El Trato - Lilix

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La castaña sonrió y se sonrojo gracias al mensaje de su rubio favorito, que incluso le hizo olvidar la pelea que tuvo con Gabriel Agreste. Ella decidió salir de su casa para despejar su mente.

Por otro lado, la menor Tsurugi salía de su casa, a una cita con cierto músico de ojos azules.

- Lukaa - saluda la azabache sacuendiendo lentamente su mano, con una leve sonrisa en su rostro, a lo que el músico se sonrojo

- Kagami - susurra el Couffaine, acercándose a asiática, quedando frente a la joven - ¿Nos vamos? - le extiende su mano, que la joven acepta gustosamente con una pequeña sonrisa en su rostro

Los jóvenes caminaban por París sin importarles nada, solo iban por el camino, en eso se encontraron con el heladero más famoso de París, ellos deciden ir a pedir helados

- Una nueva parejita en París - el heladero observa detenidamente al peliazul - arándano como su su cabello, café como sus ojos, y finalmente cereza como sus labios - canturrea el heladero entregándole ese helado al Couffaine, para después dirigir su mirada a la azabache - menta como su cabello, chicle como sus ojos, y vainilla como sus labios - le entrega su helado a la joven y se retira cantando dejando a la pareja sonrojada

Ambos recibieron sus respectivos helados, y siguieron caminando; ambos jóvenes estaban nerviosos, querían decirse cuanto se amaban, pero no podían, tenían miedo que el otro no correspondiera a sus sentimientos, ellos de querían, pero no querían salir lastimados, tenían una buena amistad en tan poco tiempo y no querían arruinarla

- Luka - dice la asiática, llamando la atención del peliazul

El músico giro quedando frente a ella, haciendo contacto visual, cada vez acercándose más y más, llegando a rozar sus narices, estando a sólo unos centímetros de besarse, ambos lo deseaban, querían probar los labios del otro, y sentir fluir el amor que tenían; y lo hicieron, en un beso suave y lleno de amor, un beso tranquilo, lento, despacio, y demostrando que tanto se amaban, aquel beso duró unos minutos, se separararon por falta de aire, aunque querían volver a repetirlo, ganas no les faltaban, pero el tener el apellido Tsurugi, y fingir salir con un Graham, implica la fama, cosa que la azabache no manejaba a la perfección; las cámaras, los reporteros, las preguntas solo agobiaban más a la asiática, el músico no sabía como lidiar con esto, pero encontró una manera de escapar junto con la azabache

- Kagami, ¿Estás bien? - pregunta el músico a la chica que le robo el corazón, el joven noto rápidamente que su amada no se encontraba bien, ella estaba asustada, y cayó de rodillas al piso, el músico decidio abrazarla para tranquilizarla un poco - Kagami, responde, por favor

- Luka - susurra la asiática saliendo de su trance

- Kagami, amor - susurra el músico a la chica que ama

El Couffaine y la Tsurugi se unieron en un último beso, similar al anterior, mientras se abrazaban, solo que en esta oportunidad el único espectador era la noche, solo ellos dos, dejándose llevar por el momento, dejando fluir todo, siendo libres

[...]

Por otro lado, cierto rubio peleaba con cierto diseñador

- ¡Déjala en paz! Ella es mi novia, no te metas en mis asuntos, tío - grita el ojiverde defendiendo a la chica que ama

- ¡Félix! Yo mande a Lila - dice el mayor en un ataque de ira, sin pensar en sus palabaras - ella no te ama, Félix, ella solo finge hacerlo, no te ama, y nunca te amará

Las últimas palabras del Agreste, se repetían en la cabeza del menor, haciendo eco, destrozando por completo al joven

- Tú e-estás m-mintiendo... Lila... ella si me a-ama - tartamuedea el Graham, fallando en el intento de ocultar su miedo - ¡Tú mientes!

El rubio escapó rápidamente de la mansión de su tío, y llegó a su mansión, busco su teléfono y llamo a Lila

- Lila ¿Estás ahí? - pregunta nervioso el Graham

- Holaa Félix - habla una aguda voz, que el rubio reconoció inmediatamente

- Hola enana, puedes pasarme con tu hermana - le pide el ojiverde a la Rossi menor

- Yaa, espera un rato, Lila esta ocupada con mamá - le dice la menor - por cierto, ya no vienes a visitarme

- Arianna, cariño, sabes que la vida de un adulto es algo ocupada - menciona el Graham - te prometo que en unos días iré

- Félix, amor... ¿Sucede algo? - pregunta Lila Rossi, quitándole el teléfono a su hermana menor - Ari, me dijo que me buscabas

- Lila... tenemos que hablar - dice el Graham totalmente serio, y frío en sus palabras

- Amor... ¿Está todo bien? - la joven Rossi no recibio respuesta de parte del ojiverde -  talvez... podriamos hablar mañana - dice la castaña algo nerviosa y preocupada - hoy estaré con mi madre y con mi hermana

El Graham corto la llamada inmediatamente, dejando a una castaña sorprendida y confundida a la vez

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Holaa, después de unos días (creo que ya fue una semana o menos xd) bueno me llego la inspiración, prometo intentar actualizar más seguido

Gracias a mis lectores que se dan un tiempo para esta historia

Francis23mom y LeelaKawaii los quiero mucho, gracias por el apoyo <3

-A Falied Experiment