El valor de la vida

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      Mi nombre es Freddy tengo 25 años y mi vida rutinaria, se basa en solo 4 cosas, comer y beber, dormir y sentarme en una silla a las afueras de mi casa, para ver el amanecer, atardecer y anochecer, conmigo vive una hermosa chica, pero no sé quién es, siempre me atiende con hospitalidad, y con mucho amor, a veces mi mejor amigo me visita y está siempre conmigo, y ayuda a la mujer también.

Pero un día me cansé de estar sentado en esta silla solo para que me sirvan, y decidí levantarme para enfrentar una vez más esta vida, me levanté de mi asiento y Salí a las calles, no pude creerme lo que vi, mucha violencia por todos lados, el ladrón se asociaba con el policía para robar, el guardia mataba a su gente, a los civiles y les quitaba sus pertenencias, cuando su deber es protegerlos, las leyes eran ignoradas, el pueblo moría de hambre, no se podía vivir cómoda o normalmente, sino que todo era sólo como una especié de supervivencia, muchos se suicidaban, y se comían entre sí, por la falta y lo excesivamente costosa que estaba la comida, otros protestaban en las calles, y morían de desesperación, la depresión les consumía, y las esperanzas poco a poco se desvanecían, todo mi alrededor era una completa anarquía, las personas no cooperaban entre ellas, sino que ellas mismas se estafaban robaban y mataban. La pobreza se veía en cada esquina y cada rincón de la ciudad, las personas pobres morían, y los ricos legales se hacían pobres, más los ricos corruptos se hacían aún más ricos.

Los sueños se desvanecían, las personas de este país salían corriendo huyendo, ya que eran prisioneros de su propio lugar de nacimiento, esclavos de su vida, los niños soñaban con robar, los que querían ser bomberos, quemaban en vez del fuego apagar, los abogados con meter más prisioneros a la cárcel, los constructores en destruir, y este era el caos al que llamaban vida en mi país. Pero yo decidí sacar a la mujer y a mi mejor amigo adelante en la vida, me volví profesional en todos los deportes existentes en el mundo, me volví el hombre más fuerte y más adinerado, era envidiado por muchos y querido por la mayoría, las chicas mataban por mí, y yo no me resistía a ellas.

Tenía todo en la vida y conocí a la felicidad. En las carreras era el más veloz, en las artes marciales el más ágil y rápido, en la música tocaba todos los instrumentos y podía tocar muchos a la vez, mi voz sonaba como la de los ángeles y mis discos se vendían demasiado, tenía todo lo que un hombre podía desear, a nadie tenía que mendigar, y mi ego por los cielos se fue a volar. No conocía las lágrimas ni la tristeza, me olvide de lo que se sentía estar en la pobreza, mis mansiones eran mi fortaleza y mis bastas colecciones de autos y de aviones eran una sin igual belleza.

Un día cuando llegue a mi casa me coloque a pensar y a admirar todos mis logros, me asome una vez más por mi gran ventana, y vi como mi país se pudría mientras cada vez más yo brillaba. Unos molestos pensamientos entraron a mi mente, los cuales me decían y retumbaban en mí "¿de qué vale tener todo el poder del mundo mientras el mundo se cae? ¿De qué vale ser feliz cuando te rodea la infelicidad? ¿Por qué tienes tantas cosas, y que con ellas aras? ¿No ves que todo lo que tienes con tu muerte se perderá, y tan sólo es vanidad? ¿No ves que tienes el amor de muchas mujeres, pero ninguna que te esperé en casa y te amé de verdad? ¿No ves que tienes tantas cosas, pero sólo una de ellas a la vez puedes disfrutar? ¿Qué pasará contigo cuando mueras, a donde irás? ¿A esto llamas vida o felicidad? Tu mejor amigo te daba todo su tiempo al igual que aquella mujer, ahora les das parte de tu dinero, pero no le das tu presencia, no le das tiempo, ni siquiera tienes tiempo para ti ¿Qué pasara si ellos mueren y tú no estás para verles morir? Y si caes en la pobreza y las falsas personas que dijiste que te querían te abandonan y quedas solo en la vejez, muriéndote sin que nadie sepa de ti, deja tu fantasía y baja a la realidad.

Luego de pensar esto, mis lágrimas salieron de mis ojos y cayendo de rodillas miré a mi alrededor y vi que estaba solo, que ya no había nadie, estoy abandonado en medio de mucha gente, y siempre he estado solo, ya no quería vivir en tanta soledad, que preferiría a dos personas que me amaran de verdad a estar entre tantas personas, que amen mis riquezas y logros sin sinceridad ¡Sólo quiero volver a ser como era! Pero ya no puedo, ¡No puedo...! Luego de repetirme esto tantas veces, miré a la ventana y me asomé al gran vacío. 10 pisos debajo de mis pies, quise subir al balcón y lanzarme desde allí. Así lo hice, me lancé y mientras caía sentía como mi absurda vida pasaba toda por mi mente como un corto momento, un pequeño instante que viví, todos mis logros se iban al vacío, y sólo me sacaba lágrimas pensar en esas dos personas que dieron todo por mí y yo sólo di algo de lo que me sobraba para ellos, estaba tan arrepentido que me quería desvanecer en cenizas, y ya estaba a tres pisos del suelo, y sintiendo la muerte cada vez más cerca, un gran vacío estaba corriendo mi interior, y estaba cayendo al suelo como una hoja de papel, un insignificante grano de arena más, en este pequeño mundo, ya podía sentir el gran impacto en el suelo, y ver mis entrañas esparcidas por toda la calle, también oía los gritos de miles de personas, viendo mi cuerpo en el suelo estos gritos eran semejantes a los gritos que me aclamaban con falsedad en mis conciertos y distintas presentaciones.

Cuando ya la vida me decía hasta aquí llegamos, escucho una dulce voz de una niña que me dice ¡Tío...! ¡Tío...! Despierta, quiero que me mires jugar, y abrí mis ojos esperando el impacto. Pero vi que aún estaba en aquella silla frente a mi casa, tan sólo estuve pensando, estaba en el gran mundo que habita en mi mente, y aún seguía siendo aquel hombre, que apenas mueve sus ojos, ya que mi cerebro tiene una gran enfermedad, la cual no me permite mover ninguna parte de mi cuerpo, ninguna extremidad, soy sólo una vida en un cuerpo muerto, un alma en una estatua, me entere que aquella mujer es mi esposa, la cual me bañaba, me llevaba a mi cama, me preparaba la comida y me sentaba en está silla, también me decía te amo todo el tiempo, y mi amigo siempre la ayudaba conmigo.

Soy tan sólo un alma en una piedra, y aun así me siento feliz, por todo lo que tengo, por poder ver a mi sobrina jugar, y tantas sonrisas, este absurdo mundo al cual me traslade me enseñó que si cumplo todo lo que solamente yo quiero, podría olvidar a las personas que me quieren, me hizo hallar el valor de la vida, no necesito que todo el mundo me adore, sólo necesito a pocas personas y me basta, lo demás es vanidad, al igual que todo lo que está bajo del sol, pero sé que algún día cuando muera, subiré más alto que el sol, con mi Dios, y seré aún más feliz eternamente, está vida sólo es pasajera, por eso puedo estar feliz, aunque no pueda moverme. Una milagrosa sonrisa se posó en mi rostro, he hizo llorar de alegría a mi esposa, ya que era mi primera en mucho tiempo, luego pude decir dos palabras las cuales fueron, "Fe...Liz...Vi...Da..." apenas pude decirlo, pero lo logré, torciendo mis ojos y con mucho esfuerzo y dolor ¡No necesito más de lo que tengo jejeje! Otros se quejan por todo mientras yo estoy feliz de lo poco que tengo y mi crítico estado del cerebro.

Fin... 

El alma en la rocaWhere stories live. Discover now