Capítulo Nueve

159 15 0
                                    

—Estoy muy orgullosa de ti Phoebe.

Habían pasado los días, Phoebe se miraba al espejo mientras tocaba los famosos  diamantes Fitzgerald, eran una reliquia familiar, habían pasado de generación en generación, regalados por la mismísima reina Victoria.

Era costumbre que alguien los llevara en la fiesta familiar, así que cuando Sofía le propuso llevarlos, ella aceptó, nunca lo había hecho.

Estaba nerviosa porque hoy caminaría en frente de todos, había decidido dejar su silla de ruedas de Una vez por todas.

—Gracias Rose—musitó.

—Ya era hora Que te decidieras, si el médico
te dio luz verde debes hacerlo.

—Me siento muy confiada, sé que camino raro, y sé que probablemente me tropezaré muchas veces, pero quiero experimentar tantas cosas que puede más eso que mi miedo.

—Odio decir esto, pero siento que Dev ha influido en parte en esto.

Phoebe pensaba lo mismo, ella tenía claro que su motivación en la vida debía ser ella, pero lo que había experimentado con Dev estos últimos meses le había dando un empujón, él la hacía sentir que vivía y la había llenado de esperanza, que eventualmente se convirtió en una luz en su camino.

Sabía lo quería, y ya no se sentía mal al respecto. Ni lo que Kate quería para su vida, ni lo que su familia quería importaba, nada más lo que ella sienta que la llena.

—Me escribió que ya está allá con Camille, llegaron puntuales—Comentó Phoebe.

Ambas llegaron con su familia, custodiadas por guardaespaldas que no le quitaban el ojo al collar de diamantes que traía Phoebe.

Phoebe habia decidido llegar en silla de ruedas y ponerse de pie para dar el discurso que introducirá Kate Fitzgerald Project, habían estado trabajando muy arduamente en este y ahora que tenían más patrocinadores pendiente de esto era el momento ideal.

Cuándo entró Dev la estaba esperando cerca de la entrada principal, y delante de todos le estampó un beso. Tenían días sin verse porque Ambos habían estado ocupados, y los horarios no coincidían.

—Sobra decir que te ves hermosa—le dijo Justo después de haberla besado. A Phoebe le encantaba como se le veían los tatuajes en el
Pecho y el traje que traía. Muy sexy.

Hablaron un poco con los invitados hasta que llegó la hora de que Phoebe diera su discurso.

—Ahora le toca a mi hermanita, nos introducirá el proyecto más reciente que está trabajando la empresa.

Era momento de ponerse de pie. Justamente hace unos años en una fiesta de la empresa lo había intentado, pero cayó tan vergonzosamente que se obligó a si misma a exiliarse a la india.

Estaba temblando. Pero estaba decidida. Solo necesitaba un momento.

De la nada Dev llegó y le tendió la mano.

—Tu puedes—La alentó.

Ella se apoyó en el y camino hacia el escenario, con dificultad subió unos cuantos escalones hasta llegar al micrófono.

La gente estaba conmocionada, estaba caminando.. ella también lo estaba.

—Buenas noches a todos, he estado viajando en los últimos años haciendo obras benéficas, esta vez quise enfocarme en en el país y la ciudad en donde nací, porque sin duda creo que es importante retribuir todas las cosas buenas que te pasan en tu vida, especialmente a la gente y a la ciudad que te vio crecer.

Hizo una pausa antes de hacer la gran revelación.

—Les presento el polideportivo y bellas artes Kate Fitzgerald, un lugar que le cambiará la cara al barrio camberwell y beneficiará a niños y Adolescentes que decidan estudiar algún deporte o artes de manera gratuita.

Más cerca de ti जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें