Gata de la Medianoche

Té con te quiero

Té con Te quiero

Te quiero, te quiero, te quiero con té...

Como el té que tomo al atardecer, cuando el sol cae y en tus brazos hay calidez, al igual que en mi taza de té.

Entre las hierbas, cerámicas y una manta sólo queda la calma ambientada, bailando con tu risa y tus manos que buscan hacerme sentir abrigada. Desconociendo que no es la cobija quien me protege del frío clima, sino tu calidez que le hacía falta a mi vida.

Porque; así eres cálido, calmado, como el té en mis manos, como el te de mis te quiero, como el quiero de que más cerca te quiero, pues te extraño, así que tómate un descanso y conmigo toma té verde por un rato.

Ahí es cuando te veo, te tomo, te siento y con té; te quiero.

De que conté cada lunar que recorre tu piel tostada, los rizos que caen sobre tus mejillas cual cascada y la marca asomada en tu espalda baja, esa que veo nada más al ir a la playa.

Con té y un te de que te escucharía durante todo el día, contándome que pensaste al conocerme aquel día, viendo como bebía mi té de mediodía.

¿Te conté que yo no lo recuerdo? Quizás fue el té negro, que me hizo perderme en el tiempo, ¿o culpable fueron tus ojos cafés intenso? Ni idea tengo, pero remplace el té negro; por esa mirada y un té lavanda.

Te de darte un beso cuando te vayas, pero antes de irte, saborea uno de mis tés para de mí despedirte.

¿Así que cuál té quisieras beber en esta preciosa mañana? Mi tetera pregunta y se encuentra emocionada, ¿quizás una infusión con cascaras de naranja? ¿manzanilla o puede ser valeriana?

No, valeriana queda descartada, únicamente al anochecer puede ser tomada, para así a lo largo de la madrugada dormir en tu pecho sin interrupciones, ni desvelos, sólo buenos sueños y despertares de paz por completo.

Un té contigo, mi amor, porque te quiero y sin dulce el té quiero.

Puesto que contigo no hace falta azúcar para olvidarme de la amargura. A ti caliente te bebo, en la tranquilidad del momento, sin prisas, sin ansías, sin angustias, sin la dependencia que sin ti sólo los problemas abundan.

Siempre segura, porque tu amor presente, yo sé que perdura.

Té con Te quiero, de que te quiero como eres; sin endulzantes, sin leche, sin cambiar algún ingrediente, simplemente caliente, tanto, tanto que mi corazón adormeces.

Té como el té que me preparaste para apreciar este hermoso atardecer y al sol ver caer.

Por eso yo en tus cálidos brazos con el paso dormiré, de mientras continuaré bebiéndoté y queriéndoté.

Junio, 2022.