Mi inevitable destino. (Calum Hood&tú) |MDET2|

27. "Problemas I"

—Será una gran noche, ¿No? —comenta Alaska.

—Ni te imaginas.

(...)

—¡Hey! —saluda Ian en cuanto llega al lugar en donde nos encontramos.

—Ian, hombre, pensamos que no llegaban. —lo saluda Luke.

—Lo siento, soy un hombre ocupado. —le responde a Luke—. Ashton, creo que te ves fatal, ha cambiar eso, amigo.

—Lo sé, me hace falta la diversión. —responde él.

Lo veo saludar a Mike con un apretón de manos y luego un abrazo.

—Él es Curtis. —digo viendo la incomodidad de mi amigo—. Mi amigo de la universidad.

Él sonríe abiertamente hacia donde estoy yo y siento un apretón de manos. Miro sin entender y es Calum. A decir verdad no me di cuenta desde cuanto me tiene de la mano, pero tampoco me incomoda. Le sonrío y su rostro se relaja.

Todos lo saludan amistosamente, se presentan y no tardan en conversar.

Pasa el rato cuando Mike, todo energético no sé si por el alcohol o la fiesta, nos incita a bailar.

Vamos todos, sin excepción alguna. Andar con muchas personas solo tiene un problema: no puedes estar con todos.

Bailo con Alaska a mi lado, trato de no perderla de vista, quiero que este cómoda y no se sienta sola. A mi otro lado esta Calum y me hace reír, a Alaska también, con sus múltiples movimientos sexys. Debo admitirlo divertidos, pero muy sexys.

Nos pasamos como hora y media sin parar, entre múltiples risas cuando me percato que Ariana no está... y Luke tampoco.

Narra Ariana

—Mierda, Luke deja de seguirme. —le espeto cuando lo veo por el reflejo del espejo—. ¿No te das cuenta que estas en el baño de damas?

La verdad es que no he hablado con él desde que me besó... bueno, bueno, lo besé, no es necesario recordarlo.

—Si me doy cuenta, pero no hay nadie ¿O sí? —dice, pero esta vez, moviéndose del marco de la puerta.

—Pero eso no quita que alguien pueda entrar. Vete, ¿ya? —le imploro cansada.

No quiero pelear, se supone que estoy celebrando mis vacaciones. No quiero drama, menos con Luke.

Suspiro cansada, aún cargada en el lavamanos cuando siento sus manos posarse en mis brazos. Una corriente eléctrica me pone en alerta haciendo que abra mis ojos y lo aleje.

—¿Qué haces, Luke? —le pregunto volteándome, quedando frente a él.

—¿Por qué te comportas de esa manera? —me pregunta con confusión en sus ojos, pero siento que es más que eso, es pena.

—¿De qué manera? —pregunto alejándome de él.

—De esta manera... Fría, distante, ¡Como si nada te importara! —dice alzando la voz en la última frase.

Recuerdo vagamente cuando ______ (Tn) me dijo lo mismo. ¿Por qué? Yo me encuentro la misma.

—Estas equivocado. Tú lo ves así. —digo encogiéndome de hombros.

—No lo estoy ¿Y sabes por qué? —comienza acercándose velozmente a mí—. Porque te conozco muy bien, Ariana. Y está —dice recorriéndome con la mirada—. No eres tú.

Sus palabras me enfadan ¿Ah sí? ¿Entonces quién soy? Claro, él me conoce mejor que nadie ¡Hasta mejor que yo misma! Que payaso.

—Basta, Luke. No quiero estar aquí contigo. —le digo tratando de no sonar tan enfadada como lo estoy.