Cuz I can.

fijación oral *JohnDo

                                        +18

La primera vez que Johnny lo descubrió fue divertido y sobre todo; curioso.

Habían ido con Doyoung a comprar golosinas, acostumbraban a salir juntos de vez en cuando, la compañía de Doyoung era reconfortante para Johnny desde que habían sido traines juntos, nunca había pasado de una amistad.

A excepción de cuando Johnny desenvolvio  el lollipop y lo metió a la boca de Doyoung, fue algo inconciente del menor, cerró los ojos y deslizó su lengua alrededor del dulce, un hilo de saliva cayó por una se las comisuras de sus labios y Doyoung abrió los ojos asustado con las mejillas teñidas de rosado.

Johnny fingió no darse cuenta y siguió su camino hacia adelante pero podía por el rabillo como Doyoung lamia el lollipop.

Había oído de que algunas personas podían tener fijación oral, supuso que Doyoung podía formar parte de ese grupo de personas.

La siguiente vez fue a propósito, Doyoung estaba ayudando a Taeyong a cocinar y él apareció por la cocina mirando al más joven, decidió agarrar un tomate cherry y lo metió dentro de la boca de Doyoung pero no sólo eso, también metió parte de su pulgar, a Doyoung no le importó, tragó el tomate y lamió el dedo, lo rozó son sus dientes y lo dejó lubricado con su saliva, cuando se percató de eso volvió a sonrojarse y tragar saliva nervioso, Johnny sonrió travieso apartando sus dedo de la boca de Doyoung y llevandoselo a la propia donde saboreo la saliva de Doyoung y se retiró.

Para ese momento ya era totalmente afirmativo sobre la fijación de Doyoung y Johnny se preguntó sí podía llegar a divertirse con eso pero no sólo eso, también hacer disfrutar a Doyoung, debía ser difícil tener un gusto por algo que podía verse mal visto por ser tan lascivo.

Así que una tarde compro paletas de helado sabor frutilla e invitó a Doyoung a su habitación.

—hyung ¿qué sucede? ¿necesitabas algo?—preguntó el chico de ojos finos, negros y profundos

—Doyounggie—tarareo Johnny sonriendo y Doyoung rió divertido—ven a la cama, siéntate aquí, frente a mi.—el nombrado hizo lo ordenado, no desconfiaba de Johnny ni siquiera una pizca, se sentó en la cama y cruzó sus piernas al igual que su hyung, vio que tenía algo dentro de una bolsa y sonrió pensando que quizás recibiría un obsequio.

—¿y ahora qué hago?—el tono de su voz tenía un destello de diversión que Johnny no pasó por desapercibido, le encantaba jugar con Doyoung porque incluso sin saber Doyoung ya lucía emocionado

—cierra los ojos y abre la boca— "hmm" tarareo Doyoung haciendo lo dicho

Escucho como Johnny desenvolvia algo pero no abrió los ojos, seguía con su boca abierta hasta que sintió una textura dura y fría sobre sus labios, trago saliva nervioso cuando Johnny lo introdujo y saboreo un dulce sabor a crema de frutilla, abrió los ojos sorprendido mirando fijamente a Johnny que sonreía

—¿te gusta? Compré varios helados para ti, deja que te los de.—el corazón de Doyoung se aceleró y un evidente sonrojó se apoderó de sus mejillas, asintió desconcertado deslizando su lengua por la punta del helado

Johnny sostenía el helado mientras Doyoung lo lamia mirándolo a los ojos, aquellos bonitos ojos avellanas que el mayor tenía eran tan preciosos, el sabor a frutilla ya había invadido por completo sus sentidos e incluso se podía sentir el aroma entre ellos, al principio estaba frío pero con las lamidas de Doyoung ahora estaba tibio, la crema estaba suave gracias a la lengua de Doyoung

El mayor no podía apartar la vista de lo sensual que Doyoung se veía lamiendo un jodido helado, sus ojos negros estaban cristalizados y dilatados de placer, la crema había manchado más allá de sus labios, había una clara evidencia pegajosa cayendo por su comisura y los dedos de Johnny estaban cubiertos de restos derretidos