Revolution » Shawn Mendes

Capítulo 19

«Shawn en multimedia»

—Venga, Faith —murmuré. —. Tú puedes, ánimo.

Abrí la puerta de cristal haciendo sonar una campana que se encontraba fuera de la cafetería. Eran las cinco y media por lo que estaba a rebosar.

La cafetería tenía un ambiente navideño bastante acogedor. Me encantaba la Navidad aunque sabía que eso quería decir que debía reunirme con la familia. Todo sería mucho menos incómodo si papá no me obligara a asistir el día de Nochebuena a su casa con su, ahora, familia. Su esposa era muy agradable y su hija también, pero no me sentía en casa. Además de que no me gustaba dejar a mamá sola.

Recorrí la cafetería mientras me quitaba la bufanda, aquí no hacía frío. En cuanto llegué al mostrador, un chico de cabello negro y lacio miraba concentrado hacia su móvil.

—Perdone —llamé su atención. En cuanto levantó su mirada lo reconocí. Era aquel asiático del instituto con el que me había chocado. Un sentimiento de vergüenza se apoderó de mí, aquel día lo había tratado fatal y si ahora dependía de él que yo consiguiera este trabajo, estaba jodida.

El chico, al verme, abrió los ojos sorprendido. Tanto que el móvil que llevaba entre sus manos, cayó al suelo.

Me llevé las manos a la boca.

—Soy un torpe... —logré escucharle decir por lo bajo.

—Bueno, ahora ya estamos en paz —le dije, intentando sonar alegre. Estaba segura de que aquel chico se había llevado una mala impresión de mí aquel día y quería demostrarle que podía ser agradable. También necesitaba hacerlo por el trabajo. —. Ambos hemos tirado el móvil del otro.

Tenía las mejillas sonrosadas, quizá por la vergüenza, pero comenzó a reír. Su risa era muy dulce.

—¿Deseas tomar algo? —me preguntó, mediante se acercaba a la caja. Sonreí y negué.

—No vengo a por eso. Una amiga me ha concertado una entrevista para trabajar aquí.

Esa misma mañana había recibido un mensaje de Skylar avisándome de que me había vuelto a conseguir la entrevista, pero que esta vez no se me ocurriera faltar. Me había sorprendido bastante el mensaje ya que desde el funeral no había vuelto a hablar con ella.

—Ah —asintió y fijó por un segundo sus oscuros ojos en mí. —, eres la amiga de Skylar.

Fruncí el ceño. ¿Conocía a Skylar? Muchas veces me había preguntado por qué Skylar conocía a tantas personas del instituto si siempre íbamos juntas y apenas socializábamos. Incluso llegué a pensar que llevaba doble vida.

Y, sin embargo, los únicos que habíamos ido a verla al hospital éramos Max y yo.

—¿De qué la conoces?

—Nos conocimos hace unos veranos —me explicó, moviendo sus manos con rapidez. —, en un hotel de París. Nos hicimos buenos amigos.

—Bueno —mordí mi labio, recordando aquellos veranos en los que Skylar nos dejaba a Max y a mí solos en la ciudad ya que ella se iba con su familia a visitar alguna parte del mundo. —, ¿y cómo te llamas? Yo soy Faith, encantada.

—Encantada —alcé una ceja y éste se sonrojó. —, quiero decir, encantado.

—¿Y tú nombre, chico tira-móviles? —carcajeé. No sabía que fuese tan tímido.

—Eh, s-sí, lo siento —dijo nervioso. —. Soy Daehan y estás contratada.

Abrí la boca, con una gran sonrisa.