CONOCIENDO AL REAL MIN YOONGI (你)

Once.

Evité a Yoongi durante toda la semana, cada vez que el ingresaba a la sala de ensayo yo salía casi huyendo.

Intentaba no mirarlo cuando se encontraba cerca, eso se me hacía casi imposible.

Me encontraba sentada en el sillón, mientras los chicos estaban siendo maquillados.

—¿Nuevamente aburrida?— pregunto Jin sentadose a mi lado.

—Un poco.

—¿Quieres ir por un cafe luego?— preguntó de forma nerviosa.

—Claro, sería genial— dije sonriéndole.

—¿Podrías esperarme hasta que termine la sesión fotográfica?— asentí sonriendo.

Justo en ese momento iba entrando Yoongi y llamaron a Seokjin para que se fotografiara.

Yoongi se sentó en la silla justo enfrente de mi ¿Acaso lo hacía a propósito? Me puse de pie rápidamente para salir de ahí. Me senté en el pasillo a esperar a Jin.

—¿Estás evitándome?— preguntó Yoongi.

Salté del susto.

—Me has espantado— dije colocando mi mano en mi pecho.

—¿Por qué estás huyendo de mi?— preguntó con calma.

—No estoy huyendo de ti— dije parándome para entrar.

Sentí su risa, otra vez se burlaba de mí.

—¿Te ríes de mi, idiota?— dije mirándolo furiosa.

—Dices que no estas evitándome pero cada vez que estoy cerca sales casi corriendo, justo como lo haces ahora—dijo parándose del suelo.

—¿Crees que eres importante para evitarte?— repliqué molesta.

—No dije eso— dijo serio— Sólo te estoy diciendo lo que pienso, como ves aún estoy siguiendo tu consejo.

Rápidamente vino a mi mente aquel beso que nos dimos.

—Yo no te he dado ningún consejo.

—¿Recuerdas cuando nos quedamos encerrados? Me diste tú el consejo antes de que nos besaram—

Lo interrumpí de inmediato.

—¿Estas jugando conmigo?— pregunté apretando mis puños.

—No, sólo te lo recordaba—dijo sonriendo.

—No es necesario que me lo recuerdes y tampoco es necesario que sigas mi consejo.

—¿Acaso ya no quieres ser mi amiga?— dijo sonriendome.

Seguía burlándose de mí.

—Eres un imbécil— dije apretando mis dientes para no soltar las lágrimas que se habían juntado en mis ojos.

De repente alguien abrió la puerta para salir. Era Jin, nos observó curioso.

—¿Estás lista?— preguntó mirándome.

—Si lo estoy ¿Ya nos vamos?

—Si, traje tu abrigo—dijo estirando sus brazos para posicionarlo en mis hombros.

—Gracias.

—Nos vemos luego, Yoongi—dijo Jin despidiéndose.

Yo solo permanecí en silencio mientras avanzábamos por el pasillo, dejando a Yoongi de pie junto a la puerta, solo.