote favorito —Luo Yiyang era muy insistente.
—Oh vamos, en primer lugar no deberías haber conservado esa clase de bigote, te pareces a Lu Xun [1]... —Bian Nan lo ignoró. Cuando se dio la vuelta para tomar su chaqueta, giró la cabeza y vio a Qiu Yi de pie fuera de la cancha: —Joder, ¿en qué momento entraste?
—Hace diez minutos —dijo Qiu Yi con una sonrisa.
—Pasa, siéntate un rato —Bian Nan le hizo una seña y le presentó a la gente del campo: —Mi amigo Qiu Yi, mi entrenador, Gu Wei y el general derrotado se llama Luo Yiyang.
Qiu Yi saludó y se sentó en la banca que estaba a un lado.
—Te llamas Qiu Yi, ¿verdad? —Luo Yiyang se acercó y giró la raqueta en su mano: —¿También juegas tenis? ¿Vienes a jugar? apostemos nuestras barbas.
—Yo... —Qiu Yi contuvo su risa: —no tengo barba.
—Si yo pierdo, me afeitaré la barba por un año y si tú pierdes, te dejarás crecer la barba —dijo Luo Yiyang: —¿Te atreves?
—No sé jugar al tenis —dijo Qiu Yi.
—No eres interesante, —Junto con una expresión de incredulidad, Luo Yiyang se dio media vuelta y le dijo a Gu Wei: —¡Gu Jiao, juguemos!
A Gu Wei lo tenía tan aburrido, que se quitó su abrigo y se colocó de pie.
—¿Es este el hijo del presidente del que me dijiste? —Qiu Yi miró a Luo Yiyang, quien estaba jugando con Gu Wei en la cancha.
—Mm —Bian Nan se sentó a su lado y se rió dos veces: —¿No parece ser un joven maestro, verdad? cuando traté por primera vez con él, sentí que estaba en problemas.
—¿Está aquí todos los días? —preguntó Qiu Yi
—Sus vacaciones comenzaron, así que viene aquí cuando no tiene nada que hacer y siempre me lleva a jugar con él... —Bian Nan se detuvo hasta la mitad de su oración, giró la cabeza, lo miró y comenzó a reír.
—¿Qué es esa risa tonta? —Qiu Yi no pudo evitar reírse, después de que se dirigió a él: —No estoy celoso.
—¿En serio? —Bian Nan seguía aún muy feliz.
—De verdad, al menos, no ahora —dijo Qiu Yi con una sonrisa: —Estar celoso en este momento, significaría que no confío nada en ti.
—Muy consciente —Bian Nan chasqueó los dedos, mirando a las personas que corrían dentro del campo por un segundo, y luego decir en voz baja: —Realmente no es sencillo que a mi me guste alguien, ya es un hecho increíble que tú me gustes, supongo que es porque eres demasiado bueno.
—¿Es eso un cumplido? —Qiu Yi levantó la comisura de su boca.
—Sí —Bian Nan asintió con seriedad.
Qiu Yi recordó que hace mucho tiempo atrás, acompañó a Bian Nan a la casa de su madre y junto con esa palabras que una vez le dijo, supo en ese momento que Bian Nan no confiaba demasiado en esta clase de sentimientos.
Esto es realmente un cumplido.
Después de ver el juego por un rato, Bian Nan se colocó de pie y se estiró: —Vamos, a cenar.
—¿No te irás a duchar? —Qiu Yi también se colocó de pie.
—No lo haré, no sudé mucho hoy. Cuando llegue a la casa lo haré, mejor apresurémonos y tengamos una cita —Bian Nan dio unos saltos.
—Está bien —dijo Qiu Yi.
. . .
Bian Nan le dio aviso a Gu Wei y a Luo Yiyang, para luego sacar a Qiu Yi de la sede: —¿Qué sientes al respecto con este lugar?
—El ambiente de trabajo es bastante bueno —Qiu Yi miró a su alrededor: —¿Sueles terminar cansado?
—No demasiado, es posible que no sepa hacer otra cosa, pero al menos este mundo lo entiendo—Bian Nan se rascó la cabeza: —Oye, Bian Xinyu no te causó problemas cuando fue a trabajar al restaurante, ¿verdad?
—¿Qué problemas puede causar? lo hace bien, pero supongo que no durará otro dos días más —dijo Qiu Yi.
—Eso es algo inexacto. Aunque Bian Xinyu es aprensiva, es alguien bastante terca y orgullosa —Bian Nan colocó su brazo sobre sus hombros y lo abrazó: — Procura mantener la distancia.
—Sí —Qiu Yi asintió con seriedad.
Era nuevamente la hora punta. Así que ambos decidieron apretujarse junto con los demás y solo encontraron un lugar cerca para poder comer.
—Si Erbao se entera que no lo llevamos a cenar, no estará muy feliz —Bian Nan suspiró.
—Le dije que iba a trabajar horas extras esta noche, él no lo sabe —Qiu Yi sonrió: —Planea cocinar sus propias gachas de costillas de cerdo hoy.
—Erbao es realmente muy capaz —Bian Nan chasqueó la lengua: —Cuando crezca aún más, será mucho más agradable que tú, Erbao no será tan grosero como tú.
—No me interesan mucho las personas. Pero aún cuando no me interesan, soy capaz de preocuparme por ti —Qiu Yi le dio unas palmaditas en la espalda.
—Es cierto que lo haces, a cambio, ¿Quién cuidaría de ti cuando estés herido o enfermo? —Bian Nan chasqueó la lengua.
—Shen Tao —dijo Qiu Yi con una sonrisa: —él cual fue despedido por tu culpa.
—¡Ciertamente él no es tan considerado como yo! —Bian Nan levantó la voz con molestia, y después de unos segundos, bajó la voz: —Oye, tú y Shen Tao...
—¿Me estás preguntando esto recién ahora? —Qiu Yi se rió: —¿No debió haber sido preguntado desde un inicio?
—No estaba lo suficientemente apegado a ti, tampoco tenía el tiempo para pensar en eso —dijo Bian Nan.
—¿Qué podría tener con Shen Tao? para él es inaceptable, y porque soy yo, lo tuvo que aceptar a regañadientes —Qiu Yi suspiró.
—¿En serio? —Bian Nan se sorprendió: —Pensé que siempre fue un gran apoyo, Wan Fei no sintió nada en especial.
—¿Pueden ser todas las personas iguales? —dijo Qiu Yi.
Así es, Bian Nan de pronto pensó en su padre, ¿Cómo reaccionaría él ante esto?
¿Qué hay de su tía?
¿Qué hay de Biao Hao?
¿Qué sucedería con Bian Xinyu?
Era invierno y oscureció más temprano cuando salieron. Las luces de las calles estaban encendidas y la nieve seguía flotando en el aire. Los dos se sintieron muy desolados mientras caminaban por la calle, así que encontraron un pequeño restaurante y se adentraron.
Bian Nan pidió tres platillos al azar y se colocó el abrigo después de haberse sentado por un rato: —Cuando llegue el calor, me sentiré a gusto.
—Tan inseguro —Qiu Yi sonrió, sacó su teléfono, hizo clic en su bloc de notas y se lo entregó: —Aquí, mira, de acuerdo con esta ruta, el autobús y el metro no se encuentran demasiado llenos cuando te vayas a casa, solo que te costara dos yuanes más.
—Maldita sea, —Bian Nan quedó atónito, luego se quedó mirando el bloc de notas por un momento: —Qiu Yi, eres tan jodidamente considerado.
—Simplemente se siente que no pensarás en esto por ti mismo y temía que te empujaran hacia la plataforma todos los días —Qiu Yi apoyó su barbilla: —No hay problema alguno.
—Esta es una de las razones por la que me gustas —Bian Nan le dio un pulgar hacia arriba: —Me haces sentir muy a gusto.
Qiu Yi sonrió y se quedó en silencio.
Hacía frío, por lo que básicamente no habían personas en la calle y también habían muchas tiendas cerradas antes de las nueve. A excepción de los bares o los café, habían pocos lugares para que ambos tuvieran una cita.
Pero a Bian Nan no le importaba, solo quería salir porque quería ver a Qiu Yi y quedarse junto a él por un rato, sin importarle la hora o el lugar.
Sin embargo, Qiu Yi aún no estaba completamente recuperado de su resfriado y en ocasiones tosía. Así que ambos caminaron por la calle y se adentraron a la ciudad de videojuegos.
En el pasado, sumergirse en la ciudad de los videojuegos, era la mejor manera para pasar el rato cuando se sentía aburrido. Wan Fei y él podían quedarse un día completo, pero ahora se sentía muy diferente.
Esas máquinas de juegos que tanto le atraían, ya no lo interesaban por completo. Después de jugar por un rato, llevó a Qiu Yi a un pequeño bar de ocio, subiendo hacia el segundo piso y pidiendo dos tazas de bebidas calientes y sentarse en un lugar en el que podía ver hacia la calle.
—¿Por qué lo mejor es estar callado? —Bian Nan miró hacia atrás y nadie los veía. Extendiendo la mano y tocando el cuello de Qiu Yi: —Cuando puedes hablar y tocar.
Así que ambos se quedaron allí, conversando y tocándose durante más de una hora.
Bian Nan miró su teléfono y cuando dijo que eran casi las diez, Qiu Yi levantó las cejas, sorprendido: —¿Ya es tan tarde? pensé que iban a ser recién las nueve.
—Eso es lo que pasa cuando estás conmigo —dijo Bian Nan, con orgullo.
—Mm —Qiu Yi lo tomó de la mano y lo apretó ligeramente: —Cuando regrese, el tiempo volverá a pasar lentamente.
—¡Demasiado dulce! —Bian Nan chasqueó la lengua.
—Si no te gusta escucharlo, no lo diré más —Qiu Yi se estiró.
Bian Nan volvió a chasquear la lengua: —Me encanta escucharte, ¿está bien?
—Solo lo dije por decirlo —Qiu Yi se colocó de pie.
Bian Nan lo siguió felizmente durante mucho tiempo, y Qiu Yi se estaba sintiendo impotente, por lo que miró hacia atrás: —¿Puedes calmarte un poco?
—Imposible —dijo Bian Nan.
. . .
Ambos estuvieron muy ocupados después. Desde el lado de Qiu Yi, se debía a la falta de mano de obra y desde el lado de Bian Nan debido a las vacaciones, por lo que les fue muy difícil para ambos reunirse. Cuando uno estaba disponible y llamaba, el otro no estaba ni siquiera disponible para contestar.
Qiu Yi miró el calendario y calculó cuidadosamente el horario. La víspera de Año nuevo estaba por llegar, el día de San Valentín antes, por lo que quería ver si algo se ajustaba al horario para esa noche y salir con Bian Nan para ese festival.
Pero parecía que no era posible, así que tendría que cambiar de turno.
Qiu Yi apoyó su mano sobre la pared y miró el pequeño calendario de escritorio que había en la recepción y pensando con quien cambiar de turno, alguien sin una novia o novio. Bian Nan y él no se han visto en casi medio mes, y esta vez, realmente extrañaba a Bian Nan.
A veces, deseaba que Bian Nan fuera de pasante a su restaurante, ya que, Bian Xinyu y él básicamente se veían todos los días.
Después de que confirmó de que podía cambiar de turno con Zhang-jie del mismo turno, fue a hablar con ella. Prometiéndole que la reemplazaría durante los dos días de Año Nuevo Chino, y ella, accedió cambiar turnos con él.
Qiu Yi movió los brazos de buen humor y fue al salón, a hablar con el capataz.
—De acuerdo, entonces descansarás para el día de San Valentín —el capataz dijo con una sonrisa: —Los jóvenes son realmente problemáticos.
Qiu Yi sonrió y no dijo nada, se dio media vuelta y se retiró del salón.
Tan pronto como salió, se encontró con Bian Xinyu, quien iba entrando y se masajeaba los brazos. Cuando lo vio, sonrió: —¿Un turno para el día de San Valentín?
—Mm —Qiu Yi asintió y se alejó.
. . .
—¡Muy difícil! —Bian Nan contestó el teléfono y se escuchó que estaba de muy buen humor debido a que pasaran juntos el día de San Valentín. Pero después de reírse, dijo con insatisfacción: —¡Demasiado difícil! ¡Todavía faltan algunos días!
—Pero no está nada mal. Yo tuve que tomar algunos días cuando Zhang-jie estaba en su segundo y tercer año de escuela de secundaria, y además, no he descansado en más de una semana —Cuando Qiu Yi escuchó la risa de Bian Nan, no puedo evitar levantar la comisura de su boca.
—No te preocupes, te daré un masaje —dijo Bian Nan: —Durante los dos días de Año Nuevo, tengo un descanso y puedo quedarme en tu casa.
—Está bien —dijo Qiu Yi.
Aunque todavía quedaban algunos días y Qiu Yi se sentía aún muy preocupado al saber adónde ir ese día. Como también, pensando en darle un regalo, pero no podía decidir qué obsequiar.
Le preguntó a Shen Tao, Shen Tao era alguien que al menos ha estado una vez en una relación, por lo que tendría más experiencia. Pero Shen Tan fue poco confiable esta vez.
—¿Chocolate? ¿anillo? ¿Collar? —Shen Tao pensó demasiado: —¿Un pastel? ¿Flores?
—Bian Nan es un hombre —Qiu Yi tuvo que recordárselo: —¿Puedes pensar en otra cosa?
—Nunca he pasado un San Valentín con un hombre —dijo Shen Tao, impotente: —¿Qué tal un cinturón y una billetera?
—Olvídalo, lo pensaré yo mismo —Qiu Yi suspiró.
De hecho, Bian Nan estará feliz con lo que sea que le den, e incluso si no le dan nada, Bian Nan no lo sentirá. Pero aún así, Qiu Yi lo pensó durante dos días seguidos y finalmente compró un poco de arcilla, y hacer dos cerditos que se abrazaban. Bian Nan y él, eran los cerditos.
El tiempo era un poco complicado, pero era mucho más fácil que hacer una figura de arcilla completa, y una versión pequeña de un cerdo era sencillo de lograr. Primero dibujó al azar dos cerdos sobre el papel, uno blanco y otro negro, y fue bastante divertido luego de mirarlo por un rato.
Los cerditos tardaron tres noches en hacerse, justo a tiempo para el primer día de San Valentín.
No es demasiado elegante, pero es bastante lindo. Qiu Yi tomó una pequeña caja de hojalata y la arcilla blanda que no utilizó, se enrolló en pequeñas bolitas y las colocó en forma de almohadilla.
El restaurante ha estado bastante ajetreado, pero Qiu Yi estaba de buen humor ni tampoco se sentía cansado.
Cuando llegó la hora de descanso del mediodía, como de costumbre, fue a la parte trasera del restaurante a fumar un cigarrillo.
Fumar es muy problemático ahora. No sabía si Bian Xinyu lo hacía intencional o no, pero a menudo iba allí a tomar un poco de aire. Al principio, Qiu Yi conversaba con ella en cuanto la veía, pero después de unos días quería esconderse, ya que conversar se volvía muy incómodo.
Entonces tomó una bolsa de basura y fue a tirarla. Si Bian Xinyu estaba allí, regresaría luego de haber tirado la basura, y si no, se quedaría allí por un rato.
Hoy no vio a nadie cuando fue, así que tiró la basura y sacó su cigarrillo.
Justo después de haber encendido su cigarrillo, Bian Xinyu salió por la puerta trasera. Qiu Yi de pronto se sintió incómodo.
—¿Estás aquí? —preguntó Bian Xinyu, de pie junto a la puerta.
—Mm —Qiu Yi no podía irse en este momento, ya había encendido su cigarrillo.
—Entonces, —Bian Xinyu se acercó a él, vacilante: —Mañana es San Va-Valentín, sería un poco malo si te doy un regalo mañana, así que hoy...
Qiu Yi giró la cabeza para mirarla: —¿Qué?
—Solo... —Bian Xinyu se mordió el labio, sacó una pequeña bolsa de tela muy delicada de su bolsillo y se lo tendió: —Hoy no es San Valentín, así que no se considera un regalo por esa fecha, así que puedes tomarla, yo misma lo hice.
Qiu Yi no habló, ni lo tomó mientras fumaba su cigarrillo. La expresión de Bian Xinyu provocó que su cabeza se agrandara.
Después de estar en silencio por un momento, apagó su cigarrillo y miró a Bian Xinyu: —Gracias, de verdad lo agradezco, pero no puedo aceptarlo.
—Me tomó un mes hacerlo —Bian Xinyu se volvió un poco ansiosa, y probablemente porque estaba ansiosa y nerviosa, las lágrimas estaban por rodar de sus ojos: —No es un regalo de día de San Valentín, así que no tiene un significado, y además, no tienes novia ¿verdad?
Qiu Yi se quedó en silencio. El enredo en su corazón lo hizo sentir un poco sofocado y miró a Bian Xinyu durante bastante tiempo. Y con una última acción, apretó los dientes, sintiendo que su voz fue un poco ronca cuando habló.
—No tengo novia, —dijo Qiu Yi—pero tengo... novio.
Tan pronto como estas palabras salieron, Bian Xinyu quedó atónita y lo miró con ojos muy abiertos, sus labios temblaron y susurró una oración después de mucho tiempo: —¿Estás diciendo esto a propósito? ¿temes que vuelva a molestarte?
—No —Qiu Yi de pronto sintió una sensación de sacrificio, y tan pronto como cerró los ojos, apretó los dientes, y no importándole nada más, tomó un hondo respiro: —Me gustan los hombres.
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[1] Lu Xun: Escritor, pensador, uno de los fundadores de la literatura china moderna (Foto también para ejemplificar el bigote de Luo Yiyang uwu)
PD: AAAA ¡ORGULLOSA DE QIU YI! QuQ