Al día siguiente Melisa vuelve, ignora a Matt y se sienta al lado de su amiga, Vania.
Él la sigue todo el día con la vista y mis culpas se van lejos, volviendo así mis celos. La verdad, no me entiendo. Solo quiero llorar.
Y Matt no sonríe, no se acerca a nadie, solo está ahí, mirándola mientras ella lo ignora.
¡Un poco de consideración!
¿No? Nada, ni le deja hablarle.
Sigo pensando que quiero desaparecer ¿Por qué no desaparezco? ¿Por qué?
¡Maldición! ¿Por qué no puedo hacer nada? Escuchar o mirar es angustiante.
YOU ARE READING
Soledad
Short StoryAlí sufre por dentro, sufre por su ansiedad. Vive la vida como puede, hace lo que puede. ¿Qué pasa cuando tu mismo te destruyes por dentro? ¿Qué es lo que te anima a seguir? Otra historia de fobia social, por Viviana Valeria V.