LOST

II.

Me duele la cabeza, ¿Dónde estoy? ¿Cómo llegue a mi casa?, recuerdo los chupitos, las miradas con Damian y...

-¡Oh noo! –Grite recordando vomitar y besar a Mathias. –Mierda mierda mierda.

Enseguida le escribí por chat a Cece.

-Cece, ¿Qué paso anoche? ¿Mathias como sabia mi dirección? Estoy entrando en pánico. –Le escribí, mientras entraba al baño para darme una larga ducha.

Mientras me metí a la tina, revise mis redes sociales y encontré la solicitud de Mathias, Damian, Tony y Nicholas. Me avergoncé solo de pensar en que hice anoche y no recuerdo, los acepte y al instante me llego un mensaje de Damian.

-No es bonito que estés por ahí con un amigo que apenas conoces. Bueno, en fin espero que estés bien y espero un mensaje. –Solo pensé en que quiso decir con eso.

-No volverá a pasar, lo aseguro. Gracias por el mensaje, que lindo. –Con corazón o sin, no sé ni por qué me preocupo por eso.

Deje el celular donde no pudiera mojarse, y me sumergí completamente alejando todo pensamiento y quitando todos los olores y restos de ayer. Cuando salí del baño, me encontré a Cece sentada mirándome con chiste.

-¡Hey! Te di las llaves de mi casa pero déjame vestir. –Dije tapándome con la toalla.

-Ali nos conocemos hace siete años, cómo es que aún te da vergüenza. –Dijo mirando todo mi desordenado cuarto, gracias a anoche.

-Stalwood dime de una vez por todas qué paso anoche. –Dije ya frustrada.

-Amiga pues después de vomitar le dijiste a Mathias que te llevara, que no te dejara sola y Damian simplemente se fue sin despedirse, te pusiste brava y te fuiste con Mathias. Menuda escena. –Dijo silbando.

-¿Y por qué mierdas le diría a Mathias? –Estaba ya apretando mis cienes.

-¡No te da intriga por qué Damian se puso así? Tienes un nuevo pretendiente ¿O quizás dos? ¡Estás loca de remate Ali! –Dijo ella feliz y riendo y riendo mucho.

Tenía que dar monitoria a las dos de la tarde, porque aunque no lo crea nadie, he sido la mejor alumna en mi universidad y ya tengo un puesto como monitora. Sin embargo, moría por dormir toda la tarde, hoy llevaba una falda negra con medias veladas negras y un suéter rojo, con mis botines cafés. Mientras caminaba con mis libros por la facultad, revise mi celular y tenía un mensaje de Mathias.

-Oye, lamento lo de anoche, fue un simple impulso, espero que no estés muriendo de dolor de cabeza, no pases de tragos, te veo luego luego. –Me sonrojé y seguí caminando, aún no sabía que le iría a responder.

Y de repente me llego otro mensaje, pero esta vez de Damian.

-Linda, ¿Saldrás hoy con todos otra vez? Iremos a un Dirty Martini y quería verte.-Di saltitos mientras lo leía, no puedo creer que quiera que vaya hoy.

Dirty Martini era un café muy conocido en Londres y queda aún más cerca que el bar de anoche, creo que aceptaré.

-Damian hola, claro que me encantaría ir y verlos un rato, ¿Nos vemos a las seis? –Dije emocionada.

Guarde mi celular y seguí al salón de clase, después de unas dos largas horas di por terminada la monitoria, y por fin iría a casa a arreglarme para la noche, vestiría igual pero necesitaba una buena ducha.

Tire los zapatos muy lejos cuando entre a mi apartamento, este queda en un edificio frente a la universidad entonces lo que caminaba muy poco, pero igual me sentía exhausta de anoche, mientras me duchaba recibí un mensaje de Damian que confirmaba la hora, y solo faltaban 40 minutos para la seis, tenía que apurarme.

Al entrar a Dirty Martini los ojos de Damian se iluminaron y fue a recibirme el primero que todo, con un gran abrazo.

-Estás demasiado guapa hoy, Ali. –Me dijo al oído, mientras me daba un largo beso en la mejilla y un abrazo agarrándome muy fuerte por la cintura, yo ya estaba más que sonrojada pero me deje llevar, siguiéndole la corriente le devolví el beso.

-Tu igual. –le sonreí con picardía mientras me alejaba para saludar a los demás.