3. Encuentra los errores

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Por la noche, me gusta mirar las estrellas desde la azotea de la escuela.

Hay dos errores en esta oración. ¿Puedes encontrarlos?

Uno es un error muy simple y elemental en el tiempo verbal ─en lugar de "me gusta", debería haber escrito "me gustaba".

Así sería a partir del día siguiente.

El 10 de octubre, cuando cumplí catorce años, dejaría de mirar al cielo nocturno para siempre.
Así que esta era la última noche.

El otro error es un poco más engañoso ─o mejor dicho, es uno que sólo yo puedo encontrar. Porque sólo yo lo conozco.

Pero, ¿de qué se trata?

Si solo yo lo conozco, tal vez se trate menos de un error y más de una equivocación mía.

Llevaba casi diez años cometiendo el mismo error.

Me equivoqué con la confianza y fallé con el orgullo.

Pero esa ridícula historia estaba a punto de terminar.

Dejaré mis juegos infantiles cuando llegue a mi segundo año de secundaria.

Esa fue la promesa que hice a mis "queridos padres". Conseguí interpretar las palabras en sentido amplio, como "hasta que cumpla los catorce años", y me mantuve en mis trece incluso después de entrar en mi segundo año de secundaria, pero la lucha parece haber sido en vano.

Un esfuerzo inútil. Qué puede ser más deprimente.

Es mejor arrepentirse de hacer algo que arrepentirse de no hacerlo ─el autor de ese famoso dicho es desconocido, pero mi conjetura es que a quien se le ocurrieron esas llamativas palabras debió de escribirlas después de una noche entera o algo así, porque a la frase le falta una perspectiva crucial.
No es muy común que la gente se arrepienta de no haber hecho algo.No ─la gente se siente realizada precisamente cuando no hace nada. La gente que dice: "¡Debería haber hecho eso!" me parece incluso algo alegre. Al fin y al cabo, la sensación de que podrías haber sido capaz de hacer algo si lo hubieras intentado es menos un arrepentimiento que una aspiración.

Los que se arrepienten son siempre los que hicieron algo ─así que, por favor, no me digas que es "bueno" que aparentemente haya tirado diez años de mi preciosa infancia. En general, el arrepentimiento es definitivamente "malo". Nunca imaginé que mi vida no tendría sentido. Qué idiotez más increíble. Por cierto, el tiempo que se pasa haciendo una cosa es tiempo que no se pasa haciendo otra ─y en ese sentido, el arrepentimiento por haber hecho algo puede ser sinónimo de arrepentimiento por no haber podido hacer nada. Si no hubiera estado persiguiendo sueños estos últimos diez años,

¿Qué podría haber logrado?

Cuando pienso en eso ─es como una completa devastación. Aunque, a la hora de la verdad, no se me ocurre nada que una persona como yo hubiera podido lograr de todos modos.

Aun así, nunca sé cuándo renunciar, así que también esa noche subí al techo de la escuela para ver qué podía ver, aferrándome a la más mínima esperanza, pero no ocurrió nada dramático. Dicen que el que ríe último, ríe mejor. Si eso es cierto, entonces supongo que la que llora última también llora mejor .
Si tan sólo fuera el tipo de chica encantadora que puede llorar en una situación como ésa. Me apoyé en la valla que rodeaba el borde del tejado y suspiré, pensando con desaliento en el hecho de que al final no había conseguido convertirme en ese tipo de chica, o para el caso, ser mucho más que una jovencita, y aquí estaba a punto de convertirme en adulta ."¿Buscando algo?" "¡Ack!"

La voz vino de detrás de mí en el preciso momento en que me arrimé a la valla, y mi espalda se enderezó mientras gritaba. Como intenté girar y mirar detrás de mí en esa postura torpe e intermedia, mis piernas se enredaron entre sí y me tambaleé peligrosamente.

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