Thantophobia[PAUSADA]

Parte 1

Foto: Trajes que usan los cazadores. El color de su tapa boca cambia dependiendo de su poder y/o nivel como cazador.

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-¿Tú qué crees? ¿Un reprenda o una paliza? - pregunto risueña-

-Yo creo que los dos-la escucho reír a carcajadas por el auricular justo después de responder- como te vas a cortar el cabello, huevona, tú sabes que la abuela amaba lo largo que era. Te llegaba a las nalgotas que te faltan.

- Eh eh, mira que las nalgas anormalmente grandes se las llevo tu madre. Nunca entenderé como tía Mary tiene todo ese tabús- frunzo el ceño confusa y pateo una roquita que estaba en mi camino- ¡OH! ¡Recuerda que también me lo pinte!

-Noooooo, ¿¡¿¡Enserio!?!? ¿De qué color?

-Morado- respondo riéndome por su tono exagerado. Escuchando su reprenda de que hubiera elegido rosa, alzo mi mirada de la piedrita que pateé para toparme con-

-Carla, tengo que colgar, pero te veo más tarde, ¿va? Cuídate.

- ¡Byeee, cuídate! No le diré nada a la abuela aun hasta que vengas así que ven rápido, no puedo contenerme- y corta la llamada.

Meto mi mano con mi celular en mi bolsillo borrando mi sonrisa. Sigo caminando, pasando por su lado.

- ¿Quién era? - pregunta posicionándose a mi lado derecho-

-Mi prima, Carla, hija de la hermana de mi padre- respondo seca-

- ¿A donde estas yendo tan tarde?

-A la casa de mi abuela.

- ¿Por que te cortaste el cabello? -pregunta tocando las puntas de mi cabello que ahora llegan a mis hombros-

Me separo al sentirlo tocar mi hombro y lo miro con mi ceño fruncido. Me detengo y quito su mano de un golpe.

- ¿Acaso estoy en una interrogación? No aproveche su posición, Oficial Rías.

-Llámame Mateo, Lau- frunce el ceño y yo ruedo los ojos-

Cuando comienzo a caminar de nuevo, Mateo se interpone en mi camino mirándome con pena. Él tiene su uniforme de cazador puesto.

-Laura, lo siento. ¿Okay? No sabes lo que ellos me obligaron hacer, no sabía que tú eras tan cercana a esas personas. No tenía opción Lau.

- ¿Y por qué no me contaste apenas paso? -le digo empujándolo una vez con mis palmas en su pecho haciéndolo retroceder dos pasos- Te desapareciste 3 estúpidas semanas para regresar en las noticias como un maldito cazador de vampiros. Y ¡Oh! ¡Sorpresa! Matas a los que son más cercanos a mí y que casualidad que todos sean hombres- mis ojos se comienzan a aguar. Su expresión se suaviza al ver que comienzo a temblar- ¿Por qué no me contaste, Mat? Tu... no sabes lo que sentí cuando...vi tu cara en los videos donde los matabas- digo en un susurro sollozando-Tú y yo estábamos juntos. Ellos sabían de ti-digo con rabia, casi gruñendo- No me imagino sus caras- trato de controlarme, pero sollozo aún más fuerte sintiendo mis piernas temblar- sus caras al verte...-digo tapando mi cara con mis manos.

Él intenta tomarme el brazo, pero yo me alejo y me siento en la vereda poniendo mis brazos cruzados encima de mis rodillas y luego poniendo mi cabeza en una posición cómoda. Luego de un rato donde ya puedo controlar mi respiración, escucho a Mateo.

-Solo déjame...por favor, déjame acompañarte a tu casa-levanto mi cabeza y lo miro nublado por las lagrimas en mis ojos- por favor- pide estirando su mano izquierda para que la tome.

Dudo un momento y después de unos segundos, cuando el comenzó a bajar su mano, la agarro. Él suaviza su ceño y me jala, ayudándome a parar y comenzamos a caminar aun con nuestras manos juntas. Cuando llegamos al frente de mi casa, trato de soltar mi mano, pero él la aprieta un poco, haciendo que dirija mi mirada hacia él.