Juegos

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Al parecer Raeder se llevaba muy bien con Aries, me gustaba ver su cabello resaltar entre la blancura de la nieve y su piel confundirse con esta. Ella tomo un vara y la sacudió frente a Raeder como si de un perro se tratara.

-sabes que no es un perro ¿Verdad?; me cruce de brazos llamando su atención, un mechon de cabello se poso en su cara

-es un lobo; dijo obviándome; ¿De donde crees que evolucionaron los perros?; cuestiono lanzando la vara

De espalda para mi, vi que su cabello era sujetado por la flor de Acuario. Esa noche, sus labios rozando los mios...

-¿Se te ofrecia algo?; me pregunto y frunci el ceño

-¿Te incomoda mi presencia?; camine hacia ella y esta retrocedio a su vez

Agradeci el árbol tras ella.

-no, solo que...

-¿Qué Aries?; le pregunte estando a centímetros de su cara

-juguemos; dijo saliendo mi acorralamiento; a las escondidas

-¿Jugar a las escondidas?; ella asintió y le chiflo a Raeder; ¿Qué? ¿No crees que puedas encontrarme?

-jueguemos ¿Qué ganare cuando te gane?; cuestione haciendola mirarme feo

-aun me debes algo, recuerda cuando jugamos con Acuario; recordó y asentí; tu cuentas, deberas encontrarnos; dijo refiriéndose a Raeder también

Me senti algo tonto al estar contando, pero bueno... cuando fui en su búsqueda, a la primera que encontré fue a Raeder. Habia escarbado un hoyo en la nieve, pero no noto que su cola habia quedado al descubierto, cuando la encontré aullo como si le avisara a Aries que habia sido encontrada.

Y encontrar a aries fue más fácil aun.

Solo segui la calidez que desprendia, detrás de una piedra miraba por un lado mientras yo la veía desde arriba.

-te encontré; dije poniéndome de cunclillas sobre la piedra, ella se arrodillo frente a mi y fruncio sus labios; gane

-fue trampa; dijo, pero aun asi sonrio; tramposo

-gane limpiamente, no es mi culpa que no sepas jugar y quiero mi premio

Baje de la piedra y quedamos cerca, ella desvio la mirada y comenzó a jugar con la nieve entre sus dedos. Me gustaba mirarla. Comencé a aproximarme hasta quedar a nada de su rostro, sus ojos grises penetraron en mi corazón.

-Aries...

A punto de repetir lo que pudo pasar con la flor, Raeder comenzó a aullar avisando la presencia de alguien.

La travesía de los signos zodiacalesHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin