LA MUJER DEL CONDE MALDITO - Completa - Editada

CAPITULO V CONOCIENDONOS

Javier POV----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Amanda se había marchado hacia media hora o más, nosotros seguíamos arrodillados en el piso, y el psicópata de Tomás me miraba con odio. Yo sabía que él podía leer mi mente, pero no podía evitar recordar las últimas horas pasadas con Amanda, y al parecer a él no le hacia ninguna gracia que yo me hubiera acostado con su esposa. Me dije a mi mismo que tenía que pensar en otra cosa, por mi propia integridad y seguridad, porque si seguía así no iba a haber promesa que valiera, Tomas iba a descuartizarme.

- Toda la razón en eso – dijo el vampiro al leer mi último pensamiento, Lucas me miró adivinando lo que pasaba.

- Cuenta ovejas por lo menos – dijo, yo lo miré con molestia, ¿Cómo si fuera tan fácil dejar de pensar en esa mujer? Pero tenía que hacerlo, así que comencé a analizar mi vida antes de Amanda, inevitablemente termine recordando los hechos que cambiaron mi vida, cuando conocí a esa bruja, como me engatuso para que me alejara de mi familia y amigos y como me traicionó. Al ver el rostro de Tomas pude ver que estaba disfrutando con mi sufrimiento, pero por lo menos con eso se le irían las ganas de asesinarme.

- Eres patético – dijo poniéndose a mi altura – un cazador que no reconoce a una bruja como esa – Lucas me miró desconcertado, tuve que decirle mentalmente al idiota que él no lo sabía y que pretendía que siguiera de ese modo, pero a él no le interesaba eso – ¿Lucas no sabías que la ex novia de tu amigo era una bruja? – Lucas no supo que responder solo me miró, pero yo desvié el rostro avergonzado – Me imagino que tampoco sabes que está viva – Lucas se puso de pie, ignorando a los vampiros que lo amenazaban y se alejó de mí.

- Siempre supe que algo no cerraba en esa historia – estaba molesto y dolido – no era posible que esos monstruos pudieran contigo – se tocaba el cabello – no puedo creer que me engañaras todos estos años – estaba gritando – sabias que me sentía culpable por no haber llegado antes para salvarla – y si lo sabía, pero por cobardía nunca dije nada para aliviarlo.

- Lo siento – dije con la voz ronca, Tomas se puso de pie sonriendo satisfecho por su trabajo.

- Parece que esta pareja va a divorciarse – dijo a sus hermanos y estos rieron, me sentía terrible.

- Ya paso mucho tiempo – dijo Lucas, y yo me percaté que tenía razón, me puse de pie ante la atenta mirada de Tomas – ella ya debería estar aquí.

- Seguro huyó de nuevo – dijo una rubia – así que matemos a los cazadores – Tomas se enfureció, el miedo me hizo estremecer, pero no por ellos, sino porque yo sabía que ella no nos abandonaría allí, algo estaba mal.

- Amanda puede con un montón de zombis – dijo Tomas intentando calmarse, pero estaba seguro que él también estaba preocupado – Ustedes dos – ordenó a dos de sus hermanos – vayan a ver que sucede – y ellos desaparecieron en dirección al pueblo, pasaron 20 minutos más y regresaron, cubiertos de sangre y uno de ellos cargaba a Amanda, que estaba inconsciente - ¡que rayos! – dijo Tomás y se la arrebató de los brazos, Lucas se acercó a ver que sucedía, y yo también, estaba más pálida que lo normal, casi morada, y tenía varias mordidas en el cuerpo, que no estaban sanando, alrededor de cada herida tenía una mancha negra que crecía minuto a minuto.

- Es veneno – dijo Lucas seguro, Tomas lo miró buscando una explicación – ella no puede morir, pero el veneno la está contaminando, solo un hechicero muy poderoso puede hacer algo así – Tomas asintió y se puso de rodillas sin soltarla.

- Busquen algo para que coma – dijo a sus hermanos y estos salieron corriendo a diferentes direcciones, Tomás apoyo a Amanda en el pavimento y con mucha delicadeza tomó su brazo para comenzar a succionar el veneno de las heridas, hizo una cara de asco al probarlo, al parecer sabia horrible para él.