El secreto de Evan

1.5 (Parte 1)

"Ah... ah..ah..”

Las cejas delgadas pero oscuras se distorsionaron y crearon una curva. Kyle tenía los ojos cerrados, pero su boca estaba haciendo un sonido dulce. Sentía placer sin darse cuenta. Ben, que abrió los ojos antes de que saliera el sol, no podía dejar de ver la desnudez blanca y la dulce inclinación del Omega ante sus ojos. Metió la nariz entre las piernas, respiró profundamente y lamió el lugar. Mientras dormía, los genitales definitivamente reaccionaron. Habían pasado 12 horas desde que no tomó la medicina. La sábana cayó por debajo de él porque Ben se movía con su gran cuerpo en la cama. En las sábanas limpias, sólo había un joven desnudo y un lobo negro.

"Ah…ah…”

La lengua que había estado lamiendo los genitales durante mucho tiempo encontró otro lugar. Era un ano firmemente cerrado. También había un fuerte olor a omega desde ese agujero. Ben movió la lengua hacia allí y la lamió. Mientras dormía profundamente, el ano se estremeció y reaccionó a la lengua. La lengua larga golpeó la entrada y finalmente intentó invadir el interior. Al mismo tiempo, el rostro de Kyle se arruga un poco más sutilmente.

"Guau, qué…"

Kyle, que fruncía el ceño ante los sonidos que le hacían cosquillas en los oídos, finalmente abrió los ojos. Tan pronto como abrió los ojos, lo que pudo ver eran orejas negras con pelos cortos densamente incrustados. Los oídos agudizaron como si sintiera señales de movimiento. Dejó de mover la lengua y sus ojos se encontraron con Ben, quién levantó la cabeza. Mientras el sol de la mañana brillaba brillantemente en su cuerpo, el intercambio de ojos con los ojos amarillos de la bestia durante mucho tiempo provocó una extraña sensación de que algo en su cuerpo temblaba.

"Ben, ¿qué haces en la mañana?.”

Murmuró sin fuerza y empujó el grueso bulto de pelo. Las mantas cayeron al suelo al azar e incluso los genitales estaban erectos de nuevo.

"Puaj…"

Ben no fue fácilmente movido por la mano que lo empujó, sino que se frotó la frente en la palma de la mano con un gemido. Kyle casi se debilitó cuando tocó el pelo cálido y suave, pero lo empujó con determinación. Mientras dormía, nunca pensó que le lamería los genitales de esta manera. Pronto era hora de que los sirvientes los llamaran a desayunar, así que no había tiempo para seguir así. Kyle se levantó para lavarse.

"¡Oh dios mío!"

Cuando Kyle no escuchó, Ben gimió más fuerte y le frotó el cuerpo como si estuviera furioso.  Era un lobo inteligente, consciente de su tamaño y peso. Sabía que su dueño se quedaría atascado si presionaba con fuerza. Como Ben pretendía, Kyle no pudo salir de la cama y se quedó atrapado bajo su grueso pelo.

"No, Ben, tengo que ir a comer, tu también tienes que ir a comer"

Kyle, quien recordó que podía entender la palabra "arroz", lo dijo como si lo convenciera. Pero Ben era terco. Olió el fuerte aroma a Omega que emite su ano y ya tenía una erección. El lobo, habiendo aprendió que el aroma podía desparecer en cualquier momento, se comportaba muy obstinado. Salta sobre él y frota rápidamente su pene contra los muslos de Kyle. Había algo diferente a lo habitual, en vez de frotarse para aliviar el deseo fue más duro. La sensación de apuñalar sus piernas con la punta fue más rápida.

"Ben, por favor....”.

Kyle miró a la puerta con ansiedad. Aunque los sirvientes no abrieran la puerta, me preocupaba que Hector escuchara la respiración de este lobo gigante.

"La comida está servida, señor."

"¡Oh, sí, ya voy!"

Respondió con una voz urgente. Todavía estaba desnudo siendo montado por el lobo encima de él. Nunca en su vida había sentido su corazón tan fuerte. El corazón estaba latiendo más rápido que cuando intentó correr por su cuenta. Kyle alternó la mirada entre la puerta cerrada y Ben sin darse cuenta de que su cara estaba tan roja como el color de su cabello.