De mi, Para ti ® (En Corrección)

Carta.

Maddison

- Oww... si, pero... –trate de contestar pero me interrumpieron-

- Sus padres son geniales chicos, seguro ustedes también. –dijo un chico al fondo del salón-

- Gracias. –le dije y me quede mirándolo fijamente, era muy guapo, gafas... cabello realmente lindo-

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Llegamos a casa y nuestras madres nos estaban esperando con un rico pastel.

- ¿Cómo les ha ido? –dijo la tía Cristina emocionada-

- Han descubierto que somos sus hijos, no me gusta esto –dijo Nate con tono desagradable- no quiero que me reconozcan porque soy hijo de Alexander Vill –estaba enojado-

- Lo siento cariño pero no se puede hacer nada en ese caso –su madre acaricio su frente- tranquilo amor.

- Lo sé mamá.

- Entonces... ¿Qué tal? –dijo mi madre mirándome-

- Es genial –le respondí- quiero ser esto en mi vida, ya lo había dicho –ella sonrió- quiero ser como tú –me dio un beso en la frente-

- Te amo nena.

- Yo a ti mami ¿Ha llamado Daniel?

- Aun no, supongo que no ha tenido tiempo, recuerda que dijo que le había ido bien en su primer día...

- Lo sé... vamos a comer por favor!

- Esta bien, no seas desesperada.

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Daniel

Espero que estés muy bien, en realidad no sé cuando vayas a leer esta carta, pero cuando lo hagas primeramente quiero que sepas que te amo. No así como algo pasajero e infantil, te amo como no tienes una idea.

Al principio cuando te conocí fuiste la primera persona que me hizo pensar varias veces las cosas, nunca me había llamado la atención algún chico, pero tú estabas ahí, a mi vista siendo tan diferente. Pero éramos solo unos niños y tú siendo tan inteligente que seguramente pensarías que era una broma mía y no era enserio.

Me guarde todos esos sentimientos por años, pensaba hacerlo hasta que ingresáramos a la universidad y ya no te tuviera que ver, ¿Pero cuál fue mi sorpresa? Me tomaste en cuenta, te diste cuenta que estaba totalmente liada por ti y yo tenía miedo, siempre supe que te merecías algo mejor pero fui egoísta y me deje llevar, entre tantos problemas me pediste ser tu novia y yo estaba muy feliz. Eres una de las mejores personas que he conocido y el punto de esta carta es disculparme, aunque sé que es inútil porque esto duele como el infierno, lo sé amor... te pido perdón por aquellas veces en las que me ibas a ver al ballet y no podíamos salir, perdón porque nunca pudimos ver una película a solas, perdóname por todo.

Sé que no soy la mejor persona, pero quiero aclarar el punto de nuestro hijo, yo no lo aborte, perdóname Daniel se lo mucho que te habías encariñado con lo que estábamos pasando, así como tú, créeme yo también estaba dispuesta a dejar todo por ti y por nuestro bebé ¿te lo imaginas? Nosotros dos sin experiencia, siendo padres, me imaginaba algo muy hermoso y aunque sonara apresurado quería que todo fuera contigo. Mi mamá me drogo y me llevo a una clínica clandestina, perdóname por no haber podido evitarlo, pero no sabía que iba a hacer algo de esa magnitud.