PARA APRENDER MAS 3

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LA EMERGENCIA DE LA CONCIENCIAEl pináculo de la evolución del sistema nervioso es la conciencia. Es la más obvia yal mismo tiempo la más enigmática de todas las funciones mentales. Todos tenemosuna idea intuitiva de lo que es, pero resulta difícil definirla por tratarse de un procesosubjetivo. Por algún tiempo, a consecuencia de la nefasta influencia delconductismo, la psicología ignoro o incluso negó la existencia de la conciencia,aunque hoy día resulte difícil comprender como es que esto sucedió, pues siendocriaturas conscientes ignorar su existencia es negar nuestra propia naturaleza, estratar de tapar al sol con un dedo. Al respecto Julian Jaynes nos dice que "es unejercicio interesante sentarse y tratar de adquirir conciencia de lo que significa decirque la conciencia no existe". La explicación está en las complejas circunstanciashistóricas en las que surgió el conductismo, en la época que siguió a la primeraGuerra Mundial, en la que el colapso del idealismo y el triunfo de la ciencia y latecnología crearon una edad revolucionaria que exigía nuevas filosofías. El mundoestaba cansado y temeroso del pensamiento subjetivo y anhelaba hechos objetivos.En los estados Unidos, donde este anhelo cobraba una fuerza inusitada, un hechoobjetivo era un hecho pragmático y el conductismo proporcionó esto en lapsicología, aunque sólo fuera de manera ilusoria, pues fue un método y no la teoríaque quiso ser. Sea como fuere, el conductismo domino el escenario psicológicodesde cerca de 1920 hasta 1960. Con la decadencia de esta corriente en los añossesenta, retorno la conciencia al ámbito de la psicología, e incluso algunosneurobiólogos como Penfield, Adrian, Jasper, Sperry, Eccles y Mountcastleempezaron a preocuparse del problema, y se ocuparon de incluirla en sus textos yreflexiones.Hoy día, el problema de la conciencia ocupa un lugar central en la filosofía y en lasneurociencias. No se puede ser neurocientífico sin estar preocupado por elproblema. La actual efervescencia del tema ha llevado al inicio de reuniones deestudio en Tucson, Arizona, en donde cada dos años, a partir de 1994, variosneurocientíficos, filósofos y expertos en inteligencia artificial examinan el problemade la conciencia desde perspectivas diferentes. Los resultados de la primera deestas reuniones ya han sido publicados. Podemos decir que el estudio científico dela conciencia ha comenzado y se ha convertido en una de las prioridades de lasneurociencias contemporáneas. Existen varios grupos de neurocientíficosencabezados por Gerald Edelman, Frnacis Crick y Christof Koch, Michael Posner yMarcus Raichle, Rodolfo Llinás y Antonio Damasio que, como veremos, han sido promotores y responsables de gran parte del renovado interés y de la categoríacientífica que ha cobrado el estudio científico de la conciencia. A la par de ellosdeben mencionarse las importantes contribuciones que han hecho al tema muchospsicólogos cognitivos, como Daniel Dennett, expertos en inteligencia artificial comoTerrence Sejnowski, que se mueven como peces en el agua tanto en los dominiosde la filosofía como en los de las neurociencias, por lo que se han llamado a símismos "neurofilósofos". Todo este movimiento representa un paso trascendentalen las neurociencias, y que el estudio de la conciencia era un problema exclusivode filósofos, psicoanalistas e "iluminados" con intereses especulativos o esotéricos.Las nuevas corrientes y sus paladines han contribuido a derribar el velo de misterioque cubría el estudio de la conciencia. Velo de misterio bordado y mantenidoprincipalmente por dualistas o criptodualistas, una de cuyas contribuciones másdeletéreas ha sido la negación a priori de que la conciencia pueda ser estudiadacon los métodos de la ciencia. Puede ser que tengan razón, nunca deben tomarseposiciones dogmáticas, particularmente cuando el camino apenas comienza adesbrozarse; pero hay que darle su oportunidad a la ciencia y esto significa generarhipótesis que sean susceptibles de ser puestas a prueba con los métodos de esta.EL PROBLEMANO LE DEMOS VUELTAS AL asunto y enfrentemos la realidad; la conciencia es unenigmático rompecabezas. No existe ningún fenómeno análogo o remotamenteparalelo, ningún modelo o referente que nos guie en la aprehensión de su naturalezaesencial. El hecho de ser un fenómeno único, tan peculiar, que hasta ahora carezcade explicación neurodinámica, ha hecho pensar a muchos filósofos que no essusceptible de ser explicado científicamente como un fenómeno puramente físico.Se argumenta que la conciencia es un fenómeno subjetivo, accesible solamente ala criatura que la experimenta, no observable, mientras que aquello que es físico,como la actividad neuronal, es medido y estudiado por los métodos de la ciencia.Sin embargo, la mayoría de los neurocientíficos pensamos que la conciencia no esun fenómeno ni milagroso ni misterioso, y consideramos que su explicación a largoplazo tendrá una base neuronal.La historia del pensamiento humano, incluida desde luego la ciencia, está plagadade hechos que revelan que el hombre tiende por naturaleza a dar explicacionesmísticas o sobrenaturales a los fenómenos que no entiende. Por ejemplo,recuérdese a los vitalistas, entre los cuales se encontraban muchos ilustrescientíficos, que pensaban que los procesos vitales, la vida misma, el "misterio" de la vida, no podía explicarse por las leyes de la física y la química. Los había de dostipos, los exógenos, que consideraban que la vida era un principio externosuperpuesto al cuerpo, al cual dotaba de vida, y los endógenos, que considerabanque los organismos vivos poseían propiedades vitales únicas, irreductibles, dad laorganización peculiar de la materia de la que estaban compuestos. En el siglo XIX,el vitalismo floreció con fuerza en Inglaterra, generalmente asociado con la teologíanatural, y en Alemania con la Naturphilosophie. La biología molecular, la biofísica yla bioquímica contemporáneas han derrumbado estrepitosamente las pretensionesdel vitalismo. Uno de los promotores de esta revolución fue precisamente FrancisCrick, quien en colaboración con James Watson descubrió las claves del códigogenético que determina la producción y organización de los componentes celularesy de sus interacciones peculiares, produciéndose el fenómeno de la vida celular.Esta puede definirse como un estado característico de un sistema (la célula)compuesto por un conjunto de elementos que se organizan e interactúan de unmodo especifico, siguiendo las leyes de la física y de la química. Si esos mismoscomponentes o elementos se asocian e interactúan de otra manera, no habrá vida.Indudablemente alentado por el marco conceptual que genero su propiodescubrimiento, que permitió una explicación científica de lo que hasta hace pocoera el "misterio de la vida", Crick plantea que el problema de la conciencia no esmuy distinto en magnitud y que el desenlace será similar. No es pues sorprendenteque una de las grandes aportaciones de Francis Crick al problema de la concienciahaya sido enfatizar que esta es un proceso que tiene una explicación neuronal, quepuede investigarse con los métodos de la ciencia. Así, desde que se instaló en elInstituto Salk en La Joya, ha luchado, con éxito, porque el estudio de la concienciasea considerado como un legítimo objeto de investigación científica.La gran ventaja de las hipótesis desde una perspectiva meramente neurobiológicases que, en vez de proporcionar explicaciones especulativas, preñadas de laberintossemánticos a veces incompresibles incluso entre los filósofos, constituyen hipótesiscientíficas, es decir, susceptibles de ser probadas por los métodos de la cienciaexperimental. Sin embargo, la neurobiología apenas comienza a asomarse alproblema por lo que no puede soslayarse una serie de corrientes filosóficas acercadel problema de la conciencia y en general sobre el llamado problema mentecuerpo, cuyo análisis rebasa con creces los objetivos de este ensayo, pero quedeben mencionarse y consultarse. Estas corrientes incluyen, desde luego, aldualismo en todos sus grados y manifestaciones, al conductismo lógico, almaterialismo reductivo (teoría de la identidad psiconeuronal), al funcionalismo, almaterialismo eliminativo, al idealismo, a la teoría del doble aspecto y a la concepciónfenomenológica. El lector interesado en profundizar en estas hipótesis y teorías  debe consultar obras de revisión, reflexión y critica en las que se trata el tema, queademás del capítulo XV de este volumen, incluyen las de Globus, Maxwell ySavodnik, Fernandez Guardiola, Bunge, Churchland, Priest, Flanagan y Searle.¿QUE ES LA CONCIENCIA?Cualquier definición neurobiológica de la conciencia, en el momento actual, nopuede tener más que un carácter preliminar y, por ende, provisional. Teniendo encuenta esta advertencia, podemos decir que la conciencia es un proceso mental, esdecir neuronal, mediante el cual nos percatamos del yo y de su entorno en eldominio del tiempo y del espacio.Se dice que la conciencia, por ser un estado subjetivo no es observable y por endeno es medible. Creo que este punto de vista, sostenido principalmente por algunosfilósofos (vide supra), debe modificarse y actualizarse si aceptamos que estarconsciente de algo es tener una representación neural, flexible y dinámica de esealgo. Esta representación neural es interpretada por el sujeto como una experienciaprivada, subjetiva. Sin embargo, este estado particular de conciencia puede resultaren una o varias conductas que constituyen el testimonio observable del estado deconciencia en cuestión. Estos testimonios pueden correlacionarse con la actividadneuronal subyacente, detectada ya sea por técnicas de imágenes funcionales o porel registro con diversas técnicas electrofisiológicas.Ya desde hace más de dos décadas el neurofisiólogo Vernon Mount-castleconsideraba, en primer lugar, que la conciencia es posible debido a la organizaciónfuncional del cerebro y que se caracteriza por los siguientes atributos observables:1. Es un fenómeno neuronal.2. Existe en el hombre y en otros animales. (Es difícil establecer una líneadivisoria entre los animales que la tienen y los que no la tienen. Es un procesoprobablemente gradual, que va en función de la complejidad del sistemanervioso). Desde el punto de vista conductual se infiere su existencia por lossiguientes observables, todos los cuales implican la capacidad de elecciónde una acción determinada:a) Atención selectiva (que puede dirigirse o enfocarse hacia distintos objetoso situaciones).b) Manipulación de ideas abstractas.c) Capacidad de expectativa o predecibilidad de situaciones futuras.d) Advertencia de sí mismo y de los demás.e) Valores estéticos y éticos. 3. Varía en un mismo individuo y es farmacológicamente modificable.4. Implica fenómenos de percepción.5. Implica memoria.Además de expandirnos en la explicación de estos atributos, hoy podemos añadirotros. Por ejemplo, es un hecho que la conciencia es un estado intrínseco delcerebro que es independiente de la entrada sensorial. Podemos cerrar los ojos,taparnos los oídos y minimizar todas nuestras entradas sensoriales, sin extinguir laconciencia. Podemos fantasear acerca del futuro, imaginar cosas o escudriñar através de los archivos de nuestra memoria independientemente de la entradasensorial aferente, es decir, deprivados sensorialmente.No puede haber conciencia sin memoria. La conciencia de algo existe siempre conrespecto al tiempo, por lo que es necesario que exista por lo menos algún tipo dememoria a corto plazo. Más aún, nuestra conciencia histórica, nuestra concienciacósmica, así como la conciencia de la conciencia, requieren de memoria de largoplazo.No puede haber conciencia sin atención selectiva. La conciencia es un proceso quepuede ser dirigido o enfocado hacia lo que hay afuera, el mundo que nos rodea. Ohacia nuestro adentro, como sucede con la introspección. Podemos fijar la atenciónen cosas, temas o eventos, o incluso seleccionar la entrada sensorial a la quequeremos poner atención. Por ejemplo, podemos poner atención a los ruidos delmundo externo, o si queremos, al roce de la camisa con el cuerpo, o al color delcielo en un instante, o a un problema matemático que alguien nos explique en unpizarrón; es decir, podemos conscientemente filtrar y seleccionar informaciónaferente. No sólo esto, sino que el sistema nervioso consciente tiene la capacidadde generar interpretaciones alternativas de datos que le aparecen ambiguos, hastallegar a una hipótesis de la realidad.La conciencia desaparece durante el sueño y reaparece durante las ensoñaciones.La conciencia de las ensoñaciones se caracteriza por ser un estado cerebral en elque existe deprivación sensorial. Los contenidos de esas experiencias conscientesson distintos a los de la vigilia, pero son, después de todo, estados conscientes.Lilinás y Paré han postulado que la diferencia entre las imágenes cognitivas de lasensoñaciones y las de la vigilia radica en el peso relativo de la información sensorial.De acuerdo con este punto de vista, vigilia y ensoñación son estados funcionalesequivalentes del cerebro generados por las propiedades intrínsecas de las neuronasy de los circuitos neuronales tálamo-cortinales (vide infra). Cuando ensoñamos, lossistemas tálamo-cortinales funcionan automáticamente como un sistema cerrado, sin ser modulados por la información sensorial, de tal manera que en los ensueñosvemos, oímos y sentimos, debido a la actividad intrínseca cerebral no relacionadacon el exterior. La vigilia es un estado funcional intrínseco del cerebro, similar al delas ensoñaciones (sueño paradójico), pero modulado por los sentidos. Puededecirse que cuando estamos despiertos también "estamos soñando" pero estosensueños están regidos por los sentidos. "...Los colores no existen en el mundoexterno, ni existen los sonidos, ni existen los olores, ni existen los sabores. Quedaclaro que nuestro cerebro genera estos entes subjetivos como herramientasheurísticas que nos permiten interactuar con el mundo externo". En lo que toca a laconciencia no importa cómo sea la realidad "real" del mundo externo, pues "...sólolo observamos a través de nuestros filtros sensoriales; lo que importa es que lasimágenes, aunque ficticias, representan las propiedades del mundo que nos rodea.Digamos que son lo suficientemente reales como para que no nos rompamos lasnarices contra lo que llamamos árboles, cuando corremos en el bosque". Esta teoríanos recuerda ineludiblemente aquella escena de "la vida es un sueño" de don PedroCalderón de la Barca (1600-1681), cuando Segismundo, prisionero en una torre, ledice a Clotaldo: "...estamos en mundo tan singular que el vivir sólo es soñar; y laexperiencia me enseña que el hombre que vive sueña", y más adelante:y el mundo, en conclusión,todos sueñan lo que son,aunque ninguno lo entiende.Yo sueño que estoy aquíde estas prisiones cargado,y soñé que en otro estadomás lisonjero me vi.¿Qué es la vida? Un frenesí¿Qué es la vida? Una ilusión,una sombra, una ficción,y el mayor bien es pequeñor,que toda la vida es sueño,y los sueños, sueños son.La conciencia puede enfermarse. El mejor ejemplo de esta afirmación es laesquizofrenia, enfermedad en la cual la realidad externa es interpretada de maneradistinta a como lo hacen los individuos normales. Una de las características de laesquizofrenia son las alucinaciones, es decir, percepciones en ausencia deestímulos externos. El mecanismo básico de las alucinaciones de losesquizofrénicos ha sido atisbado por Silbersweig y sus colaboradores. Estosinvestigadores han logrado esclarecer la neuroanatomía dinámica de estosfenómenos, registrando, mediante la técnica de tomografía por emisión de positrones, las áreas del cerebro que se "encienden" en estos pacientes en elmomento en que presentan estados alucinatorios auditivo-verbales y visuales.Cuando sufrían alucinaciones todos los pacientes mostraron un aumento deactividad neuronal en áreas profundas del cerebro, particularmente en el tálamo,pero en la corteza cerebral el patrón de actividad era distinto en cada persona,dependiendo del contenido de las alucinaciones. Entonces las alucinaciones de laesquizofrenia corresponden a una actividad tálamo-cortical anormal, similar enmecanismo a la que ocurre normalmente durante las ensoñaciones (vide supra). Ladiferencia es que en los esquizofrénicos las alucinaciones se presentan en elestado de vigilia. Estos investigadores y otros, concluyen que la esquizofrenia estáligada a anomalías en la actividad del tálamo, que, según la teoría de Llinás, es unórgano generador de imágenes.La conciencia tiene la peculiaridad de albergar los contenidos de variasmodalidades sensoriales dentro de una experiencia unificada de la realidad externa.El cerebro analiza el mundo exterior a través de los sentidos. Pero los sentidosdescomponen o fragmentan los atributos de la realidad para su análisis. A pesar deesta fragmentación de las imágenes de la realidad externa en el interior del cerebro,en donde cada atributo es analizado en distintos lugares, tenemos unarepresentación unificada del mundo externo. Uno de los problemas másinteresantes es entender cómo es que el cerebro logra esta unidad perceptual, esdecir, cómo enlaza o une la imagen fragmentada para generar una imagencoherente, unificada, del todo. Éste es el problema del "binding" o del "enlace", unode los temas de mayor interés en neurociencias. 

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⏰ Last updated: Jan 06, 2020 ⏰

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