Me cogió de la cintura y me llevo hacia la cabina de un vatér, cerramos la puerta y la tapa del servicio. Me sentó en la tapa del servicio, ya bajada, y el se apoyo contra la puerta deslizándose lentamente hacia el suelo para tomar asiento. Bajo la cabeza mirando hacia su muslo, que acababa de destapar, cogió el trozo de plato roto y se lo volvió pasar por la lengua, mas tarde llego hacia el principio de su pierna, pude ver como las venas de su brazo empezaban a notar se e hincharse, introducio la punta en su musculoso muslo, mientras una sonrisa asomaba por su cara seguida por una lágrima que amenazaba con salir del ojo, iba deslizando con fuerza el instrumento a lo largo de su muslo dejando un camino de sangre que caía al lateral de su pierna.
Cuando termino ese largo corte, me ofreció el trozo afilado, lo cogí, aun tenia su sangre, aunque eso no me importo demasiado, estire mi brazo y con la punta de aquel instrumento rodee mi muñeca con un gran corte sangriento en diagonal, sin llegar a tocarme la vena. Aunque yo no me percate el estaba mirándome, parecía lujurioso, ¿Le excitaba esta situación?, en un descuido de perderme en sus ojos me cogió el brazo y paso su lengua por el corte, lamiendo toda la sangre que rodeaba la herida, mis pupilas se dilataron, mi pecho subía y bajaba a un ritmo incontrolable y el se reía con el efecto que su "juego" causo en mi. Aunque tuviera toda la pinta de un sicópata, su atractivo impresionante, sus ojos, su aire a chico malo y problemas, me atraía mucho mas a el, algo me decía que esa no seria la ultima vez que lo vería.
No quería concentrarme en el, seguramente esta sea una de las pocas veces que tendría la oportunidad de darme lo que me merezco, puse mi flequillo tapando mi cara mientras esta estaba agachada mirando hacia mi muslo, me subí la falda de ese "vestido", cogí el trozo, todavía inundado por nuestra sangre, y clave la punta en la parte superior de mi muslo, fui bajando poco a poco, pudiendo sentir el dolor, la angustia, recordando toda la mierda del pasado, mientras lágrimas caían por mis ojos mojando mis piernas, notaba sus ojos como cuchillas en mi, en como me cortaba, en las lágrimas que caían de mis ojos. Estire mi brazo dándole el instrumento, después mi mano no pudo evitar tocar las nuevas heridas que pronto se transformaran en cicatrices encerrando una parte mas de mis recuerdos.El dejo el trozo en el suelo, espero hasta que yo subí la cabeza y me miro fijamente, sus ojos revelaban todo el dolor que ocultaba, toda la misma mierda que yo tenia por dentro, su culpabilidad...
Miro mi pierna herida, acerco su mano, esperando si yo se lo impedía, no tenia fuerzas apenas, mi cuerpo cayo en el pozo de la agonía, estiro aun mas su mano y sobo mi herida, se acerco mucho mas hacia mi, aparto su mano y me cogió con bastante facilidad, estaba agarrada a su cuello y mis piernas rodeaban su cintura, el se sentó en la tapa, conmigo aun encima suyo, tenia mi cabeza apoyada en su hombro, mientras sentía como su mano subía por mi pierna, llego hasta la rodilla y se paro, empezó a subir mucho mas lento después de pasar mi rodilla, llego a mi muslo interior y lo apretó numerosas veces, mientras su boca se dirigía a mi cuello, lo beso y acaricio, estaba totalmente aferrado a el, sentí como mordía la carne de mi cuello, eso me hizo estremecerme, sentí como su mano empezaba a jugar con la tira de mi ropa interior a lo que yo respondí alejándome de el completamente, aun así seguía estando insegura de hacerlo ya que mi cuerpo lo deseaba, lo deseaba a el.
Abrí la puerta mientras cogí el trozo de plato roto a discrección, ya estaba caminando hacia la salida, rápidamente pero sin hacer ruido. A lo que el salio de la cabina del baño y pregunto algo que nunca le dije a nadie, jamas, ni a mis amigas:
- ¿Porque te haces daño?, ¿Por que te cortas?
Mi mano dejo de funcionar, mientras el trozo de plato roto cayo al suelo, dejando un golpe seco en el suelo.
