Cap 8 Conociéndote

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-Hasta la próxima Shatz- le grito.

El azabache se detiene en seco y se voltea. -¿Como me has llamado?- me pregunta confundido y con el ceño fruncido.

-Shatz he dicho, ¿Que ese no es tu nombre?- ahora soy yo la que le digo confundida.

Suelta una carcajada ronca que dura unos segundos, luego me mira como si fuera un bicho raro e insignificante - Serás estúpida, ese no es mi nombre. Y nunca pienso decírtelo.- se voltea y camina hasta que lo veo perderse a la distancia.

¿¡Ese no es su nombre?! ¡Maldicion! Creía saber aunque sea algo de él. Pero bueno, ahora sé que es un maldito egocéntrico que creé que todos son inferiores a él. ¡Él es el idiota aquí! Pero aún así ese chico me causa intriga, y pienso averiguar más sobre él.

Empiezo a caminar con enojo. Voy de pasillo en pasillo hasta llegar a la salida. Espero a Silver como todos los días, pero lo veo a la distancia hablando con Blaze. Empiezo a agitar los brazos como una loca hasta que me ve, le hago señas diciéndole que me voy yo y que él se quede, asiente sonriendome agradecido y me doy media vuelta para ir a mi casa.

Cuando llego, veo a lo lejos al mismo erizo idiota. ¡Agh! ¿Acaso vive cerca? ¡No, por favor! Aunque... Esta puede ser una buena oportunidad para saber de él.
Lo veo pasar de largo y meterse entre una avenida. Sé que es malo y que no debería seguir a alguien pues parecería una acosadora loca. Y más aún si lo acabo de ver. Pero correré el riesgo. Allá vamos.

Mi persecución empieza, camino lento y suave para evitar que se escuchen mis pisadas, procuro tener algo de distancia y ubicar con la mirada los lugares donde puedo esconderme si el erizo voltea. Después de caminar unas 3 cuadras más el erizo se detiene a pocos metros de una casa, yo me escondo atrás de un bote de basura que tenia cerca, luego espero a que el chico retorne su marcha pero en vez de eso se voltea hacia mi dirección. -¿Vas a dejar de seguirme?- pregunta mirando hacia el bote.

Me quedo callada y lo más quieta posible. ¿Como se habrá dado cuenta? Pero si fui cuidadosa. Este chico es del diablo definitivamente.

- Ya, no soy estúpido. Sé cuando alguien me mira o me sigue. Sal de ahí Rose.- asomo la cabeza y él me mira con el ceño fruncido, luego hace un ademán con la mano diciéndome que me acerque.

Salgo de mi escondite y camino lentamente hacia donde esta él. -Apúrate que no tengo tu tiempo- me grita impaciente, doy un pequeño brinco provocado por su grito, luego doy cuatro zancadas y llego a su lado.

-¿Qué es lo que quieres?- me pregunta fastidiado a la vez que se llevaba una mano a la cintura.

-P-pues yo sólo pasaba por aquí.- le contesto algo nerviosa. Realmente nunca pensé que me fuera a descubrir.

-Agh, fuera de mi vista ¿quieres? Y ¡Ya deja de seguirme maldito gnomo!- dice dándose media vuelta y camina acortando la distancia para llegar a la casa. Bueno, al menos creo saber donde vive, y que bueno que prefirió no seguir hablándome. Me pone las púas de punta. Alto. ¿Me dijo gnomo? ¿¡Quien se cree que es?! Ayy pero cuanto lo odio. Me va a escuchar cuando me lo encuentre de nuevo y voy a hacer que se trague sus palabras. Está bien que sea pequeña, lo reconozco, pero no es para que me lo esté recordando todo el tiempo.

Enojada, decido regresar a mi casa. Pienso en todo lo que pasó con relación a ese erizo azabache. Conclusiones: Él es un chico arrogante, egocéntrico, sínico, idiota y suele ser bastante inexpresivo. Opciones que tengo: No te acerques a él o procura no socializar mucho, sólo lo necesario. Nota: Jamás va a tener novia si sigue con ese carácter.
Repaso mentalmente lo que tengo que hacer con ese erizo, sonrio burlonamente al tomar esa nota metal, ¡Ja! Es cierto, nunca alguien lo va a querer con ese carácter.

Shadamy Chico InvisibleWo Geschichten leben. Entdecke jetzt