Preparándose

323 28 4
                                    

Llegó a su casa completamente exhausta, después de haber pasado todo el día en la universidad. Estaba a pocos días de las vacaciones de verano y los proyectos finales la estaban atosigando, sobre todo con las altas expectativas que tenía su madre en ella. Por si fuera poco, hacía más de cinco días que habían venido dos hombres de la Federación Internacional. Después de ésa extraña noche, su padre había pedido que el plazo de dos días que se habían dado para poner nuestros asuntos en órden fuera alargado a una semana, pues debía dejar la compañía lo mejor posible, además que yo necesitaba tomar de una vez los exámenes finales, una semana antes de los planeado para no atrasarme demasiado durante mi ausencia. Por suerte, las vacaciones de verano se acercaban, por lo que al menos podría dejar cerrado el semestre. Sin embargo, no sabía cuanto tiempo tendría que desaparecer; y el hecho de atrasarme en las clases mientras mis amigos continuaban sus estudios no me hacía demasiada gracia.

Todo éste asunto no me estaba haciendo ni pizca de gracia. Descubrí que parte del desasosiego que sentía era ocasionado por el miedo y la ansiedad ante la tan extraña situación. Mi padre no nos lo había dicho, pero yo intuía de más la razón de todo esto. Si la FNU necesitaba a mi padre de vuelta, sólo podía ser por una causa: Ataúd Risueño.

La era oscura había sido hacía ya más de veinte años, cuando diversas mafias de oriente se aliaron y consolidaron en las regiones céntricas de Japón, controlando desde esos puntos el mercado de China e India en las sombras durante más de dos años. Después de eso los operativos de la mega corporación fueron descubrieron por la Interpol, sin embargo, demasiado tarde. Habiendo tomado el dominio de varios países orientales a través de su débil infraestructura y con la ayuda de varias mafias europeas, Ataúd Risueño se consolidó como la cadena de delincuencia más grande de todo el continente Euroasiático. Varios antropólogos afirmaron que la razón del éxito de Ataúd Risueño fue que: En lugar de enfrentarse a mafias enemigas para conseguir poder, las absorbió. Varios grupos extremistas de oriente, así cómo poderosas sectas y demás asociaciones ilícitas desaparecieron por completo, seducidas por el poder de Ataúd Risueño y la promesa de carta blanca para hacer lo que quisieran. La anarquía comenzó.

Se realizaron varias cumbres en la que los gobiernos del viejo continente y representantes de los Estados Unidos de América se reunieron para discutir una solución clave ante tan poderosa red. Finalmente, y cuando América se vio amenazada en varios países de Centro y Sudamérica, se tomó la decisión global de unir fuerzas. La Federación de las Naciones Unidas fue creada.

Entidades gubernamentales cómo la CIA, el FBI y el M-16 pondrían todos sus activos a favor de la federación. Cada país tendría que ceder el veinte por ciento de sus fuerzas navales, aéreas y terrestres. La OTAN fue el punto de partida de la FNU, la entidad internacional armada más grande vista jamás. Después de eso, fueron tres años de una violenta y cruenta guerra entre la Federación de las Naciones Unidas y Ataúd Risueño. Guerra que culminó con la muerte de la mayoría de los jefes de la organización, la creación del MS-1 y una destrucción valuada en más de cincuenta mil millones de dólares.

Ataúd risueño había creado un antes y un después. Y a partir de entonces, toda escuela secundaria debía enseñar la historia de la Guerra Oscura, llamada así por las banderas que acostumbraban a usar los enemigos, una bandera negra con el dibujo de un ataúd sonriente. Era un curso elemental, pues no sólo repasaba la guerra más sangrienta que había habido, sino que mostraba la única vez en la que las grandes superpotencias se habían aliado contra un enemigo común, habían dejado todas sus diferencias de lado.

Ataúd sonriente fue algo terrible en la historia de la humanidad. —Solía decir nuestro maestro de historia. —Horrible, pero históricamente necesario. Nos acercábamos a un punto de declive debido a nuestras diferencias y absurdas peleas entre países. La tensión que existía entre Rusia y Estados Unidos era preocupante y estaba llegando a puntos de insostenibilidad. Necesitábamos un incentivo, una razón para unirnos cómo planeta, como seres humanos. La FNU ha sido la cumbre de nuestra evolución, cuando por fin nos dimos cuenta que somos de la misma especie, que debemos apoyarnos, para sobrevivir.

Misión: ProtegerlaWhere stories live. Discover now