Mi Resistencia

Capítulo 6

David POV

Se ha ido pegando un portazo de cojones... Joder David, ya la has liao como siempre.

No sé como gestionar esto... A ver si va a ser verdad que solo sirvo para decir gilipolleces. Creo que debería consultar esto con alguien. Cojo el teléfono y tras dos tonos escucho una respuesta...

-¡DAVID QUÉ PASA! ¿¡QUÉ PASA DAVID?! ME HAS DESPERTADO A LA CHIQUILLA ME CAGO EN TODOS LOS MU...

-Jorge de verdad, lo siento pero necesito hablar con alguien. Ha pasado algo con Emma...-Le interrumpo.

-¿Quién coño es Emma?- Me pregunta Jorge confuso.

-TU BECARIA JORGE POR FAVOR NO SABES NI A QUIÉN CONTRATAS.

-Aaaaah la mojigata jejeje ¿Qué pasa Deivid? se la ve buena muchacha ¿Qué has liao?-Suspiro y procedo a hablar de nuevo sin saber muy bien qué decir.

-Que la he perdido Jorge.

-¿Pero que la has perdido dónde david? ¿DE QUÉ HABLAS? No es un perro ¿Sabes? ¿Cómo vas a perder a una chiquilla? ¿Tú estás tonto?- Le cuento todo lo ocurrido entre Emma y yo, después de esto se queda callado un rato hasta que finalmente habla:

-David... Te estás metiendo en un embolao que no lo sabes tú bien. Lo primero que deberías hacer es hablar las cosas con Patricia. Y deja de marear a Emma, bastante empanada está ya la niña para que ahora la descoloques aún más...

-Me tiene loca perdía la cabeza Jorge...Yo ya no sé...¿Podrías darme su número? Creo que debería hablar con ella.

-Mira David, a mi me dejáis con vuestras mierdas de romance adolescente. Seré muchas cosas, pero respeto la ley de protección de datos. Como si mañana queréis comeros la boca en el camerino. Me da igual pero no me metáis a mí.

-Es que el problema es que ya no quiere comérmela...

-¡¿Y A MI QUE ME CUENTAS SI LA NIÑA NO QUIERE HACERTE UNA MAMADA?! tengo a mi chiquilla berreando aquí al lao ¡Dejame en paz!

-HABLABA DE LA BOCA JORGE ¡¡¡DE LA BOCA!!! Y NO ES UNA NIÑ...- Jorge no me deja acabar la frase y cuelga el teléfono. La paternidad le está sentando como una patada en el culo al gilipollas este.

Esta conversación me ha agotado, Jorge no ha sido de mucha ayuda así que recurro a la vieja confiable...Instagram. Veo que Emma ha subido una historia...Mierda...Hace tres segundos. Genial, ahora encima pensará que soy un acosador psicópata. La historia es un fondo negro con una canción de Aitana...Esa canción en la que canta sobre nosequé de quedarse. Qué ñoña es. Igualmente quiero hablar con ella así que me parece la excusa perfecta para responder a la historia.

-¿Vas a quedarte?

Casi momentáneamente lee mi mensaje pero no recibo ninguna respuesta. Mierda. Ahora cómo voy yo a trabajar. Dentro de unas horas tendré que verle la cara y ver como esos ojos azules no me miran. Me lo merezco.

Entro al teatro, todo está en silencio. La busco entre la gente pero nada. No está ¿Y si no vuelve? Igual ya no quiere seguir haciendo aquí las prácticas. Quizá no quiera saber nada más de mí. Es entonces cuando la veo entrar. Va preciosa. Lleva el pelo suelto liso, una blusa granate que deja sus hombros al descubierto y unos vaqueros ajustados que resaltan sus tímidas curvas. Qué me estás haciendo Emma... Mírame por favor. Sin embargo para ella soy un fantasma, parece ser que no se ha percatado (o no ha querido percatarse) de mi existencia y pasa de largo sin ni siquiera mirarme.

No voy a darme por vencido así que voy tras ella. Necesito que sepa lo que de verdad pienso. La sigo hasta la sala de realización que ahora mismo está vacía así que aprovecho para cerrar la puerta con seguro tras de mí. No quiero interrupciones, bastante va a costarme ya sincerarme con ella para que encima me interrumpan los cuatro trápalas estos. El sonido de la puerta al cerrarse la sobresalta y se gira para finalmente mirarme. Su gesto no es de enfado, sino más bien curiosidad. Está esperando a que le diga algo.

-Emma...Jejeje ¿Qué pacha?- Veo como ella pone los ojos en blanco y tuerce el gesto. Mierda. La he vuelto a cagar haciéndome el gracioso.

-David, déjate de gilipolleces ¿Qué quieres?

-Oliver... No sé lo que quiero...Pero sé que lo quiero contigo.

Noto la sorpresa en sus ojos. Sus facciones se relajan y despacio se acerca a mí. Noto su nerviosismo. Yo también lo estoy. Mis manos están sudando más de lo normal y me las seco en el traje. Mierda. Como la toque ahora le baño. Me agarra de la nuca acercándome hacia ella y me besa decidida. Le correspondo con urgencia poniendo en ese beso todas las ganas que tengo de ella. Nuestra respiración se acelera y mis manos suben por su espalda hasta que llaman a la puerta haciendo que nos separemos, muy a nuestro pesar. Emma abre la puerta a los técnicos excusándose como puede.

-Disculpad... Estaba revisando las salidas de audio.-Uno de los técnicos me mira confundido y me pregunta de forma irónica.

-¿Y tú Broncano? ¿Qué estabas revisando?- Eso hace que los demás aguanten una evidente carcajada. Emma se torna del color de su blusa y se va dando grandes zancadas.

-Soy el presentador. Puedo estar donde quiera.- Respondo autoritario y dicho esto voy tras ella. Me está esperando en el pasillo y con gesto decidido me dice:

-Quiero que sepas que ese beso no significa que te crea ni que sirva como precedente de nada. Te va a hacer falta mucho más que eso para que confíe en ti.-Después de pronunciar estas palabras y sin haberme dado tiempo a responder se va de forma altanera dejándome allí con esa sentencia en el aire.