El mayor asintió con inexpresividad en el rostro, meditando por unos segundos.

—Min Yoongi, catcher del equipo 1, número 2, entrenador y bateador emergente —comenzó a decir—, entiendo tu malestar, pero tu actuar no fue correcto, por lo que tengo que sancionarte aún si significa perder a una llave maestra —el rubio asintió, cerrando brevemente los ojos—, no vas a jugar el resto de la temporada, podrás continuar entrenando junto a Hoseok, pero además de eso tienes prohibido participar en otro tipo de entrenamiento. Volverás a las vueltas con neumáticos.

—Sí, entrenador.

—Yo sé que puedes con eso —dijo finalmente antes de salir de su dormitorio, cerrando la puerta detrás de él.

Volvió a tumbarse en su cama, mirando al techo como si fuera una de las cosas más interesantes del mundo. Cerró los ojos, relajando la tensión que había quedado impregnada en su cuerpo; dejándose llevar por los brazos de Morfeo.

 Cerró los ojos, relajando la tensión que había quedado impregnada en su cuerpo; dejándose llevar por los brazos de Morfeo

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Abrió sus ojos lentamente, observando pequeñas luces girando al rededor de su habitación. Parpadeó varias veces hasta que las luces se esfumaron de su campo visual. Se sentó al borde de su cama, buscando con inquietud su teléfono. Lo tomó entre su mano mientras bostezaba; casi se cae de su cama al ver lo temprano que era, consciente de que si ya había despertado, ya no podría volver a pegar los ojos de nuevo.

Caminó por la habitación, abrió la puerta y asomó su cabeza por ella, viendo los pasillos vacíos en su totalidad. Cerró la puerta detrás suyo y caminó rápido hacia las duchas. Una vez que estuvo dentro, se despojó de su ropa y se introdujo en la tina, soltando un suspiro de tranquilidad.

¿Qué tal lo estoy haciendo hoy hyung? ¿verdad que he mejorado mucho? ¡Puedo sentirlo!

Nice pitching, Hoseok —los ojos del castaño se iluminaron—, tu control de la bola a mejorado mucho y tus tiros son más precisos. Buena velocidad, buen ángulo.

¡Gracias hyung! ¡Me esforzaré más desde hoy!

«Idiota. Ya no puedes esforzarte más o tus músculos van a lastimarse» pensó recordando la última práctica que había tenido con él. Una risa suave se escapó de sus labios.

Se levantó, salió de la tina, secó su cabello y se cambió con su ropa de entrenamiento para después salir corriendo de las duchas para irse al campo, no sin antes dejar sus pertenencias en su dormitorio. Corrió unas vueltas alrededor con un neumático atado a su torso, sudando y jadeando por el cansancio.

—¡Hyung!

Se detuvo de golpe, abriendo los ojos de par en par al ser imposible que no reconociera esa voz. «¿Hoseok? ¿Qué hace ese niño despierto tan temprano?» volteó para verlo corriendo hacia él con una sonrisa en los labios.

STAR ꒰♡꒱ yoonseok.Where stories live. Discover now