El Proyecto Nerd (EPN#1) | ✓

Capítulo 4.

Capítulo 4 —"Emergencia"

El día siguiente

—La potencia de tres sobre cuatro, multiplicada por el recíproco; dividida por nueve veces la circunferencia de un círculo de radio treinta y tres, sería... —Miré a todos los que me miraban boquiabiertos. Todos se quedaron mirándome, con los ojos saltones y la mandíbula caída. No les había explicado a mis mejores amigos por qué había pasado por esta metamorfosis; no con Bruce, allí mismo—. ¡Chicos! Esto es matemática simple, ayúdenme. —Suspiré—. La respuesta es cuarenta y cinco punto tres —dije finalmente.

—¿Por qué? —preguntó Summer.

—Bueno, he multiplicado por el... —empecé a mirar mi trabajo.

—No, ¿por qué has cambiado? No es que no estés guapa, lo estás... es que... —Summer se interrumpió.

—Sentí que lo necesitaba, me cansé de lo que la gente me decía... no es que no sea yo —expliqué, diciendo en parte la verdad.

—¿Qué pasó con la Alex que no se preocupaba por lo que la gente pensaba? —dijo Anthony acusadoramente.

Me quedé mirando a Anthony.

Miré a Bruce. No podía decirles por qué lo había hecho o que Colin me había ayudado, eso era seguro.

—Solo estoy cansada de todo el acoso. ¿Está mal querer encajar? —pregunté.

—Es Colin, ¿no? Desde que empezaste a darle clases particulares, solo hablas de él —Anthony continuó levantando la voz mientras se ponía de pie.

No, no, no. No me gustaba Colin, ¿por qué no podían ver eso?

—No se trata de él. —Sacudí la cabeza, mis ojos se llenaron de lágrimas mientras miraba los números en mi hoja suelta.

—Si ella dice que no le gusta Colin, la creo. Ha cambiado, ¿y qué? Todo el mundo lo hace. Así que siéntate y cierra la boca —ordenó Bruce, haciendo que Anthony se sentara inmediatamente—. Y si a ella le gustara, no sería un problema, ¿verdad? Apoyamos a nuestros amigos.

Bruce miró de Summer a Anthony. Ambos asintieron lentamente.

—Perdón por maldecir, Oso Pooh. Puedes castigarme si quieres. —Bruce me sonrió ligeramente, haciendo que mis entrañas se derritieran. Era tan adorable, ¿por qué tenía que ser tan mono? Era un crimen.

Me sonrojé y me di la vuelta. A mitad de un problema de matemáticas, Bruce se inclina hacia mí, sus labios casi rozan mi oreja.

—Creo que estás preciosa. No es que eso haya cambiado nunca —susurró, haciendo que me estremeciera; lo que le hizo reírse.

Me aparté de él, sonrojada de pies a cabeza. Él se limitó a sonreírme y volvió a responder a la pregunta.

* * * *

— ¡Colin! ¡Colin! ¡Colin! —chillé corriendo hacia él, justo cuando salía de los vestuarios.

—¿Alex? ¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó sorprendido. Estaba tan emocionada que me quedé después de la escuela, esperé dos horas solo para que terminara su práctica de fútbol.

—No importa. Pero tengo algo muy emocionante que contarte. —Me detuve para dar vueltas en círculo.

—Muy bien, ¿qué es? —Colin sonrió, secándose el pelo mojado con una toalla.

—Bruce dijo... —empecé por debajo de un susurro, inclinándome hacia su oído. Él asintió lentamente.

—¡Que hoy estaba preciosa! —chillé en su oído. Se apartó y sonrió.