El rey león: la historia de tres hermanos, el regresó de Zira.

Capitulo 20

¿Problemas? Parte 2/2

La frase dicha por Jasiri resonó en la cabeza de cada uno de los allí presentes formándose así un gran silencio que duro unos cuantos segundos que luego, fue rellanado por los murmullos de las leonas quienes debatían por lo bajo si lo que decían era verdad o no. El rey analizaba lo antes dicho por la hiena, si esto llegaba a ser verdad deberían de sacar la mayor información posible mas los murmullos innecesarios de las cazadoras no lo dejaban concentrarse.

-¡Silencio!- exclamo Kopa, recibiendo por respuesta un gran silencio. El macho era muy alegre y simpático más cuando llegaba a gritar hacia que todos le prestaran atención.

-Jasiri ¿esto es cierto?- inquirió Kiara, al ver que nadie iba a hablar.

La nombrada miro a su compañero para luego volver su vista a la actual reina y asintió confirmando su pregunta.

-¿Cuántos son?- esta vez fue Kopa quien decidió preguntar, refiriéndose a la cantidad de atacantes.

-no lo sabemos.- hablo Janja.- hoy a la mañana llegaron dos de nuestras hienas a la cueva de Jasiri, nos dijeron que en la expedición para aumentar nuestras tierras llegaron al Bosque Abandonado y decidieron explorarlo, allí se toparon con un grupo de leones que parecían estar planeando un ataque contra Las Praderas, pero al estar escondidos ninguno de los dos pudo divisar la cantidad del grupo.- concluyo él.

Todos quedaron boquiabiertos al escuchar la explicación del manchado. El menor de los tres hermanos frunció el ceño, él perfectamente se acordaba de la vez que rescato a sus cinco sobrinos y a los amigos de ellos de las fauces de la temible leona que los estaba acorralando y, aunque solo se encontrara ella y dos cachorros sabía perfectamente que al haber una hembra también podía llegar a haber machos y unas cuantas hembras más. Mheetu abrió su boca asombrado ¿acaso la supuesta manada que vivía allí seguía en ese lugar? Y si es así ¿Por qué los querían atacar? Su manada no había hecho nada contra ellos ¿verdad? A los tres hijos de Kiara y a las dos hijas de Kopa les recorrió un escalofrió por su espalda y, aunque tenían recuerdos borrosos de ese encuentro aterrador, los cinco recordaban los oscuros ojos rojizos de la feroz hembra.

-es verdad y, además, nos han dicho que aparentemente quieren aliarse con mas animales. Yo opino, rey Kopa, que aumente su capacidad de manada y se preparen, ni Janja ni yo sabemos cuándo atacaran pero ciertamente les brindaremos una mano.- dijo ella.

Todos miraron directamente al rey para escuchar lo que diría, este medito por un tiempo y luego dio su respuesta.- si es cierto lo que dicen pues entonces nos prepararemos para la batalla, en nuestra manada podríamos contar unos diecisiete felinos para combatir.-

-un momento.- dijo Simba, robándose la atención de todos.- ¿Quiénes serian esos diecisiete felinos?

-bueno padre, ellos serian las diez leonas de cacería con las que contamos, sumándole a Vitani, Mheetu, Fuli, Kovu, Kion, Kiara y yo.-

-eso no está bien.- dijo su viejo padre, siendo observados por todos los presente.

-¿y eso por qué papá?- cuestiono su amada hija.

-no dejare que mis tres hijos peleen sin mi.- hablo en tono serio, dando a entender que lo que decía era cierto.

Todos se miraron preocupados, Simba ya era un león adulto con unos cuantos años encima y a ninguno de los integrantes de la manada le agradaba la idea de llegar a perder a su ex rey, después de todo se había ganado no solo el corazón de ellos sino también el del reino y si algo le pasaba nadie se lo perdonaría.

Nala quiso intentar convencer a su esposo de que piense mejor la idea, tal vez meditarlo con la mente en frio le haría recapacitar y entender que sería mejor no pelear pero sus palabras quedaron en la punta de su lengua, Kovu se le había adelantado, el moreno se acerco a su suegro y lo miro preocupado. Tal vez antes su relación no fue la mejor pero de a poco llegaron a entenderse, tanto así que Simba podía llegar a considerar a Kovu como un hijo.