Katsuki Bakugo, un adolescente que sufre de una enfermedad llamada Xerodermia Pigmentaria (XP). Él está enamorado de Izuku Midoriya -o, como él lo llama, Deku-, Desde que tiene 7-8 años.
Un día estaba cantando en una estación de tren, pero no espero...
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Por un lado tenemos a Izuku, quien estaba en su habitación leyendo junto a su amigo Sero, quien solo veía su celular. Algo que le causó curiosidad al peliverde fue ver como su amigo le sonreía al teléfono mientras mensajeaba.
—¿A quién le escribes? —preguntó. Sero lo volteo a ver, apagando el teléfono y escondiéndolo.
—A nadie —respondió. Izuku suspiró, dejó su libro de un lado y se acomodo para ver bien a su amigo.
—Sero, ¿A quién mensajeas? —preguntó aún más lleno de curiosidad.
—A Shoto... —murmuró.
Era un murmuro que el peliverde no escucho porque esta medio sordo.
—¿A quién? —volvió a preguntar —. No te oigo si solo murmuras.
—¡A Shoto! ¡Me besé con Shoto! —grito sonrojado, arrugó el entrecejo y se metió entre las sábanas tratando de ignorar a Izuku.
—No. Él muy, muy tierno y tú le super encantas —rió moviendo a su amigo.
Y por otro lado, tenemos a Katsuki quien se estaba ideando un plan para salir con Izuku esa noche.
Él daba vueltas alrededor de su habitación, Kirishima, quien le estaba ayudando a encontrar alguna mentira buena, suspiraro cansado, llevaba dos horas escuchando las mentiras "buenas" que daba el cenizo.
—¿Y si le digo que voy a tu casa? —sugirió, el pelirojo negó.
—Tu madre puede llamar a mi padre para preguntar sobre ti —respondió Kirishima, Katsuki suspiró irritado tratando de pensar en algo mejor.
—Que tal si le digo que iré a casa de Denki, de igual forma ella no tiene el número de su mamá —sugirió, Denki, quien apenas estaba entrando a la habitación, levantó una ceja mientras comía unos dulces de chocolate.
—¿Me pides que te ayude a mentirle a tu madre para que salgas con un chico? —preguntó sorprendido, pues nunca espero eso de él —. ¡Nunca me he sentido tan orgulloso de ti! —exclamó contento. Katsuki sonrió, sabía que él lo ayudaría.
...\°^°/...
Mitsuki miraba un álbum de fotos viejas de Katsuki, sonriendo con cada una de ellas. Vió una de su esposo, sonrió triste mientras daba un beso en ella, siguió viendo todas las fotos, riendo de vez en cuando cada que veía alguna chistosa de su hijo.
Había veces en las que deseaba que su pequeño no creciera, que siguiera siendo su pequeño. Pero, sabía que no era posible, sobre todo sabiendo que su hijo moriría en cualquier momento.
Trató de no llorar, trató de no pensar en que, en algún momento, tendrá que despedirse de él para siempre, trató de no pensar que cuando Katsuki se vaya, ella quedará sola con el corazón destrozado.
