Carta de un soldado

Cap 5: La Playa

+++ELENA+++

Me desperté porque los rayos de sol me daban directamente en la cara, ahí fue cuando me di cuenta de que no estaba en mi casa, ni en mi cama, al principio de me asusté, pero me acorde de lo que paso la noche anterior

La bronca con el padre de Dayan, el baile, la gente preguntando lo de todos los malditos años, la escapada a la playa, sus besos, sus caricias, sus abrazos.. Solo de recordarlo me sonrojo

Me di cuenta de que estaba tapada con la chaqueta de Dayan, cosa que agradeci pues hacia un poco de fresco a estas horas de la mañana, me sente en la arena y divise a Dayan, sentado en la arena, mirando al horizonte pensativo

Me acerque a el lentamente y apoye mi cabeza en su hombro, el se giro y me sonrio con su hermosa sonrisa que tanto me enamoraba, me beso durante un rato, uno de sus besos dulces los cuales adoraba

-Buenos dias Elena

-Buenos dias a ti tambien Dayan-dije sonriendole

-Que tal estas?

-Mejor que nunca tu?

-Igual que tu

-Dayan, lo de anoche fue magico para mi-dije bajando la cabeza y sonrojandome

-Ey Elena-dijo mientras me levantaba la cabeza-para mi tambien lo fue-dijo antes de besarme

Después de estar un buen rato hablando en la playa, fuimos a mi casa a desayunar, mientras me bañaba Dayan se fue a cambiar de ropa

Dayan tardaba mucho en llegar y yo tenia un mal presentimiento, uno muy muy malo, paso media hora cuando porfin llamaron a la puerta, fui corriendo desde el salón donde estaba leyendo, hasta la puerta, al abrila me quede petrificada en el sitio por lo que vi

-Da...Dayan

+++DAYAN+++

Deje a Elena en su casa, mientras ella se bañaba, yo me iria a duchar y a cambiarme de ropa, al fin y al cabo este traje no es mio

Iva caminando por las calles, y no se porque pero todo me parecia mas hermoso hoy, la noche que pase con Elena fue magica para mi, estaba tan hermosa a la luz de la luna, lo que ella no sabe es que me quede mirandola durante un buen tiempo mientras ella dormia placidamente

 Sin darme cuenta llegue a nuestro pequeño hotel donde todos estaban desayunando, y se estrañaron de verme llegar, incluso me miraban de forma rara, pero a mi me daba exactamente igual la gente, y ellos no ivan a ser la excepción y tampoco me ivan a amargar el dia 

Llegue a mi habitación, y a los cinco minutos entro Enrique con una sonrisa de oreja a oreja, la cual me contagio en seguida

-Hola Dayan

-Hola Enrique

-Que tal la fiesta con tu novia Elena

-La pasamos genial, bailamos nos reimos fue la leche muchas gracias por dejarme tu traje Enrique eres el mejor

-No hay de que amigo, solo una ultima cosilla

-Cual?

-Sacudelo anda,que tienes arena de la playa en los bolsillos-dijo mientras se iva riendo y yo también me reia

Despues de sacarme la ropa limpia y dejar el traje de Enrique en el armario, me meti a la tina, en la cual estuve 5 min, no queria dejar mucho tiempo a Elena sola, a si que me seque rapido me peine y me vesti dispuesto a ir a su casa

Caminaba por las calles desiertas de ese pueblo cosa extraña pues eran solo las 11:30 de la mañana, supuse que estarian durmiendo por la fiesta de ayer, cuando llegue a la fuente del angel divise a mi padre, mejor dicho a mi odioso padre

Pase de largo, ignorandole, sabia que si hacia cualquier otra cosa, se iva a armar la de Troya, a si que como no queria problemas, intente por todos los medios posibles evitarle pero me fue imposible

-Eh Dayan, a donde vas?

-A donde a usted no le importa padre

-Ya vas a rebolcarte con esa ramera que tienes por novia

Me di la vuelta con una mala hostia increible, nadie hablaba asi de Elena y se iva tan tranquilo y menos mi padre

-Mire padre, tu ni nadie, habla asi de mi novia, entiendes? mi novia te guste o no ignorame pasa de mi pero dejame feliz con mi novia de una puta vez

 -Mira hijo te lo adverti anoche, y te lo repito ahora, alejate de esa ramera, solo te traera mal

-Y yo se lo adverti también anoche, dejenos en paz o atengase a las consecuencias

-Dayan no me amenaces y menos por defender a esa puta

-Que no la llames asi joder-dije cabreadisimo a dos centimetros de su cara

Y sin saber como me encontraba en el suelo tirado, con un puñal clavado en el estomago y mi padre propinandome patadas a la cara las cuales me intentaba proteger como podía, en mi mente solo un pensamiento: Elena. Me jure a mi mismo que ayer por la noche no seria la ultima vez que la veria vovleria a por ella hasta incluso despues de la guerra, por fin encontre un motivo por el cual luchar, y lo haria asta que se acaba mi ultimo aliento

Gracias a dios, mi padre se fue y Enrique llego a mi lado, ya que lo habia presenciado todo al igual que otros cuantos soldados, Enrique me ayudo a levantarme del suelo, aunque me dolía el estomago horrores

-Dayan, Dayan me oyes, pase lo que pase no te duermas entendido no te duermas-me decia mientras me hechaba agua de la fuente, la cual se habia tendido de rojo

-El..Elena, Enrique, Elena esta sola en casa, llevame a su casa por favor-le pedí mientras le miraba a los ojos

-Vale colega, pero no te duermas pase lo que pase

No se cuanto paso desde la ultima vez que me hablo, una hora, un min, solo se que llegamos a casa de Elena, y llamamos a su puerta, salio una Elena preocupadisima

-Da...Dayan-dijo a punto de llorar-Dayan que te paso?

-Na...nada tranquila Elena estoy perfectamente-menti no queria preocuparla mas de lo necesario

-Dayan estas sangrando mucho

-Elena, quiero que sepas que- cada vez me encontraba mas cansado, tenia la vista nublada, y sudaba a mares- Que Te quiero Elena

Eso fue lo ultimo que dije, luego solo la oscuridad, y pude dormir, y descansar sin ningún dolor