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Capítulo 14

Capítulo 14: La habilidad requerida por un Dios masculino - Maniobras de la máquina de garras

No muy lejos de ellos había una hilera de máquinas de garras. Cuando Yan Qing Chi miró, notó que las dos máquinas de garras que estaban a un lado eran más pequeñas que el resto con una configuración diferente. Parecían estar diseñados específicamente para que los niños jugaran.

Le preguntó a Qi Qi: "¿Quieres atrapar juguetes de peluche?"

Qi Qi se acercó para ver, luego señaló a un cachorro blanco dentro de la máquina.

"¿A ti te gusta este?" Confirmó Yan Qing Chi.

Qi Qi asintió levemente con la cabeza.

Yan Qing Chi le entregó las fichas de juego en su mano, "Pon esta ficha en esta ranura, luego usa este joystick para atrapar el juguete". Él instruyó.

Qi Qi hizo lo que dijo, insertando la ficha y luego comenzando a atrapar los juguetes de peluche. Excepto que en realidad nunca había jugado antes, la garra de la máquina de garras se sacudió un par de veces.Apenas lo tocó, y luego se acabó el tiempo.

Qi Qi levantó la cabeza hacia Yan Qing Chi con perplejidad.

Yan Qing Chi lo ayudó a insertar otra ficha."Una vez más."

Qi Qi agarró el joystick y lo intentó de nuevo, pero no captó nada.

Yan Qing Chi examinó los juguetes dentro de la máquina de garras y señaló una pequeña tortuga que parecía ser más fácil de atrapar, "Intenta atrapar a esta".

Qi Qi soltó obedientemente la garra para atrapar a la tortuga. Sin embargo, tan pronto como la garra levantó el juguete, volvió a caer en la pila.

No quería admitir la derrota. Se volvió para mirar a Yan Qing Chi, "Una vez más".

"Bueno." Yan Qing Chi sonrió mientras insertaba otra ficha en la ranura.

Qi Qi maniobró el joystick, su mirada fija en esa pequeña tortuga. Una vez que lo atrapó, llevó con cuidado el juguete hacia la caja. Sin embargo, justo cuando la garra estaba casi allí, la garra perdió su agarre y la tortuga cayó.

"Una vez más." Qi Qi continuó diciendo.

Soltó la palanca de mando, dio una palmada y luego soltó un breve bufido.Luego comenzó otra ronda con gran atención.

Yan Qing Chi observó mientras fruncía los labios, con los ojos prácticamente pegados a la máquina de garras. Él también estaba inconscientemente ansioso debido a la influencia de Qi Qi.

Finalmente, la garra colgó sobre la salida. Qi Qi presionó rápidamente el botón de liberación y la tortuga cayó hacia abajo.Felizmente se agachó para recuperar a la pequeña tortuga.

Esta tortuga no era grande, simplemente tan grande como su palma. Qi Qi levantó la tortuga, moviéndola hacia adelante y hacia atrás mientras la estudiaba de cerca.Luego, se dio la vuelta y le tendió la tortuga.

Yan Qing Chi vio que extendió su mano hacia él con la tortuga y preguntó: "¿Para mí?"

Qi Qi asintió, un par de ojos de gato se curvaron, sus ojos se llenaron de felicidad.

Yan Qing Chi lo aceptó y lo amasó: "Es muy lindo, Qi Qi es increíble".

Qi Qi sonrió tímidamente, inclinando la cabeza.

"Como me has regalado un peluche, también te daré uno". Yan Qing Chi declaró.

Miró esta fila de máquinas de garras y le preguntó a Qi Qi: “¿Qué juguete de peluche te gusta? ¿O quieres ese perrito?