ELEMENTAL

Caven

Después de ver a Caven una incansable y exhausta pelea empieza, se abalanza sobre mí pero no puedo contra él ya que es más grande y fuerte, ha entrenado mucho más que yo y su vida aquí ha sido donde el mayor tesoro es la supervivencia y una corona tu
mayor meta, y bueno la mía en una superficie donde para lo único de lo que te defiendes es para cuando te van a robar el bolso donde solo llevas unas simples llaves de tu casa.
En fin, las dimensiones son algo maravilloso y diferente, ¿no?.
Ya no puedo más, siento mi última gota de sudor correr por mi mejilla donde me encuentro cansada y débil, me siento tan ligera tal como una pluma cuando éste me levanta del suelo y me estrella hacia el espejo que se encontraba en la habitación.
Siento como un pedazo de cristal atraviesa mi espalda y cruza, cuando caigo al suelo Caven se sube arriba de mi y toma la daga con sus dos manos. Laila entra por la puerta rápidamente, saca su espada de doble filo y corta rápidamente. Lo aleja de mí pero no
es suficiente, aunque estoy mareada aún puedo levantarme, agarro un trozo de cristal y me pongo en posición para atacar. A mi costado una luz brillante aparece, es Isabel.
-¿Qué no te dije que te cuidaras?- pregunta en un tono sarcástico y de regaño
-No, en realidad dijiste que no perdiera- respondo con una sonrisa en el rostro
-Bueno que lindo todo, mucho gusto me llamo Laila y si no les importa estamos en medio de algo importante, podríamos platicar con un té más tarde si gustan y si seguimos vivas.
Eso sí en esa parte tenia algo de razón, teníamos que lograr vivir aunque eso costara la muerte de alguien más. Rápidamente lanzo el pedazo de cristal que estaba entre mis manos y este le cae en el hombro izquierdo, pero no me parece muy dañino ya que pareciera que no sentía dolor alguno. Laila lo golpea y lo aturde un poco, pero Caven sigue como si nada hubiera pasado, como si no lo estuviéramos atacando. Sigue Isabel con un arco de madera pintado; parece insignificante sabiendo los poderes que tiene, saca una flecha y susurra algo que no alcance a escuchar muy bien, dispara y esta se multiplica, fascinante, parece aturdirlo más y así aprovecho para lanzarle un rayo. Como
era de esperar lo electrocuta e inmediatamente llamo a Evangeline.
-¡Oh Melanie!, ¿que te sucedió? -Evangeline parecía un poco confundida
-¿Le dijiste a él que hiciera eso?- le pregunto enojada
No, por supuesto que no, Laila fue la única a la que le pedí hacer algo así -puedo ver en su cara la confusión
-Entonces, ¿por qué lo hizo? -pregunta Isabel
-¿Ya vieron esto? -interrumpe Laila mientras que algo sale de su oreja
-¿Es un gusano? -solo me preguntaba ¡qué diablos estaba pasando!
-¡Oh diablos! aléjense rápido de él y llama a las Henger´s -nunca habia visto tan asustada a Evangeline, pero lo que dijo después me asusto completamente-. Después de todo él no fue quien las atacó -dijo al final dejándonos a todos confundidos ante la situación.