Llego tarde, llego tardísimo.
Valeria viene hoy a Madrid a dejar unas cosas en su futuro piso y voy a ir a darle una sorpresa a la estación.
Llego a la estación y la veo salir. Va guapísima, como siempre.
-¿Donde vas tan sola guapita? - le susurro suavemente en el oído. Ella se da la vuelta con cara de sorpresa y noto como se pone colorada.
-¿Tú...que haces aquí?- Dice seria para después soltar una risilla nerviosa.
-Tenía ganas de verte - suelto sin más. Oh por dios, piensate las cosas antes de decirlas, no queremos que la muchacha piense cosas que no son ¿no? - Me dice mi subconsciente. - Monta, que te llevo - digo señalando mi moto.
-Nunca he montado - dice nerviosa -
-Siempre hay una primera vez -digo guiñándole un ojo - Agarrate fuerte nena - digo encendiendo la moto. De repente Valeria se agarra fuerte a mi cintura. Me encanta. -
[...]
-Siento el desorden -se disculpa ella- debería comenzar a pintar ya si me quiero venir pronto a vivir, pero Ali no tiene tiempo -pone los ojos en blanco - al parecer está muy ocupada con su nuevo rollito, aunque no se a dónde quiere llegar, en un mes y medio se vendrá aquí y ya no le verá mas, además él se va a Sevilla. - Dice colocando una caja encima de otra-Demasiada distancia, no se en qué piensa esta chica. -Dice resignada-
-¿Ali? - Digo pareciendo no prestar atención a nada mas que el nombre de esa chica-
-Mi mejor amiga, o algo parecido -suelta una pequeña carcajada- Ali y Lara también vivirán aquí, nos sale mas barato así, además venirnos sola a Madrid nos da un poco de respeto y como vamos a estudiar en el mismo sitio nos viene genial -sonríe por primera vez - Te ofrecería algo de beber pero no tengo ni media cocina montada, si quieres vamos a algún lado a tomar algo.
-No te preocupes, no tengo sed. - digo mientras mis ojos se cruzan con los suyos. De repente se me ocurre una idea. - Oye, hoy no tengo nada que hacer. ¿Quieres que te ayude a pintar?
-¿Lo dices enserio? -sonríe-
- Bueno, siempre que quieras claro, aunque creo que eso no es un problema, ¿no? -la miro victorioso-
- ¿Perdona? -me dice señalándome con un dedo- Si crees que por ser fan tuya -dice acercándose a mi y haciendo que yo de pasos hacia atrás hasta quedar contra la pared- voy a tratarte como si fueses un dios y voy a caer a tus pies estas muy equivocado Daniel.
-¿Ah si? - digo agarrándola de la cintura y atrayéndola mas a mi.
-Si -dice muy cerca de mis labios. - Y ahora venga, vamos a pintar. -dice separándose y dejándome confuso por ese casi beso.
[...]
-Nos ha quedado bastante bien ¿verdad?- digo cayendo al suelo resignado.
-La verdad es que si - sonríe y se sienta a mi lado- aunque, he de decirte que mi parte esta mejor hecha, has dejado varios pegotes y has ensuciado el suelo -ríe- y ya ni te digo los rodillos que has roto. ¿Tres?
-Cuatro - admito resignado y reímos -
-No vales para pintor, Fernández. -le doy un codazo - ¡¡Oye!! - se queja y ríe un momento, para después volver a ponerse seria. -
-¿Eres siempre así de borde? -digo de repente, a lo que ella frunce el ceño -
- Solo con tíos - clava su mirada en mi-
-Pues a mi no me van las que se hacen las difíciles - vacilo -
-No me hago la difícil, lo soy. Y nadie te ha obligado a quedarte, ya sabes donde tienes la puerta.
-Hasta cuando te enfadas estas bonita, ¿lo sabes? - le susurro al oído y se ruboriza - Tengo que irme ya morena, ¿nos vemos pronto no? -le guiño el ojo-
-No lo se. Adiós Daniel
-Adiós bonita - digo y poso un beso cálido en sus mejillas aún rojizas -