Capítulo 11

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Las cosas suceden de esta forma

Felix llevó a Jensen a su casa, Fátima estaba en su habitación con sus amigas mientras que sus padres todavía estaban en el trabajo. Ambos subieron hasta su habitación y Felix comenzó a buscar algo entre sus cosas. Jensen se sentó en la cama mirando curioso sus movimientos.

— ¿Qué buscas?

—Mis marcadores—le dijo, Jensen frunció el ceño. Felix se sentó junto a él con una hoja y una cartuchera de plumones—. Bien, las cosas son así.

Dibujó un círculo y dentro de él escribió: El día de Baile.

—Este es el día clave, cuando conocí a Diana y a ustedes—mencionó el chico, Jensen asintió.

—Sí, te conocí en la barra de bebidas.

—Exacto, ahí también conocí a Diana.

—A Diana la conociste bailando en la pista—Felix negó.

—En esta realidad lo hice pero en la verdadera realidad fue con las bebidas—dijo y trazó cuatro líneas en la hoja—. Realidad uno, la verdadera: A Diana le gusta Fabricio y yo estoy soltero deseando que algún día pueda salir de la friendzone. Realidad dos—anotó el número—: Diana está enamorada de mí y yo aparentemente la rechacé.

— ¿Diana enamorada de ti? —rió Jensen, Felix lo miró serio y el chico se disculpó—. Perdón, pero no me lo creo—rió nuevamente.

—Ajá, continúo. Realidad tres, en la que estamos ahora: Diana y Fabricio están juntos y yo fui quién los ayudó a salir—mencionó y lo miró—. ¿Cómo se me ocurrió esa tonta idea?

—No sé, un día llegaste y nos dijiste que estabas ayudando a Diana a estar con Fabricio—le dijo Jensen—, Diana y yo no nos llevamos muy bien, así que no sé mucho de ella. Por cierto, ¿cómo es que llegas a estas realidades? ¿Cómo inició todo?

—Realidad 1, estaba en la cancha jugando a los quemados y me dieron un golpe en la cabeza, lo siguiente fue que desperté en la noche del baile de bienvenida. Creo que fue porque el día anterior al golpe estaba contigo pensando en cómo podía hacer para que Diana dejara de verme como su amigo y deseé que pudiese volver a conocerla—dijo y pensó un poco para luego tomar consciencia de lo que pasaba—. ¡La pestaña!

— ¿Cuál pestaña?

—Tú y Miles me dijeron que eso cumplía los deseos.

— ¿Y nos creíste? —se burló Jensen, Felix lo codeó—. Eso es algo de niños.

—No tengo alguna otra explicación lógica.

—Claro, porque una pestaña que concede deseos es muy lógico—le respondió—. Como sea, realidad 1 hizo que regresaras al día del baile, ¿de ahí al terminar la noche apareciste en la realidad dos?

—No, cuando me vomitó.

—Qué asco—le dijo—. Cuando te vomita es como si se reiniciara todo y apareces en una nueva realidad.

—Cambio los hechos para que sean a mi agrado, aunque hasta ahora ninguno lo ha sido.

— ¿Y regresas al baile cuando te golpean?

—No lo sé—mencionó Felix—. La primera vez fue así, pero en la segunda realidad estaba a punto de besar a Diana. No sé cómo regresaré en esta.

Jensen suspiró intentando ver la lógica en todo lo que le había contado Felix, carecía de sentido lo que él estaba viviendo, simplemente no había algo que pudiese hacerlo entender. Pero muy dentro de sí, quería creerle al chico; quizás su historia era bastante fantasiosa pero había visto muchas películas con bucles en el tiempo como para poder creer que, si alguien llegaba diciéndole que vivía el mismo día varias veces, podía ser, en cierta forma real.

— ¿En las otras realidades somos amigos? —preguntó Jensen, Felix asintió—. ¿Soy bisexual también? —Felix volvió a asentir—. ¿Quién me gusta?

—No lo sé—dijo y luego recordó lo que había sucedido en la fiesta de Maia—. En realidad dos habías dicho que te gustaba alguien que estaba en la fiesta mientras jugamos verdad o reto, pero no dijiste quién. ¿Quién es? No me los has dicho en ninguna de las realidades.

Jensen pensó un poco y luego lo miró.

—Si no te lo he dicho seguro es el mismo—le contestó.

— ¿Es Miles?

—Ugh, que asco, no—le dijo, Felix rió—. Miles es cero mi tipo, diría que sólo es el tipo de Maia.

—Si me gustasen los chicos seguro saldría con Miles—Jensen lo miró curioso.

— ¿Y conmigo no?

—No soy para nada tu tipo—Jensen rió pero no dijo nada sobre eso.

Miró la hoja de Felix y pensó en una causa de todas esas realidades. ¿Cómo podría controlarlas? Cada vez que regresaba al inicio, seguro hacía algo para cambiar la realidad que tenía, pero ¿habría un punto de llegada para Felix?

—Dices que la primera vez regresaste al baile porque te golpearon con un balón, la otra por casi besar a Diana—mencionó mientras pensaba—, es decir que, regresas cada vez que hay una situación de sorpresa para ti.

Felix lo pensó un poco y podía ser cierta su teoría. El golpe y el casi beso de Diana lo tomaron inadvertido y eso podría haber causado el reinicio de la realidad. Quizás regresaba porque no era así cómo necesitaba terminar. Miró a Jensen y asintió todavía dudoso.

—Eso creo, ¿cuál es tu punto? —Jensen sonrió.

—Cuando regreses al baile, búscame antes de que yo te busque.

— ¿De qué tú me busques? ¿A qué te refieres?

—No me odies por esto.

— ¿De qué estás hablando?

Jensen tomó al chico de su playera atrayéndolo a él y capturando sus labios en un beso que lo congeló de todos sus sentidos.

›››

El toque de la mano en su brazo hizo que se sobresaltara y se encontró con Fátima a su lado. Ya no estaba en su casa y no había señal de Jensen.

—Iré a la pista para ver si algún chico se me une a bailar—habló la chica, Felix suspiró.

—Está bien, no bebas mucho hoy—le dijo mirando la entrada del Instituto frente a él.

—Vale, nos vemos en un rato—besó la mejilla de su hermano y entró.

Felix miró a las personas mientras entraban y caminó hacia la puerta. Dio un suspiro largo y se traqueó el cuello para relajarlo.

—Aquí vamos de nuevo.

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Holaaa c:

¿Qué les pareció el capítulo? 

¿Me quieren golpear porque seguro Jensen no se acordará de que besó a Felix? xd

La primera vez de muchasWhere stories live. Discover now