10 Razones para NO Enamorarse (#10RPNE)

Razón N°9: Necesidad -Parte1-

Razón N°9:  Necesidad.

Parte 1. Adiós. 

Habíamos vuelto a casa, y había notado un poco rara a Lucía. No tenia ese carácter tan  radiante de todos los días, estaba como 'apagada'. Le había preguntado una y otra vez, que le sucedía, y me había dicho que solo estaba cansada.
No puedes simplemente decirle a alguien que estas cansada, y menos si ese alguien te conoce de toda la vida.
Entonces decidí que era hora de una salida. Le envié un mensaje a Luke como la buena novia que era, y le dije, que debía descubrir porque Lu estaba tan triste.
Me contesto que no había problema, que me extrañaba, pero que Lucía era más importante.
Y morí de ternura.
Me derretí.
Me forme de nuevo.
Y fui en busca de mi amiga.

Camine las 4 cuadras que me alejaban de su casa, y golpeé a la puerta. Lo más probable era que ninguno de sus padres este allí.
Ellos nunca estaban.
Que triste era eso, en verdad los odiaba.
La puerta se abrió, dejándome ver a Sherwood, el mayordomo de la familia.
Si, así es. Tenían un mayordomo.
-Señorita Ana, ¿cómo esta?-pregunto amablemente, dejándome pasar.
-Bien, Sher, gracias. ¿Esta Lucía?-dije, encaminándome a las escaleras.
-Si, en su cuarto. ¿Quiere que prepare algo para que coman?-la amabilidad de Sherwood era la única que era real en esta casa.
-Si, por favor.-me di vuelta, subiendo las escaleras, y me detuve frente a la puerta de Lu.
-Si amor... si,lo sé...no todavía no...me da miedo como reaccionara...creo que como te dije antes es la mejor forma... ok... lo se...también te amo...-

<Probablemente este hablando con Max>

Golpeé la puerta, y oí unos ruidos provenientes de dentro del cuarto.
-...tengo que irme cariño...de seguro es sherwood con la limonada.- Abrió la puerta y me miro sorprendida.
¡vamos! Como si nunca la visitase.
-¿Ana? ¿Qué haces aquí?-pregunto, con el teléfono aún en la oreja.
-No, soy E.T. Pf, ¿qué voy a hacer aquí? Vengo a visitarte, dah.-contesté, adentrándome en la habitación y recostándome en su cama.
-Si, es ella...Okey, yo le digo...Besos.- se digno a cortar la llamada, y me miro.-Max te manda saludos.-levanté mi pulgar, dándole a entender que...eh...bueno, que nada.
Entro en el baño que adornaba su habitación y salió atando su pelo en una coleta.
-¿Qué te paso estos días?-me atreví a preguntar.
-Uhm, nada, ya sabes, los mismos problemas de siempre. Papá, mamá y todo esto del campamento me sacaron mucha energía. Estrés. Quizá en verdad necesite clases de yoga.-me sonrió sentándose en la cama, y le devolví la sonrisa.
-¿Sabes que estoy para lo que necesites, cierto?-asintió.
-Si, tu no te preocupes.-me acosté boca abajo, y dirigí mi mirada a ella.
-Vale.-
-Oye...-saqué mi celular, y comencé a escribirle un mensaje a Luke.
-Dime.-le di mi atención.
-¿Qué opinas de los tatuajes?-la miré extrañada.
-¿Tatuajes?-asintió efusivamente.
-Si, tu sabes, esos que son permanentes, y...que algunas amigas se hacen juntas...y blah, blah, blah.-enarqué una ceja.
-¿Me estas diciendo que nos hagamos un tatuaje?-pregunté, poniéndome de rodillas en la cama.
-¿Que tal si nos hacemos uno? ¿Como para sellar nuestra amistad?-la miré extrañada.
-¿Por qué ahora? Tenemos muchos años para hacerlos, no vas a irte a ningún lugar, no veo la prisa.-hizo una mueca.
-Porque...somos jóvenes y no sabemos si vamos a morir ¿mañana?-golpeé su brazo.
-¡No digas eso!-se sobó el lugar donde la golpeé y me dio una de sus caritas tiernas.-De todos modos, tendría que pedirle permiso a mis padres, y no creo que eso les gustase.-dije, imaginando todas las formas en las que me dirían que no.
-Nos lo haríamos en un lugar donde solo nosotras pudiésemos verlo.-susurró pervertidamente, y se gano otro golpe.-¡Vamos, Ani! ¡Por favooor!-hizo un puchero.-Ya tengo el diseño, el lugar, y la persona, solo necesito tu aprobación.-

Después de 5 tediosos minutos en los que me queme la cabeza pensando en lo malo que podría pasar, decidí hacer caso omiso a mi negatividad.
-Esta bien, lo haré.-dije luego de meditarlo con ayuda de las ricas masitas que nos había traido Sherwood. Una gran sonrisa apareció en su rostro.-¿Quién nos tatuará?-la sonrisa se borró, y una nerviosa apareció.
-Max.-
-¿Max? ¿Cómo?-se removió nerviosa en su sitio.
-En sus tiempos libres,trabaja en el tattoo shop del centro con su primo. Además, es un buen momento para que charlen y se conozcan.-alcé una ceja.
-¿Conocernos? Tú eres la que sale con él, no yo.-me crucé de brazos.
-Si, pero al menos yo ya pase tiempo contigo y Luke y se como es ese tarado, pero tu ni le haz hablado a Max. Sería genial que hablen, al menos del clima.-rodeé los ojos.
-Esta bien, ya me haz convencido de hacerme un tatuaje, hablar con tu loco novio no me hará nada.-una sonrisa apareció en su rostro, y me abrazo.
Extrañada por la muestra de cariño, obligue a mis brazos a moverse y poder abrazarla.
-Te quiero mucho, Ani.-me separé de ella, algo cohibida.
-Yo a ti.-susurré. Decidí que ya me había matado pensando demasiado en todo, y preferí dejarme ir.-Muéstrame ese tatuaje.-se acercó a su escritorio, y me extendió un papel. Sobre él estaba dibujado un infinito hecho con pájaros volando que decía 'LES INTOUCHABLES'.
-Es bellísimo.-susurré.
-Sep, los pájaros son por ti...porque cuando te veo me recuerdas a uno, no sé porque, pero lo haces...Supongo que es por la forma en que te dejas ir...-su voz se quebró un poco.-el...ahm, el 'Les Intouchables' significa 'Las intocables' y lo escribí en francés por mi descendencia, y bueno ya sabes porque escribí 'Las Intocables'.-la miré a los ojos, y rápidamente desvió la mirada. Sus ojos estaban algo aguados, y seguía con su comportamiento extraño.
-Lu...-me acerqué a ella.-¿pasa algo?-negó.
-No, solo...solo se me metió algo en el ojo, ya vengo.-se levantó y fue hacía el baño, dejándome extrañada.