❝ prólogo ❞

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Jonah había quedado con su grupo de amigos en una heladería que quedaba a solo unas cuantas cuadras de su casa. Y como la mayoría de las veces en las que se reunían, Jonah había llegado de los primeros, esta vez llevando consigo a su hermana menor: Noelia.

—Sentémonos por aquí a esperar.—Le dice el a su hermana, tomándola despacio de su muñeca y haciendo que se siente junto a el.

—Todavía no entiendo porqué me hiciste venir contigo.—Se queja la morena apoyando su espalda en el respaldo de la silla.

—Quiero que conozcas a mis amigos, te encantarán.—Dice el niño de 13 años emocionado.

Aproximadamente unos 5 minutos después cuatro niños junto a una niña de brillosa cabellera rubia se adentran al local buscando a su amigo con la mirada.

—Ellos son, ¡Por acá chicos!—Exclama Jonah mientras mueve sus brazos de un lado a otro. Esto causa la curiosidad de Noelia por lo cual gira su cabeza para verlos.

Sus ojos caen en el chico con jeans oscuros y chaqueta de mezclilla. Incluso, desde esa distancia, Noalia pudo notar los azules ojos que el poseía

—Hola bro.—Exclama un chico de cabellera rizada en dirección a Jonah, luego mira a la pequeña chica a su lado y le entrega una sonrisa.—Hola ¿Quién es ella, Jonah?—Pregunta apuntándola, causando que las mejillas de ella se sonrojen.

—Ella es Noelia, mi hermana.

—¿Tu hermana?—Vociferan al unísono los cuatro chicos, sorprendidos.

—Un gusto Noelia, soy Amber.—Se presenta la rubia que se había sentado a su lado, dándole un pequeño y corto abrazo.

—Hola.—Dice la castaña tímidamente. 

—Nunca nos habías dicho que tenías una hermana.—Noelia se retrae en su asiento al sentir la penetrante mirada azul puesta en ella.

Jonah solo se encoge de hombros y abraza a su hermana por los hombros, atrayéndola a si mismo.

Minutos después, el grupo inicia una conversación.

Para Noelia en ese momento sus manos eran la cosa más interesantes.

En todo el tiempo que estuvieron en el lugar, la morena solo levantó la cabeza y par de veces.

Sin quererlo, su mirada iba directamente al chico de chaqueta de mezclilla, el tenia algo que le llamaba la atención.

Pobre Noelia, no sabía que años después, Daniel Seavey sería su perdición.

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¡Hola hola caracolas! ¿Cómo están? Aquí vamos con otro fan fiction de why don't we.

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—C.

𝓙𝓾𝓼𝓽 𝓪 𝓬𝓻𝓾𝓼𝓱 | 𝓓𝓪𝓷𝓲𝓮𝓵 𝓢𝓮𝓪𝓿𝓮𝔂  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora