Me tense al sentir sus caricias en mi pubis, no quería gemir sentía un poco de vergüenza, sin embargo fue inevitable no hacerlo, cuando su lengua empezó a moverse en mi centro, mi cuerpo se movía involuntariamente, tuve que sostenerme de su cabellera si no quería caer, nunca había experimentado nada como esto, mi cuerpo reaccionaba a sus estímulos en cantidades exorbitantes, sentía que me iba a prender en llamas. Su lengua se escabulló un poco dentro de mi interior y gemí fuerte, espero no hayan escuchado los vecinos.
Al tomar esa partecita pequeña de mi cuerpo con su boca, sentí que vería fuegos artificiales, y creo que logré verlos, mi cuerpo estalló, había tenido uno de los mejores orgasmos de mi vida.

Bendita sea tu lengua, Rebecca Sander.

Volvió a subir dejando un rastro de besos por mi cuerpo, hasta llegar a mi boca estaba jadeante por todo lo experimentado, me brindo un beso en el que pude saborear mi esencia, rayos esto es extraño pero fascinante, no pensé que fuera así de excitante, jugué un poco más con su boca, hasta que escuchamos el timbre.
Nos separamos a instante, yo estaba desnuda, y no sé porque pero me tape mis partes, es ridículo porque ya me vio todo y... probó todo.

Tome mi ropa, y empecé a vestirme rápidamente.
Ojala no sea Nat, sus comentarios serían mi fin. Rebecca solo se sentó a verme sin dejar de sonreír le parecía muy gracioso verme en estos apuros.
Corrí a abrir, por poco y se me salen los ojos, tenía a Alexa en frente de mi muy sonriente.

Diablos

Hola bonita— saludó, dándome un tierno beso en mis labios. Espero no perciba nada extraño.
Sonreí como saludo y entró.

—Hola Rebecca— también saludó a mi jefa, que no dejaba de sonreír, parece loca.

—Hola Alexa, gusto en verte—contestó.

—¿Te sientes mejor?— se interesó en saber Ale.

—De maravilla—soltó efusivamente.

—Vaya, pensé que amanecerías con resaca.

—Con lo que me dio Sarita se me quito todo. ¿No es así?— pregunto, viéndome.
Qué cree que hace, está loca.

—S-sí, bue-en-no yo

—Tus analgésicos son los mejores. Si no les importa voy a la habitación a cambiarme— interrumpió, dejándonos a solas.

—Nunca la había visto de tan buen humor.

—Ah, debe ser el analgésico— me excuse.

— Mmm... No he visto un analgési...— la besé, sé que está mal, porque esta Rebeca en la habitación pero si sigue cuestionando no voy a saber que decir. Me apretó a su cuerpo, pero me separe al instante.

—Perdón, no quería excederme. Sé que no te acostumbras a que una mujer te intime de esta manera— se disculpó. Ay, si supiera.

—Sí, bueno es que...

—Listo— escuchamos a Rebe que salía ya con su vestimenta de anoche. Que rápido se vistió.

—¿Ya desayunaste?— preguntó Ale a Rebe.

—Sara me brindó algo de fruta— porque tiene que sonreír de esa manera. Qué vergüenza.

—Bueno, muchas gracias por todo, perdón por lo de anoche. Sara, hoy tienes el día libre— Mierda, hoy es lunes, lo había olvidado.

—De nada y gracias— fue lo único que atiné a decir.
Salió del departamento, sentí una sensación extraña en el estómago, un vacío, no hubiera querido que se vaya.

—Jamás pensé ver tan sonriente a tu jefa, creí que se le caerían los dientes en algún momento — comentó. Sonreí por su ocurrencia, sabía muy bien porque estaba feliz.

—Es extraño pero a veces sucede.

—¿Desayunaste con ella?— preguntó.

—No, yo no, o sea, no desayuno

—¿Por qué estás tan nerviosa?— instigó.

—Por nada, estoy bien— mentí.

—No pareciera, pero bueno. Vamos a desayunar a algún lugar—propuso.

—Claro, solo deja ir a bañarme que estoy un poco hume... sudada, hace calor— Joder, que estuve a punto de decir.

—Si quieres te ayudo a tallar tu espalda— insinuó.

—Buen intento, doctorcita— me dirigí a mi habitación, cerré la puerta y me recosté en ella.
No podía creer todo lo que había vivido en pocas horas.
Aun no lo creo, me entregué a mi jefa y ahora tengo a Ale esperando por mí.

No se cómo va a terminar esto.



¡He vuelto!

Parece que Rebecca anda un poco juguetona 😏

-Sara y Alexa
-Sara y Rebecca

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Pdta.: Este capítulo va dedicado para una chica curiosa, que de casualidad apareció en mi vida.😺

El amor no conoce de géneros (Historia Completa En Amazon)Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu