Serial Killer / VKookMin

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El beso fue evidente y claramente muy torpe.

Algo más que un simple roce, algo menos que un apasionado beso, fue más algo como solo sus labios juntos, pero a pesar de ello el contacto fue muy lindo y agradable, reconfortante, en si, aunque no pareciera, lleno de amor y talvez solo un poco de deseo y desesperación.

Fue un impulso por sus mayores, sus sentimientos contenidos; celos, amor, cariño, atracción y todo los incitaron a dejarse llevar y lo hicieron, lo iban a hacer. Iban a dejarse llevar.

Querían llegar a algo más, aunque haya sido muy rápido, querían más.

Pero, lamentablemente, todo el alcohol en su sistema, el cansancio, estrés y demás, no permitieron llegar a más que un beso, un lindo, tierno y "talvez" inocente beso.

Después de separarse ambos mayores cayeron dormidos en el suave y en ese momento muy atrayente colchón.

JiMin no sabía que exactamente había pasado, no entendía, no comprendía que había pasado, pero estaba extraña y raramente feliz, sus mayores lo habían besado, ambos, los dos, al mismo tiempo.

Puede que sí, fue un simple beso, solo los labios de sus mayores aprisionando los suyos, nada más, no hubo más movimiento ni mucho menos lengua. Pero igual logró emocionar al menor.

Se recostó en la cama también, intentaría dormir aunque la emoción no lo dejaría, ¿Sus mayores sentirán lo mismo que el? No podía evitar el sonreír.

Cerro sus ojos y toqueteó un poco sus labios recordando como se sentían los labios de sus mayores, pero recordó que ambos estaban borrachos, solo había sido un simple impulso, no recordarian nada en la mañana, o talvez si.

(...)

–Joder, tengo un terrible dolor de cabeza.–

–Yo también.–

JiMin había despertado solo y al bajar las escaleras y dirigirse en busca se sus mayores, los encontró en la cocina, se sentía tímido y raro, pero raro mal, ya que era la primera vez que dormía con sus mayores y no despertaba con ellos.

–Buenos días, hyungs.–

–Buenos días.– Respondieron mientras bebían café.

–Tu si recuerdas que pasó anoche, ¿Cierto?–

Su nerviosismo no tardó en aparecer, sonrió ya que de seguro sus mayores le dirían algo acerca del beso.

–Si, Kook hyung.–

–Que bien, ahora por favor dime que golpeé a Jung.–

Su sonrisa se desvaneció de a poco. –No, no lo golpeó, NamJoon hyung y otro señor los separaron antes de eso.–

–Que bien.– Suspiro Tae.

–Que mal.– Reprochó Jeon.

–¿Solo eso quería saber?¿No hay nada más que recordar?–

–Creo que no. ¿Que hay de ti, Tae?–

–Solo se que tengo una terrible resaca, faltaré al trabajo pero tengo que visitar algunos institutos para ver en cual inscribir a Mochi.– Dio un trago a su café.

–¿Puedes quedarte solo unas cuantas horas, cierto, JiMin?–

JiMin solo bajó la mirada, mordió su labio y asintió, se sentía muy tonto, intento concentrarse en que su pijama le quedaba grande ya que ni siquiera era de el, la parte de abajo era de Tae y la parte de arriba era de Kook, lo cual lo hizo sentir aún más tonto ya que le quedaba ridículamente grande mientras sus mayores estaban formalmente de traje.

Solo se quedó ahí, de pie, viendo hacia abajo, sus mayores dejaron lo que hacían ya que era tarde, se levantaron de su lugar e iban a dirigirse a hacer sus cosas, Jeon iba a trabajar y Tae, como dijo, a visitar institutos.

Park simplemente espero a que sus mayores se fueran para poder llorar mientras se reprocharia de ser tan iluso, claro que solo había sido un simple beso, no había porque ilusionarse ni emocionarse.

Jeon lo sostuvo del mentón para que los viera y sin poder dejar protestar al menor, ambos lo besaron.

–Adiós, cariño.– Se despidió Tae.

–Cuídate, bebé.– Le Sonrió Jeon.

JiMin quedó atónito y Sonrio ya que no había razón para echarse a llorar.