Atrapados. (HunHan)

Capítulo 2: Suspensión.

Frustrado. Así se sentía Sehun. Desde que pisó la escuela el lunes, Luhan solo lo mira cuando esta desprevenido. Pero él lo pilla. Y Luhan finje ignorarlo. Mentiría si dijiera   que no le duele la indiferencia. Mentiría. Porque le duele y mucho. Pero se lo merece. A pesar de ser aún un extraño, se a colado en los más profundos pensamientos de Sehun. Y el haberlo tratado mal el día de su cumpleaños solo aumentaba la culpa.

Hoy era viernes y trataría de enmendar las cosas. Sentía unas ganas tremendas de disculparse. Pero Luhan no se la estaba poniendo fácil.

A la primera hora, no lo vio. En la siguiente clase trató pero fué pillado por el profesor. Y este lo envió a castigo.

A la hora de refrigerio, lo vio. Sólo. En la última mesa, apartado de todos. Pasando desapercibido. Para muchos invisible, pero para Sehun no. Era fácil encontrarlo. El cabello castaño y esa hermosa piel blanca, resalta entre toda esta gente.

Se acercó con cuidado. No quería asustarlo. Luhan miraba su plato de comida sin parapadear. Tal vez estaba soñando despierto.

-Hola.- usó su voz arrepentida y tierna. Esa conseguía muchas cosas. Sobre todo, cosas que su tío Siwon podía pagar. Se sentó ya que no había logrado robar la atención del chico.- Luhan. Lo lamento.- el chico lo miró aturdido.

-¿Que?.- definitivamente algo andaba mal con Luhan. Ya no hay mas de aquel chico que conoció el mismo día de su cumpleaños. Ya no hay brillo en sus ojos. Tampoco sonrisa.

-Lamento como te trate en mi casa.

-Ok. No hay problema.- volvió a centrar su atención en el puré de su plato.

-¿Estas bien?.- no sabía que otra cosa decir. Es obvio que ese muchacho no esta bien.

-Si.

Incómodo. Otra vez el silencio gana una batalla contra ellos. Si tan solo no fuera como es, esto seria diferente. Hay veces quería ser como Kai. Todo un seductor confiansudo.

-¿Qui... quieres venir a mi casa?.- susurró. Ya sentía venir el calentamiento de sus mejillas y orejas. Era inevitable.

-¿Perdón?

-Podemos comprar comida y ver una película.- En estos casos es que Sehun agradece que su padre trabaje todo el día.

-Ya.

-Te parece...¿despues de la escuela?

-No puedo, debo hacer algo. Ni bien termine voy a tu casa.

-Esta bien. ¿Recuerdas el camino?

-Si.

El silencio se hizo de nuevo. Pero solo en su mesa de ellos. Alrededor se oían risas. Y sus, ya repetidos insultos. El huérfano..
El mudo habló... Nuestro niño a crecido.... Es gay... Tendrán una cita... Maricas de porra... No queremos homosexuales aquí..

Miró a Luhan. Y este tenía las mejillas rojas.. Su ceño estaba fruncido, sus labios formaban un adorable puchero. Y... sus ojos estaban cristalizados.

Ahora ya sabemos porque su madre lo abandonó..

Oír eso lo distrajo de Luhan. Sus puños se cerraron fuertemente. Y sus nudillos se volvieron blancos.

-No metas a mi mamá en esto...- las risas alrededor cesaron. Y el comedor quedó en total silencio.

-Huy el niñito se a molestado.- el líder de los tontos se puso de pie. Quedando frente a frente con Sehun. Milagrosamente Sehun era más alto que el tipo. Tal vez lograra intimidar al tipo.- ¿Que me vas hacer? ¿Vas a traer un balde de pintura? O ¿Vas a vaciar goma en mi mochila?.Quizas a encontrado mas bromas infantiles.

-¿Terminaste?.

-No.- volvió a darle la espalda a Sehun.- ¿Tal vez su princesa lo defenderá?

-Su nombre es Luhan.

-La princesa Luhan. Es tan linda, solo le falta el vestido y el cabello largo.

Y esa fué la gota que hizo rebalsar el vaso. Sehun cogió la casaca del tipo, lo voltio y encestó su puño en la mandíbula de este. Cayo inconsciente al piso. Vio un poco de sangre caer de su nariz. Y sintió ganas de vomitar. Volvió la vista a Luhan, pero ya no estaba. No se movió de ahí por unos minutos. El ruido solo eran zumbidos en sus oídos. Y su mano le dolía a horrores.

Oh Sehun, acercarse a la oficina del director.

Oh Sehun, acercarse a la oficina del director.

Oh Sehun, acercarse a la oficina del director.

Estaba en grave problemas. Tres llamados. Se significaba que le espera un suspensión. Y llamaran a DongHae. Y DongHae se molestará, no lo dejara en paz y lo llevará al psicólogo. Necesitas hablar con alguien, usará esa misma frase.

-¿No piensas decir nada?.- DongHae llegó treinta minutos después. Trataron de pedirle a Sehun el porque de los hechos, pero no habló. El director le dió suspensión de un solo día. La condición era que Sehun viera a un psicólogo. Y DongHae sea mas firme como padre.- ¿Dime porque llegaste hasta ese extremo? Tu no le has pegado a nadie. Te aceptaba tus bromas de pintura y goma porque me parecen divertidas, pero los golpes.... Exijo que me digas el porque.

-Se metieron con mi mamá.- DongHae se tensó.

-Y ¿Que dijeron?

-Lo mismo de siempre. Pero esta vez me echaron la culpa.

-No tenías porque caer en su provocación.- Era urgente que cambiaran de tema. DongHae no quería que el momento de las preguntas llegara. Nueve años había logrado que Sehun no le preguntara sobre esa noche. Y quería que otros nueve años pasaran antes de decirle la verdad a Sehun.- Vamos a ver a un amigo mío. Él es psicólogo.

-No. Ya no lo voy a volver a hacer.

-Necesitas ayuda.

-¡Dije que ya no lo voy a volver a hacer!

-Sehun no me grites.

-¡Castigame! Has eso. Menos un maldito loquero.

-¡No grites! Y el simple hecho que necesites un psicólogo no quiere decir que estes loco.

Siguieron discutiendo hasta que llegaron a una casa. No la suya. Ni la de Siwon.
DongHae no dejaba de tocar el timbre. Al parecer no había nadie en casa.

-Deja de hacer eso.- Sehun sentía su hígado palpitar. Estaba seguro que de tanta bilis que estaba produciendo, terminaría en el hospital.

-Sehun, no seas un aburrido.

-Y tu no seas un niño.

-¡YA! ¡DETENTE!.- ambos miraron a la figura al otro lado de la puerta. Este tenia espuma en el cabello y solo lo cubría una toalla, amarrada en su cintura. Se notaba que estaba molesto.- ¿Que quieres?

-Leeteuk.- Canturrió DongHae.

-Controla a tu hijo. El timbre se toca solo una vez.- su ceño se fruncio mas.

-En realidad yo no fui. Fué DongHae, el niño que tiene enfrente.

-Debería darte vergüenza que tu hijo sea mucho mas maduro que tú.

DongHae hizo pucheros. Leeteuk y Sehun lo molestaron mientras se adentraban en la casa. Ambos se quedaron solos cuando Leeteuk fué a terminar su ducha. No dijeron nada hasta que Leeteuk llegó.

-Y bien.. ¿Que los trae por aquí?

-Sehun está teniendo problemas en la escuela.

-Tal vez sea por lo de su mamá.- dijo Leeteuk tranquilo. Pero DongHae se tenso. Y algo en la cabeza de Sehun hizo clic.