Revancha.

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#EsHoraDePedirDeseos(?
#PorQueLaGenteLoPidio.





Chloe Reedus.

El chico de electrónica quería la revancha. Así que caminé por toda la ciudad mirando cada uno de los edificios buscando el que tenía anotado en una bolsa de papel. Me detuve es un edificio con una rara fachada y que parecía que lo pintaban cada veinte años.

Pulsé el botón del elevador y esperé. A veces me preguntaba que pasaría si un día iba en una de estas monstruosidades y se empezara a caer el elevador tipo Star Wars. Y no tengo un sable de luz.

Toqué en el numero que me dio y vi los ojos grises del chico después de esperar cinco minutos, me hizo un gesto para que pasara y me senté en el sofá sin pedir permiso.

—No fue fácil llegar hasta aquí —me disculpé.

—No importa.

Fue a algún lugar del apartamento, así que no me molesté en echar un vistazo al lugar. Varias fotos de mujeres, una foto de unos chicos pubertos junto a una rubia y unos cuantos cuadros de "arte".

—Elige el que quieras —dejó un montón de videojuegos en la mesa mientras encendía la consola. Este chico era como mi padre cuando un montón de pelirrojos corrían por toda la casa peleando un bote de helado; simpático.

Eh, sarcasmo.

Pasé los videojuegos uno por uno: Dark Souls III, Uncharted 3, The Lost Guardian, No man's Sky, Far Cry... ¡TODOS ERAN LANZAMIENTOS DE ESTE AÑO! Incluso encontré Plants vs Zombies.

—Se supone que este no iba a salir hasta el mes que viene —señalé Gears of war 4, atónita, esperé una buena respuesta.

—Llegan un mes antes —frunció el ceño—, pagué lo doble de mi paga para convencer al jefe de vendermelo.

—Oh...

La verdad es que solo vine para la revancha, pero que Allek Morris se desenvolviera un poco no estaría mal. Incluso a mi se me hacia un chico muy inexpresivo, como si tratara de ocultar algo de todos... Uh. Un delicioso misterio...

¡El misterio! ¡No él!

...

—¡TE GANÉ DE NUEVO, MORRIS! —deje a un lado el mando y me desprendí del sofá como un resorte. Hice un baile gracioso como el que solía hacer Tercera cuando compraba libros.

—Bueno, tengo hambre —pulsó el botón de inicio y se dirijio a lo que parecía la cocina.

—¡No huyas de la derrota! —murmuró algo en vi baja, hací que lo seguí a la cocina; para hacerlo enojar. Al menos ganaría una emoción de su parte.

—¿Alguna vez te habían derrotado? —Nuevamente entré a la cocina sin pedir permiso y miré de brazos cruzados como sacaba jamón del refrigerador.

—Unas pocas veces, si. —Untó mayonesa al pan— ¿Tienes hambre? —me preguntó, su vista concentrada en el maravilloso pan.

—Un poco.

—Bien, pues estás a punto de probar los mejores sandwiches de la ciudad. No te deleites.

Reí ante su comentario, lo gracioso es que no hubo rastros de diversión ante el comentario, pero su voz de inexpresivo le sentó bien. No se con exactitud si era un pequeña sonrisa de lado o una mueca de fastidio, ¡pero su inexpresivo rostro fue expresivo por unos segundos!

Lo agregaré a la lista de logros.

Permanecemos en completo silencio mientras pruebo "los mejores sándwich de la ciudad", que están muy buenos, pero no es algo por que lo habría de emocionarse... Mientras veo el juego en pausa, y etoy sentada en el sofá, tengo la necesidad de salir de una pequeña duda.

—¿Por que siento que lo conozco a él? —señalé, la foto de los chicos pubertos.

—No sé.

—El de ojos azules, ¿es Jax Wilson?

—Si. —asintió, y para mi propia sorpresa prosiguió — Si haz oído hablar de Mika McFly; también sale en esa foto.

—¿El escritor? —Uy. Murphy estaría alucinando. Asintió en respuesta y sin decir una palabra, tomó los platos y fue a la cocina.

Sacudiendo las boronas de mis manos, saqué el celular a toda prisa y fotografié a los pubertos. Incluso poniendo atención, Allek está a lado de una chica rubia muy simpática. Bueh. Posiblemente su novia.

...

Cuatro derrotas de mi parte más y una de él, papá empezó a llamar. Me despedí de Allek y el solo me hizo un movimiento de mano. Bueno.
Aún había sol, así que caminé con toda la naturalidad del mundo.

Justo cuando iba llegando a casa, vi al mejor amigo de Tercera en su jardín limpiando lo que parecía ser una bicicleta con rueditas traseras.

—Hola, Tony.

Dejó de fregar, se puso tenso y alzó la mirada: —¿Que? Ah. Chloe, si, ho-hola. —balbuceó, reí ante su expresión.

—Sigue limpiando esa linda bici —sus mejillas se pusieron rojas. Con una mueca de diversión en mi rostro, entré a casa.

...

La verdad no me resistí. 😔😛 Prometí un maratón, tengan su maratón. 🙈💕
En otro rato mas subo otro momento. 🍍

FanFic: Historias de Vhaldai [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora