Introducción

894 74 24
                                    

Comienzo del universo.

Planeta elemental.

Academia elemento.

Un pequeño rubio feliz. El niño Rayo baila con música a todo volumen, entonces Estrella se le acerca.

―Baja eso, Rayo ¡Rayo! Te estoy hablando. ―Pero el pequeño está tan feliz que no la escucha―. ¡Uf! ―Suspira ella―. Si no queda otra...

Rato después. 

Sala de castigos.

El pequeño Rayo sentado en una silla aburrido. Enojado inflando los cachetes, espera a que le digan algo para irse.

―¿Tú también? ―Aparece la niña pelirroja que había sido mandada a penitencia.

Rayo sonríe.

―Al parecer soy muy ruidoso. ―Se señala y luego a ella―. ¿Y tú que hiciste, Magma?

―Tú serás ruidoso, yo soy peligrosa. ―Hizo una risita―. Le quemé el pelo a una chica por llamarme fea.

―¡Ay! Eso da miedo. ―Se asusta.

―¿Eres tonto? Se lo merecía. ―Ella se defiende.

―Pero... ¿La chica está bien? ―pregunta preocupado.

―Dah, obvio que sí. ―Rueda los ojos.

―Ah, qué bueno. ―Suspira y sonríe.

Frunce el ceño.

―Tú siempre estás feliz, me caes mal.

―¡Wow! Primera vez que le caigo a alguien mal. ―Se queda pensativo―. Es bueno aprender de las nuevas experiencias ―exclama alegre.

―¡Agh! Qué idiota. ―Niega con la cabeza.

Él saca la lengua.

―Al menos soy más inteligente que tú. ―Luego se ríe.

Después de ese día la niña jura venganza, pero...

Días después.

Magma camina hacia el aula y escucha una hermosa melodía dentro de esta.

―Uh, qué bello. ―Se sonroja y va a ver qué es.

Al principio se sorprende, no puede creer que Rayo sea capaz de tocar una música tan suave y lenta que encandilaría a cualquiera. Con una guitarra como esa y una balada tan triste. Pero, ¿por qué triste? Al acercarse, se encuentra con el mismo niño que la hizo rabiar con la gran sonrisa que siempre tiene, aunque ahora tan solo es un nene llorando.

Rayo se sorprende y se limpia las lágrimas, dejando de tocar.

―¿Qué haces aquí?

―¿Por qué lloras? Nunca lloras, siempre estás feliz ¿Por qué...

―¡Rayo! ―La pequeña Cristal aparece contenta con una flor en sus manos―. Mira lo que me regaló Sonido... ¿Uh? ¿Qué te pasa? ―Luego observa a Magma―. ¿Qué le hiciste?

―No pasa nada, se me metió algo en el ojo. ―El niño finge estar feliz y se refriega la cara.

Ese día Magma se enteró de algo. Rayo no era tan alegre como todos creían, él sufría, él sufría por amor. Amor no correspondido, amor no correspondido de Cristal.

El tiempo transcurrió, designaron a todos los grupos de elementos y el tiempo siguió pasando. Todos crecieron.

―Hola. ―Magma llega a NR13, encontrándose con Sonido y Cristal―. Tanto tiempo. ―Sonríe.

―Se dice por ahí, que te exiliaron de tu grupo ―exclama Sonido―. No quiero ser grosero, pero no queremos problemas.

―Tranquilos, solo he venido a saludar. ―Hace su típica risita―. ¿Dónde está Rayo?

―Creo que fue al arroyo ―le responde Cristal―. Ya vendrá.

―No importa, lo iré a buscar. ―Corre en dirección hasta allí.

―¡No, no vayas! ―exclama Sonido, pero ella ya se ha ido.

―¿Por qué no? ―pregunta Cristal confusa.

―Se está... bañando.

―Oh. ―Se sonroja―. ¿Y entonces...?

―Ya no sé.

En el arroyo, Rayo se moja su cabello, las gotas cristalinas caen por su cuerpo y la corriente lo cubre hasta llegar a su ombligo. Su ropa se encuentra cerca de la orilla cuando unas sandalias pisan aquel pasto.

―Qué buenas vistas. ―Magma sonríe.

Rayo se sobresalta.

―¡Eh, tú! ―Se sonroja avergonzado.

―Soy Magma, que se te grave, lindo. ―Le guiña―. ¿No me recuerdas? Malo. ―Levanta su ropa del suelo―. Buena ropa interior.

―¡Oye, no toques eso! ―Se enoja―. Claro que me acuerdo de ti, tu apariencia ha cambiado, pero sigues siendo la misma niña molesta. Ahora deja eso de donde lo sacaste ―le ordena.

Ella ignora su pedido.

―Bonito tatuaje. ―Se detiene a observar el pequeño corazón con una daga que tiene dibujado en su pecho―. ¿Qué significa? ¿Sigues con tu amor no correspondido? Deberías mirar a otro lado y olvidarte de ella.

―Eres una metida, déjame en paz.

―No puedo. ―Sonríe―. Tú me gustas, me quedaré con tu ropa. ―Se la lleva y se va.

―¡¡Eh, regresa!!

Rayo no toma en cuenta la pequeña confesión que hizo Magma, solo piensa en su ropa.

―¡¡Mi ropa!! ―sigue gritando.

Presente...

Luego de todo lo ocurrido anteriormente y mucho más, como: La pérdida de voz de Cristal, que Sonido y ella se separaran, que Rayo haya tenido una oportunidad, que rescataran a sus amigos y todo volviera a ser como antes. Luego de todo eso, Rayo al fin decidió rendirse con el amor de su vida y dedicarse a la música.

"Conozco a un manager que escuchó tu música y está encantado contigo".

Magma le ofreció cuando lo vio luego de mucho tiempo otra vez, así que Rayo le consulta a su amigo sobre la propuesta.

―No lo hagas, Rayo, sabes como es Magma, debe estar metida en algo esa chica, puede ser peligroso ―Sonido le advierte.

―¿Qué tiene de peligroso la música? ―le pregunta confuso.

―Nada, Rayo, solo que eres muy inocente y no quiero que te hagan daño ―exclama preocupado―. Debes saber, que el mundo del espectáculo no es como te lo cuentan, debes tener cuidado. Mejor no lo hagas.

―Sonido, vamos ―Cristal lo llama para una nueva cita.

―Ya voy ―le avisa y se gira a Rayo―. Es peligroso, te lo repito, no lo hagas ―vuelve a advertir y se va tomando la mano de su novia.

Una punzada en el pecho al verlos juntos lo hace sentir mal y piensa, tocando la parte de su remera donde está debajo el tatuaje del corazón roto.

«La música no es peligrosa, me hace olvidar».

Rayo consigue un celular mientras piensa en cómo curar su corazón roto.

―Hola, Rubén, estoy interesado en tu propuesta.

Horas después...

Magma aparece corriendo feliz hacia él.

―Ya me enteré ¡Qué empiece el rock! ―Levanta las manos y se van los dos festejando.

¡Qué empiece el rock! 

Tatuaje de Rayo en multimedia 💘

Rayo ¡¿Un elemento de gira?! (S.E #6)Where stories live. Discover now