¿Cómo era posible? Contigo todo era fácil. Desde el principio confiaba en ti, nunca dudé de tu palabra. No habían discusiones.
Siento que tú te amoldabas a mí y que mordías la lengua incluso cuando no debías. Me malacostumbraste. No planeo contactarte, porque no es buena idea. Por fin has seguido adelante sin mí, como sabía que lo harías.
Además, te eliminé de todos lados ¿no? Lo siento, hice eso más por mí que por ti. Me di cuenta que algunos días solo quiero hablar contigo y con nadie más. Pero, no es justo. Así que no lo haré.
Porque sin ti, me he dado cuenta que lo que no funcionaba era yo. Y sé que siempre estarás mejor sin mí. Espero no pienses que te odio, porque no es así. Yo siempre te amaré. Ayer, hoy, mañana y para siempre.
