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Los meses pasaron rápido, desde la llegada de Luffy al monte, no a dejado de correr tras los dos niños, Ace y Luffy.

Ace a cada momento intentaba deshacerse de Luffy, pero iban a aceptar que el pequeño era persistente y resistente. Parecía inmortal, según Kyo.

Luffy era un niño lleno de energía y carisma, tenia claro sus objetivos y no se rendía para lograrlo. Prueba de ello es que después de tantos intentos de pasar tiempo con Ace y tiempo después con Sabo, siendo evadido por ambos, logro su lo llamaran hermano, aunque Kyo hubiera deciado que eso pasará de un forma mas tranquila, ya que se metieron con unos piratas callejeros y pasaron cosas que no le gustaron. Pero por lo menos ya todo esta calmo, ya que ellos ya no intentan matar al pequeño monito.

Y así estan los cuatro en estos momentos, amándose, protegiéndose entre ellos, en especial al mas joven, osea a Luffy.

- ¿Que fue lo que paso? - pregunto Kyo hacia Dadan.

- Esos tres mocosos se enfermaron con una fuerte gripe, justo hoy que teníamos que salir. - le explico uno de los bandidos.

- Entiendo. Pueden ir, yo cuidare de los tres. -

- ¿Hablas enserio mocoso? - le pregunto Dadan incrédula.

- Son mis hermanos menor, mi responsabilidad es velar por él bienestar de ellos, además se que deben ir a robar al pueblo para conseguir dinero y comida. Vayan tranquilos, yo me encargare de todo unas horas hasta que regresen. -

- Bien, regresaremos lo mas pronto posible, traeremos medicina también. - le dijo Dadan.

- Si te da tiempo, ve por frutas al bosque, para cuando despierten le harán bien las vitaminas y minerales de las frutas. - le informo Dogra.

- Te agradezco la información Dogra, irr por algunas en un rato. -

- Ya nos vamos mocoso. - le Aviso Dadan.

- Claro, suerte. - le dijo a los bandidos.

Cuando se fueron de la casa, Kyo fue por agua y unos trapos, los cuales los uso para minimizar la fiebre de los tres niños.

Se mentiría si dijera que no estaba preocupado, él sabia bien que la mas tonta enfermedad como la gripe, era un peligro si no lo era, ¿confuso? Pues la cosa es que, si no es gripe y tienen sus síntomas, puede ser una enfermedad peligrosa.

- Son unos tontos, ¿Como se les ocurre jugar en él lago a las 10 de la noche. - les hablaba bajo él mayor.

Cuando termino de poner los trapos en las frentes de los ASL, agarro una pequeña canasta y camino hacia él bosque, buscaría algo de fruta como le recomendó Dogra.

Era un mal día para esos tres mocosos, pasar de estar jugando un día, y que al siguiente esten enfermos, la suerte no les favoreció esa vez.

Él mayor estando en él bosque, encontró varias frutas, llenando rápidamente la canasta, recolectando ya las ultimas cerca del lago.

Al terminar se sentó un rato en la orilla del lago, descansando algo, estaba preocupado por esos tres, que empeoraran. Siguió mirando él lago tranquilo, escuchando solamente él viento y algunos pájaros cantar, hasta que vio como del lago aparecía una fruta azul algo grande, en comparación a las demás.

Cuando estuvo cerca de él la agarro y seguido la miro, ¿Una fruta del diablo quizás?, Nunca la vi en él libro de registros de frutas del diablo. Él sonido del estómago del Gold lo interrumpió de sus pensamiento.

Volvió a mirar la fruta, no resistió, su lado D le ganó.

Comió la fruta completa, cuando la trago, se cubrió la boca para no escupirla por su mal sabor.

𝑼𝒏 𝑹𝒆𝒗𝒐𝒍𝒖𝒄𝒊𝒐𝒏𝒂𝒓𝒊𝒐 𝑹𝒆𝒃𝒆𝒍𝒅𝒆- 𝑆𝑎𝑏𝑜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora