UNA ÚLTIMA ESPERANZA

V E I N T E

La semana trascurre tan rápido que cuando ya me doy cuenta faltan solo 24 horas para mi graduación, me siento muy orgullosa de mi misma.

Mis notas no fueron perfectas pero si soy una de las primeras, como celebración mis padres organizaron una reunión familiar.

Y si, ellos siempre encuentran el motivo para una fiesta.

Ahora estoy sentada en una mesa, mi cara refleja el aburrimiento evan a mi lado esta charlando con unos de nuestros primos

Me levanto de la mesa y camino hacia la cocina donde la tía Rosita y mamá esta hablando.

— ¿Me prestas tu auto? — le digo nada más al  llegar a su lado mi madre me mira y enarca una ceja

—¿a donde vas? — yo la miro.

—al hospital.

Y solo eso basta para que mi madre me entregue las llaves de su auto, me despido de ella y de mi tía y salgo de la casa.

Camino al garaje y lo abro camino hacia el auto y lo abro, entro enciendo el aire acondicionado y pongo en marcha había mi destino.

Camino por el pasillo del hospital, Rafael me paso la dirección de la habitación de alexis.

Camino a la puerta y toco una voz femenina me dice que puedo pasar y yo entro.

Me encuentro a Una mujer de cabello rizado y ojos negros me mira con curiosidad —¿y alexis? — le pregunto.

—esta en la sala de quimios ¿quien eres? —me pregunta, yo le e tiendo mi mano.

— Jules, su novia — aclaro

Ella me estrecha su mano y me da una sonrisa — soy alexa, — yo asiento.

Después de charlar un poco con alexa salgo de la habitación y camino a la sala de quimios.

A lo lejo logro ver a mi novio que distraído hace garabatos en una libreta mientras que en el otro trazo tiene la intro venosa.

Me acerco en silencio y se me es casi imposible ignorar lo rápido que ne late el corazón, alexis parece no ser consciente de mi presencia.

Me aclaró la garganta fuerte para atraer su atención, el levanta la mirada de la libreta y me mira. De la comisura de sus labios tita una sonrisa

—hola. — mi voz sale en un hilo.

—hola Jules.

Me acerco a él y me siento a su lado, alexis me mira en silencio.

—estas hermosa — me susurra. Yo sonrió

—gracias

Alexis me mira —¿que tal tus vacaciones?.

Pregunta dejando la libreta a un lado.

— bien, no e echo nada. — digo

—¿que escribias?.

Se encoge de hombros restándole importancia al tema, yo prefiero no seguir preguntando haci qué cambio de tema.

—hace rato me tope con alexa —comento.

— es buena persona, me cae bien.— me responde.

El resto de la tarde hablamos de cosas triviales, me comenta como a sido sus últimos días aquí. También me dice que se graduara por lo que me invitó a ir juntos al baile.

Y para cuando queremos darnos cuenta ya son las ocho de la noche.